HIJO DE LA LUNA (TERMINADA)

CAPITULO 1

Era una noche cualquiera, una noche de luna creciente, en la oscuridad de noche brillaban un número sin fin de estrellas las cuales eran admiradas por una bella pelinegra de 17 años, su nombre, Milk, una huérfana que vive en un orfanato para niñas soñando con el día en que pudiera formar su propia familia y ser feliz.

"Que bella es la noche" pensaba observando el cielo nocturno "adoro su frescura y su silencio", continuaba pensando sentada en su ventana abierta, al girar su rostro a las demás casas, las cuales pertenecían a personas de la nobleza otro pensamiento apareció en su mente "Goku, ¿Dónde estarás?, me preocupa mucho que no vuelvas, te extraño mucho" decía en su mente, observó a la luna y su bello brillo

–espero que vuelvas pronto amor mío, y que al igual que yo observes la luna que siempre nos ha acompañado y también guarda nuestro secreto-dio un pequeño bostezo y se fue a acostar en su pequeña cama, vivir en un orfanato sin muchos recursos no era nada fácil, al día siguiente les esperaban muchas cosas por hacer, dándole una última mirada a la regente lunar se durmió.

El día comenzó, unos rayos de sol despertaron a la bella pelinegra, era temprano, pero así siempre comenzaba su día de trabajo ayudando a la dueña del orfanato, Uranai, que las cuidaba y ayudaba como si fueran hijas suyas, aunque no tuviera mucho dinero siempre hacía su mayor esfuerzo por proteger a todas las niñas que eran parte del orfanato. Las huérfanas se querían como si fueran hermanas y se apoyaban en todo lo que podían, también ayudaban con los gastos del orfanato, las mayores que eran Milk, Lunch de 16 años y Mai de 16 años eran las que preparaban el desayuno y el almuerzo para todas, también eran las encargadas cuando Uranai se iba de viaje por asuntos que pudieran mejorar la vida de las niñas en el orfanato y también trabajaban, como el pueblo de Fripan conocía su situación las apoyaban dándoles trabajo, más que todo a las chicas mayores. Milk se dirigía a la cocina, vestida de forma sencilla agarró uno de los delantales que están colgados detrás de la puerta de la cocina se dispuso a preparar el desayuno, algo sencillo, pero nutritivo, unos minutos después a la cocina llegó Lunch con una sonrisa radiante

–Déjame ayudarte Milk-dijo acercándose al refrigerador – ¿qué más falta hacer? -preguntó viendo los ingredientes dentro del refrigerador-

-falta preparar los sándwiches, el pan está en la bolsa de allá-dijo señalando la mesa del comedor-

-claro no hay problema-dijo agarrando los ingredientes del refrigerador, fue por un cuchillo del lavado y se dispuso a hacer los sándwiches- ¿Mai todavía no bajó? -preguntó desde la mesa del comedor-

-no, se durmió tarde por arreglar las ventanas ayer, la siguiente semana es mi turno de arreglar el techo-dijo sirviendo la leche en las tasas- ¿terminaste?

-si solo me falta ponerlos en sus respectivos platos-dijo acomodando los plantos con los panes sobre la mesa-

-bueno, iré a llamar a las niñas y a la señora Uranai-dijo saliendo de la cocina-

-yo pongo todo en su lugar no te preocupes-dijo acomodando las tasas y los platos-

-gracias-gritó desde el pasillo en donde se encontraban los dormitorios, empezó tocando las puertas-niñas el desayuno está listo, bajen a comer-dijo despertando a las pequeñas que poco a poco salían de su habitación y se iban al comedor. Milk llegó a la habitación de Mai.

- ¿Mai estás despierta? -dijo ingresando a la habitación observando a su compañera pelinegra en un profundo sueño- bueno que descanse un poco más-dijo en susurro saliendo de la habitación. Se dirigió a la habitación de Uranai, dio dos pequeños golpes a la puerta.

-señora Uranai, es hora de desayunar-dijo tranquilamente, se extrañó que tardara en responder- ¿señora Uranai? -preguntó

-en un momento bajo Milk-dijo en tono apagado, la actitud de la señora le pareció extraña a Milk, ella pensó que era por el cansancio de su reciente viaje.

-la esperamos abajo, tómese su tiempo-dijo yendo al comedor, en su recorrido se encontró con Mai y juntas se dirigieron al comedor donde las niñas ya estaban sentadas y sirviéndose la leche preparada por Milk.

-en un momento baja la señora Uranai, niñas coman tranquilas que todavía es temprano para que vayan a la escuela-dijo sonriéndoles, las pequeñas solo asintieron y comenzaron a comer.

En unos minutos más al comedor llegó la señora Uranai con un rostro entristecido, las chicas mayores notaron de inmediato la situación, algo no estaba bien, algo muy malo debía pasar para que Uranai, una mujer fuerte, decidida y protectora tenga esa expresión.

-Milk, Lunch y Mai, después del desayuno y de llevar a las pequeñas a la escuela quiero hablar algo muy importante con ustedes-las mencionadas solo asintieron a la vista de las pequeñas niñas, al terminar de desayunar Milk y Lunch llevaron a la escuela a las niñas, Mai se quedó lavando los platos y utensilios utilizados.

Cuando las tres jovencitas se encontraron, juntas fueron a la oficina de la señora Uranai, se encontraban muy nerviosas, se sentía una tensión, al llegar a la oficina tocaron la puerta, al escuchar el "pasen chicas" ingresaron a la pequeña habitación donde la señora Uranai realizaba un sinfín de papeleos y otras cosas, al notar la expresión de frustración en los ojos de su protectora les llenó de más dudas a las jovencitas.

- ¿Qué quiere decirnos señora Uranai? -preguntó una de las pelinegras, la mujer las miró a los ojos y la tristeza en esos ojos era muy notables.

-chicas, tengo noticias de la capital-dijo agarrando unos papeles- como hubo un cambio de alcaldes, el nuevo alcalde está imponiendo nuevas normas, por ello tengo una mala y una buena noticia, ¿Cuál quieren escuchar primero? -

Las jovencitas se miraron entre si y dijeron –primero las buenas por favor-

-la buena noticia es que nos darán un nuevo establecimiento en la capital-las chicas sonrieron por la noticia-nos darán apoyo económico y mejorarán el servicio y control de las adopciones-todo parecía bueno, pero algo más se escondía en esa noticia tan feliz, algo que perturbaba a la protectora de las chicas y las niñas.

- ¿Cuál es la mala noticia entonces? -dijo con duda, ¿Qué podría haber de malo en todo eso? Se preguntaban entre sí.

-lo malo es mis pequeñas-dijo cerrando sus ojos- el nuevo alcalde no es una buena persona, es una persona corrupta-tal comentario sorprendió a las chicas, el anterior alcalde era bueno- los nobles o ricos lo han sobornado para... para...-las palabras no salían de su boca, realmente era algo muy malo.

- ¿para qué díganos por favor? -dijo con mucho nerviosismo la pelinegra mayor.

-chicas habrá una subasta, para toda chica huérfana mayor de 15 años-dijo con lágrimas en sus mejillas, esas palabras sorprendieron demasiado a las jovencitas que no sabían cómo reaccionar a tal noticia.

CONTINUARÁ ...

bueno mis bellas lectora les dejo el primer capitulo de esta nueva historia, me alegran mucho sus votos y comentarios, muchas gracias.

espero que les haya gustado, les mando saludos y abrazos a todas

atte:

CELESTIACARITO