Instagram Girl || Old Magcon

#70

-¿Como qué  eres la hermana de Cameron?- preguntó entrando a la habitación Shawn haciendo que deje de escribir.

-Bueno, no sé si sabes que tenés que tocar la puerta antes de pasar, pero no importa.- volví mí mirada al papel.

"Hey, Cameron.

Creo que te debes de estar preguntando porque lo dije de una vez por todas nuestro secreto, les juro que ya me aburrí de mentirle a todo el mundo sobre quien era o no era mí hermano. Ya era momento de que todos supieran la verdad, hasta lo de Scarlett. Ya no me importa nada.
Pero hay algo que no puedo olvidar, ¿recuerdas el día que viniste hasta aquí borracho?..."

-¿Por qué no me dijiste? Dijo Shawn sentándose enfrente mío en la cama.

-No sé, tenía miedo.

-¿De qué? Digo, no tendrías que asustarte porque Dallas es tú hermano.

-De que ustedes pensaran que todo era por mí hermano.

-¿Tenes retraso o te haces? Vida, no íbamos a pensar eso, supongo que nadie es tan idiota como para que eso se le pase por la cabeza.- rodó los ojos.

-¡Bailando, bailando, tú cuerpo y el mío cerrando en vacío, subiendo y bajando!- grito o canto Hayes, la verdad que no se me ocurría nada.

Me levanté rápido de mí escritorio y fui en busca de donde provenían esos gritos de ayuda, ahí estaba Hayes bailando al compás de la música que emitía su computadora mientras los chicos se reían y lo grababan.
Pero todo eso paro, los chicos dejaron lo que hacían cuando notaron mí presencia.
Suspire y les sonreí intentando aparentar que no pasaba nada, pero obviamente fue en vano.

-Explicanos ya, Elizabeth.- dijo Matthew mientras se sentaba con sus piernas abiertas.

-¿Qué cosa?- pregunte haciendo como si nada sucediera.

-No te hagas la imbécil, sabes de que hablamos.

Suspire.

-Soy la hermana de Cameron Dallas, ¿qué tan difícil es eso?

-¿Por qué nos dijiste antes?- preguntó Sam

-Tenía miedo.- encorve mis hombros.

-¿De qué? Que yo sepa no somos todos como Skate.- dijo Hayes para que luego Nate le pegará.

-No importa. ¿Podemos dejar esto un rato?

-Supongo que no hay problemas.- dijo Nash sabiendo que me incomodaba este tema un poco.

Nate me miró fijamente por un rato, parecía que me estaba analizando, quería saber que me pasaba, pero todo eso fue interrumpido cuando se levantó del sofá. Él me agarró fuermente del brazo y me llevó hacía afuera de nuestra casa, mientras que los demás chicos nos miraban sin entender nada, hasta yo no lo hacía.

-¿Qué mierda te sucede?- pregunté cuando me soltó.

-¿Vas conmigo hasta el supermercado?- preguntó mientras me agarraraba de la mano.

-¿Joda qué para esto me agarraste así?

-Puede ser, lil mamma.- me guiñó un ojo.

-Idiota.

Empecé a caminar adelante de él, pero luego el impacto de una mano sobre mí trasero me sorprendió. Me di vuelta un poco molesta, ¿poco? Eso es mentira, muy molesta.

-¡Nate!- grité mientras le pegaba un puñetazo sobre el pecho.

-Me amas.- rió

-Mentira.

-Verdad.

-Mentira.- rodeé los ojos.

-¿Segura?- asentí.- Ya vas a ver.

De repente Nate me agarró entre sus  brazos, y en un abrir y cerrar de ojos me encontraba recargada sobre su espalda. Él empezó a correr hasta el estacionamiento conmigo encima suyo, ¿cómo podía? Era un misterio.

-¡Bajame, imbécil!- le pegué en la espalda.

-Bueno, nenita.- dijo bajandome enfrente de su auto.

Le sacó la alarma al auto, luego se metió él y con su mirada fija en mí esperaba que me subiera, agarró y prendió un cigarrillo.

-¿¡Qué esperas!?- gritó desde adentro.

-¡Que me pidas perdón!- me crucé de brazos.

Él solo se rió de mí actitud, supongo.  Mi cuerpo se paralizo cuando él salió del auto, no quería que volviera a hacer lo de antes.

-¡Lo siento, nena!- gritó casi quedándose asfixiado.

Reí.
Tal vez esto no sea tan aburrido.