→NARRA JESÚS←
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Hoy volvemos a sevilla, me duele haber estado en Madrid y no poder haberle dicho que nos podríamos conocer, pero es lo que hay que aguantar, aunque una cosa tengo clara y es que en cuanto todo esto acabe la buscare, no se porque con exactitud esa chica llama demasiado mi atención, es raro muy raro aun no haberla visto ni hablado con ella en persona, pero se que la necesito en mi vida.
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-¿en que piensas?- pregunta mi hermno, lo miro.
-en nada- contesto.
-¿te encuentras bien?- pregunta sheila, asiento-.
-estoy bien tranquilos- digo finalmente.
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Saco de mi chaqueta el cigarrillo que aquella chica me dio, sonrió al verlo y lo colocó en mis labios.
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-¿piensas fumar ahora?- pregunta mi hermano.
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Muevo el cigarro entre mis dedos y finalmente lo guardo
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-no, ahora no- sonrie.
-así me gusta- dice él.
-solo, no es el momento- recalco.s
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→NARRA YANAHARA←
Otro sábado más, sentada en el mismo balcón, fumando otro cigarrillo como el anterior sábado. Hoy mi casa se encuentra sola, solo yo y mis pensamientos, supongo que mas tarde saldré o iré a aquella azotea donde suelo ir cuando necesito desaparecer. Tiro el cigarrillo, me levanto, me visto, cojo el móvil -buenos días- dice un mensaje de Jesús, sonrió al leerlo.
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-buenos días Jesús-
-¿que tal?-
-bueno, no tengo de que quejarse-
-eso me suena a mal ¿cierto?-
-no, estoy bien jajaja-
-entonces me alegro-
-¿y tu?-
-bueno, estoy esperando-
-¿esperando?-
- el día en el que pueda conocerte-
-jajaja algún día quizás-
-algún día....-
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Dejo el móvil, me visto y salgo. Camino por partes de esta ciudad donde pocas personas van. Entro en un campo, camino por el, todo esta tranquilo no hay personas que griten, ni que contaminen solo naturaleza, cosa que poco a poco se va perdiendo. Tras un rato escucho como un perro chilla, chilla de dolor y desesperación, me guió por el sonido y corro, en cuanto llego veo a dos chicos, los cuales golpean al pobre animal sin razón alguna, tiro mis pertenecías al suelo y me encamino muy enfada hacia ellos.
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-¡¡¡dejarlo en paz!!! -grito y empujó a uno.
-¿y tu quien eres?- se acerca uno de los chicos.
-la que te va a meter una patada en la boca- digo enfadada.
-¿ah si? quisiera ver eso- dice el otro.
-no me retes- contesto.
-anda bonita vete que y dejamos en paz- dice, le da una patada al perro.
-¡¡¡que lo dejes!!!- lo empujó -dejarlo en paz
-¿o que?- me reta
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Subo las mangas de mi sudadera me acercó a él, él ríe yo sonrío y acabo metiéndole una patada en sus partes, él cae y se retuerse en el suelo, su amigo me mira y levanta una ceja, se acerca a mi y agarra mi cara, levanto mi mano, le doy una bofetada seguido de una patada, hace lo mismo que su amigo. En ese momento cojo al perro en brazos, corro a por mis cosas y salgo corriendo con él en brazos hasta llegar a mi casa y poder curarlo.
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Un brindis por lo que la distancia unió.🍻
JugendliteraturElla, en algún momento de su vida había sido dañada, ya no confía, no cree, no se ilusiona, ya no tiene miedo, sabe lo que existe y lo que no, piensa que todo tiene un limite, que nadie haría cosas por ella ya no piensa en cuentos de hadas, en...