CAPITULO 32

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La bella pelinegra se encontraba muy pensativa con la oportunidad de estudio que tenía, "¿estudiar en la mejor universidad culinaria del continente?" pensaba mientras sostenía los folletos que el director Lin le había entregado, mostraba un gran edificio rodeado de un inmenso espacio libre lleno de árboles y gente sentada alrededor, varios de los ambientes de trabajo y estudios, se sentía confundida, tampoco quería dejar a la señora Uranai y a las niñas.

-te cuento algo pequeña-dijo el director sacando de sus pensamientos a Milk-me pareció muy raro que una universidad así se fijara en nuestra universidad o bueno nuestra facultad ya que mayormente estas becas están para las carreras de ingeniería-

-¿eso es algo malo?-preguntó con temor

-no, no lo es-dijo negando con la cabeza- para que alguien se fije en nuestra facultad tiene que invertir una buena cantidad de dinero, ya que en la universidad "luna plateada" cada carrera tiene un costo muy alto, por la infraestructura, los materiales y los espacios de trabajo-la pelinegra solo bajó la mirada al sentirse inferior-pero, si alguien se ha fijado en tu talento, es una buena oportunidad para ti, tendrías un mejor futuro y saldrías de la universidad con trabajo seguro-esas palabras animaron a la pelinegra-pero depende de ti, si quieres aceptar esa beca o te quedas con la nuestra espero tu respuesta en una semana-dijo sonriéndole

-muchas gracias señor director, no se preocupe lo pensaré bien-dijo levantándose y haciendo una reverencia de despedida

-espera-dijo buscando de nuevo unos documentos-se me está olvidando decirte algo-dijo buscando la carpeta de solicitud de la universidad extranjera-hay algo más que tienes que prever, por favor siéntate-la pelinegra obedeció algo confundida-se me olvidó decirte que en esa universidad la facultad de gastronomía tampoco tienen dormitorios para sus alumnos, entonces al igual que aquí debes buscar un lugar para hospedarte, ese es un factor muy importante que debes pensarlo también-dijo dándole la información

-muchas gracias-dijo con una sonrisa, saliendo de la oficina, se despidió de la secretaria y se fue rumbo al orfanato, su camino de regreso era un poco más largo ya que prefería una ruta donde no haya puestos de periódicos o publicidad, cada vez que pasaba temía ver alguna noticia de Goku al igual que hace seis meses.

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Mientras en una empresa en Fripan, Son Goku trataba de calmarse, hace unos momentos había hablado con su madre, la cual le hablaba de los preparativos de la boda muy emocionada, Goku cansado de la situación le había dicho la verdad, su madre se quedó algo desanimada y triste, prometió visitarla dentro de algunas semanas pero que desistiera de la organización de la farsa que estaba imponiendo Suno Snow, se sentía frustrado sin respuestas para solucionar sus problemas, debía encontrar a Milk y debía detener la farsa de Suno; a su oficina entró su mano derecha dentro la empresa, Picoro, al ver la expresión de sufrimiento de su amigo no dudó en preguntar

-ahora ¿Qué se pasa Son?-dijo de forma seria

-no sé qué hacer Picoro-dijo sosteniéndose la cabeza-debo detener a Suno y encontrar a Milk pero por los contratos no tengo tiempo para nada y los problemas siguen aumentando-dijo con una voz seria y frustrada, mientras Picoro lo veía pensativo

-ya que tú eres el que siempre tiene que estar en las reuniones y firmas de os contratos sería mejor que yo buscara a Milk-dijo de buena manera

-¿en serio, harías eso?-dijo con un poco de esperanza

-sí, pero ni se te ocurra cometer algún error en los contratos-dijo en forma de regaño

-no te preocupes ya aprendí, no volverá a pasar igual que en Paoz-dijo con una sonrisa-entonces ¿me ayudarás?-

HIJO DE LA LUNA (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora