Ha pasado casi una semana y media sin Harry. Sólo hemos intercambiado algunas palabras y saludos en la escuela pero, de ahí en fuera nada. Incluso me ha llevado Moka blanco caliente en las mañanas, y aunque sea mi bebida caliente favorita, no me hace olvidar la razón por la que me estoy alejando de él.
Todo es muy complicado en este momento. Empiezo a entender muchas cosas sobre él; como el por qué a veces actúa tan raro, quiere decir que sí le afecta lo que está haciendo. James me dijo el martes que ha faltado al bar en las noches, su padre está furioso porque no ha hecho algunas tareas que le encargó y tampoco ha ido a la casa de Jeff para hablar sobre algunos asuntos importantes. En fin...
- Hola.
Voltee dando la espalda al casillero para encontrarme a Harry. Su pelo ya le había crecido más, sus rulos ya comenzaban a tener forma de nuevo. Se veía hermoso.
- Hola. -Contesté en una media sonrisa-.
- El cumpleaños de tu papá fue ayer ¿No?
Asentí con la cabeza levemente sin despegar el contacto visual.
- ¿La pasaron bien?
- Bastante. -Sonreí-.
Giré de nuevo hacia mi casillero para meter unos libros y sacar otros. La clase de física daría comienzo en unos cuantos minutos.
- Emmm... me voy en dos semanas a Londres y -¿Tan rápido? No recordaba no pasaría Navidad o Año Nuevo aquí- mamá quiere invitarte a cenar este viernes.
- ¿Este viernes?
- Sí, ¿Ya tienes planes?
- Iba a salir con...
Me quedé callada cuando iba a decir el nombre de Louis. Saldríamos a cenar. Una cena de amigos.
- ¿Tú madre no sabe que...
- No, ni siquiera sabe que estábamos juntos.
- Ya veo.
- No lo tomes a mal, es por tu seguridad.
- Bueno, dile a tu madre que no podré asistir.
- ¿Qué? Pero ya habíamos quedado...
- Terminamos, Harry. Lo siento.
- Así que es oficial. Me estás terminando.
Muerdo el labio con fuerza para no soñar débil. Me mataba ser así con él, sé que no era del todo malo pero tenía miedo tanto por él como por mí. No puedo quedarme a ver cómo se va metiendo a algo de lo que después ya no podrá salir.
- Adiós, Harry.
Me acerco a él depositando un beso en la comisura del labio. Camino hacia mi salón sin mirar hacia atrás. No soportaba la idea de alejarme cada vez más.
Durante el primer descanso estaba sentada en la cafetería con Valerie. Pude divisar a Harry entrando mientras reía y hablaba con una chica, Megan Thornhill, una de las zorras del salón de Harry. El estómago se me contrajo al verlos tan cómodos.
- Entiendo el que hayan terminado por su estilo de vida pero sigo pensando que no es mala persona.
- Lo sé.
- Recibe órdenes de su padre.
- Lo sé.
- No puedes estar así, Scarlett. Me molestas demasiado. Ve allá y dile a Harry que quieres regresar con él.
Tuvimos contacto visual por un instante y sentí todo el rubor subiendo a mis mejillas. Bajé la mirada apenada.
- No puedo.
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Secrets | h.s
Hayran KurguSu segundo nombre debió haber sido "secreto" porque él era uno y estaba lleno de ellos.