Secrets | h.s

Capítulo 13.

Salimos de Ralph Lauren después de que mamá rechazara los vestidos de ahí. La próxima semana teníamos cena con mis abuelos y hermanos de mamá en un restaurante, lucía nerviosa y al parecer era un evento importante, para mí sólo era una cena familiar.

- ¿Podríamos sentarnos un poco? Ya no siento mis pies. -Me quejo deteniéndome con una bolsa de zapatos en la mano-.

- Olvídate de que te compre algo. -Amenaza mirándome-.

Tuerzo los ojos, sabía cómo hacerme caminar. La seguí detrás pasando a través de la gente en el centro comercial. Se detuvo y volteó a verme, no entendía si expresión.

- ¿Ese no es Harry? -Dirige su mirada hacia un chico que está saliendo de comer de un restaurante y se queda parado sacando su teléfono-.

- Ma, creo me gustó un vestido que acabo de ver ahí, quiero ir a medírmelo. -Camino hacia la tienda con la esperanza de que mamá me siguiera-.

- Vamos a saludarlo ¡Harry!

Cierto los ojos deteniéndome. Giro lentamente sobre mis talones encontrando a mamá caminando hacia un Harry que sonríe hacia ella. Entonces como si supiera que estaba aquí me mira. Ahora sí tenía que saludar. Me dirijo hacia ellos, estaba nerviosa ¿Nerviosa por Harry? No, sólo... No sé.

- Hola. -Me inclino a saludarlo una vez frente a él-.

- Me alegra verte, Scar.

- Después de que faltaste toda la semana. -Hago una sonrisa fingida-.

- ¿Te enfermaste? -Pregunta mi mamá con preocupación-.

- De hecho...

- Ya, podemos irnos Harry. -Es interrumpido por una chica castaña que sale del restaurante, entonces al parecer no iba solo-.

No puedo evitar sentir molestia al ver a la chica cerca de Harry, no debería, no éramos amigos o bueno, quizá ya éramos conocidos.

Tuerzo la boca en una pequeña sonrisa sin dejar de mirarla, era bonita tenía que admitirlo; piernas largas y bronceadas, con unas curvas impresionantes, busto visiblemente más grande que el mío, y todo eso lo podía observar gracias al vestido rosa que se le ceñía al cuerpo.

- ¿También has faltado a trabajar? -Miro a Harry con una ceja levantada-.

- ¿Trabajas? -Pregunta mamá sorprendida-.

- Sí, he faltado. -Me mira esta vez con el entrecejo un poco fruncido- y sí señora, en las noches en un bar un poco lejos de aquí. Hoy estaré ya que falté toda la semana. -Una sonrisa se plasma en el rostro de mi madre-.

- Eres un buen muchacho, Harry.

- Gracias señora. -Asiente el ruloso con la cabeza y los ojos cerrados antes de mirarnos de nuevo-.

- Bueno, nosotras nos despedimos. Estamos haciendo compras para una cena familiar y bueno, debemos apurarnos. Que tengan buen día.

Mamá se despide de Harry y de la chica de beso, seguida de mí pero sin decir nada, no tenía nada que decir además. Caminando de regreso a la tienda volteo una vez más para mirar a Harry mirándome y pasando un brazo sobre los hombros de la chica quien ni siquiera nos presentó. Sigo a mi madre hacia la tienda que hace unos minutos quería entrar para evitar saludar.

Después de varias horas, terminamos comprando dos vestidos cada quien, un par de zapatos para mí y dos para mi mamá. Estábamos exhaustas y no habíamos comido nada.

- ¿Quieres ir a un lugar o pedimos algo en casa? -Pregunta conforme nos vamos acercando al auto en el estacionamiento-.

- En casa suena bien, tal vez papá no tarde en llegar o...