Blaze | Cavalcanti 2 |

9. Como Demian consiguió una cita.

Ver a Blaze escoger cereales en el supermercado, usando lentes oscuros y una vestimenta que escogí para él mientras Rose descansa en su pecho colgada de un canguro es una imagen graciosa, sexy y adorable y solo quería que todo el mundo lo supiera, así que furtivamente le tomé una foto y la publiqué... en todos lados.

—La iluminación es una mierda, solo quiero que sepas eso —se queja él haciendo un puchero mientras empuja el carrito, yo voy delante, concentrado en los estantes y la lista en mi mano—. Y no se ve la cara de Rose, así que estoy ciertamente ofendido, la censuraste.

—Por favor... —ruedo los ojos—. Así es mejor, si llegan a tomar la foto para ponerla en uno de esos post de padres sexys que hay por todo Facebook e Instagram, no tendrán un plano de la cara de nuestra bebé, lo que me parece seguro.

—Tienes un punto.

—¿Así qué te crees digno de aparecer en uno de esos post?

—Dime una razón por la que no calificaría.

—Touché... ¿Estos o estos? —yo tomo dos paquetes de pañales y se los muestro—. Me gusta como le quedan estos, no le aprietan ni nada —digo mirando el primer paquete, luego levanto el otro—, son suaves pero estos son más caros, iguales que los otros pero tienen un diseño muy bonito alrededor de la cintura y ella se ríe cada vez que se los muestro.

—Claramente ver jirafas alrededor de su cintura la hace feliz, así que estoy a favor de los caros —dice él.

—Bien, que para eso eres rico —pongo el paquete en el carrito—. Quería hablar sobre eso, por cierto... no quiero que crezca con el complejo de típica niña rica.

—¿Qué harás al respecto? Estamos pagando cinco dólares extra por un diseño de jirafas, Demian.

—Bueno, tenemos que dejarle claro desde el comienzo que tenemos dinero porque tu familia y tú trabajaron duro para construir una compañía que progresara —yo aplasto mi puño contra la palma abierta de mi otra mano—. Cuando tenga dieciséis tendrá que encontrar un empleo y comprar sus propias cosas ¡Quiero que conozca lo que es el trabajo duro por lo que quiere! Obviamente pagaremos por su educación y muchas otras cosas, pero si quiere algún capricho deberá pagarlo por sí misma.

—Yo planeaba darle todo lo que quisiera, pero esa también es una buena idea.

—¿Ves? Por eso es bueno tenerme a tu lado.

—Por eso me casé contigo.

Cuando volteo, él me guiña un ojo. Yo río, deseando besarlo. En lugar de eso me acerco a él para mirarla. Ella siempre está feliz cuando Blaze la carga colgada de su pecho y todo lo que ve le hace gracia. Es una niña risueña, pero también un poco mimada. Es feliz cuando está con Blaze y conmigo pero si me voy y los dejo solos empieza a llorar; realmente no le gusta que estemos separados. Han pasado cuatro meses de convivir como una familia normal y creo que nunca se me ha pasado el tiempo tan rápido. Tengo miedo de que si parpadeo, vea a Rose en el altar y a Blaze llorando a mi lado mientras me tiende los papeles de divorcio. Es una pesadilla recurrente.

—Qué lindo bebé —dice una señora que pasa a nuestro lado llamando nuestra atención—. Luce hermoso, un niño fuerte y sano.

—Es una niña —yo contesto con una sonrisa.

—Oh... —ella se ríe con sus mejillas sonrojándose—. Bueno, los bebés lucen todos iguales ¿no?.

—Así es —Blaze asiente—. Por eso todos los años más de diez bebés van con las familias equivocadas en los hospitales, tal vez ella ni siquiera sea la nuestra ¿Se imagina?