Secrets | h.s

Capítulo 31.

Otra vez encerrada en el cuarto, recargada en la pared comencé a pensar en cada una de las cosas que dejé pasar para no darme cuenta de la gran mentira en la que estaba viviendo...

- Me alegra que seas amiga de mi Harry. -Hago mis platos a un lado juntándolos con los demás sucios- hace mucho no lo veía convivir con una chica tras lo sucedido con Cl...

- ¡Mamá! -Grita Harry al escuchar el sonido de cristal haciéndose añicos-.

Por eso no me había presentado a su mamá como su novia oficial todavía, porque ella conocía a Cloe. La ex novia de Harry jamás fue Clarissa, siempre fue mi mejor amiga. James también me había advertido que me estaba mintiendo y viendo la cara, pero decidí ignorarlo. Harry intentó ponerme contra él.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de pistolas siendo activadas. ¿Qué está pasando allá fuera?

- James. -Susurré-.

Gatee hasta la puerta pegando mi oreja en ella para escuchar mejor lo que estaba pasando, sólo se podían escuchar algunas voces pero no lograba identificarlas. De pronto la puerta se abrió dejándome caer hacia adelante. Alcé la mirada mientras me tomaban de los brazos para alzarme.

- Suéltame. -Dije apartando sus manos de mí, no quería que volviera a tocarme o hablarme en toda su vida-.

Harry me miró entre molesto y triste ¿Qué pensaba? ¿Que todo estaría bien?

- ¡¿Scarlett?! -La voz de papá se hizo presente lo cual me dio muchísimo gusto, significaba que estaba a salvo-.

Entonces apareció papá en el pasillo guardando su arma en el pantalón. Se acercó a mí revisándome de pies a cabeza.

- Estoy bien. -Dije- ¿Dónde está James?

- La ambulancia ya viene para acá, te van a revisar y se llevarán a tu hermano.

- ¿Qué? ¿Qué le...?

Corrí hacia la bodega buscando a mi hermano por todos lados. Estaba tirado en el suelo boca arriba con el policía Gabriel tapándole lo que sería un herida a un costado del torso. Me acerqué deprisa hasta él arrodillándome.

- Vas a estar bien. -Acaricié su oscuro cabello mientras me miraba con cierto dolor en sus ojos por la herida. Había demasiada sangre-.

Harry apareció a un lado mío en cunclillas.

- Puedo hacerlo. -Dijo el rizado al policía para relevarlo. Gabriel asintió dejándole el lugar a Harry-.

James respiraba con dificultad y eso me ponía demasiado nerviosa, quería llorar pero no, era suficiente. ¿Por qué papá estaba tan tranquilo con esto? Mi hermano lucía terrible.

Observé el resto del lugar donde estaban Richard y otros tirados desangrándose. Miré de nuevo a Harry quien estaba concentrado en parar la herida. Su papá parecía muerto, ¿No lloraría? Al fin y al cabo, era su papá.

El sonido de sirenas de las ambulancias comenzó a hacerse presente más y más cerca. Mi pulso comenzó a estabilizarse, mi hermano estaría a salvo.

- Estarás bien. -Susurré tomando la mano de mi hermano con fuerza-.

Papá y sus hombres salieron a recibir a los paramédicos. Pronto entraron con una camilla, otros se acercaron a revisar a los demás heridos. Se llevaron a mi hermano rápidamente, evitando que se desmayara por la pérdida de sangre pero fue inevitable, también se llevaron a otros dos que obedecían a Richard, ellos en cuanto se recuperaren estarán en la cárcel, o peor, al menos eso espero.