Love me, please. {Gemeliers}

Confesiones.

Ari.

Miro a Jesús que espera a que reaccione a que hable, y hace un momento tenía las decisiones claras pero dios, lo veo y las ideas se van a la mierda. Quiero volver a ser los de antes pero ¿y si... no sé se cansa de mi? O peor, ¿y si ya no le gusto y hago el ridículo? Me mira intentando analizarme y trago saliva agachando la cabeza. Jesús me levanta la cabeza y me sonríe aún estando solamente a la luz de la luna es guapisimo. Me acaricia la mejilla y se muerde el labio mirandome. Para cuando me doy cuenta estamos a menos de un centimetro y nuestros labios casi rozandose.

-No lo pienses -me susurra- sólo hazlo

Se acerca aún más a mi acortando la distancia que quedaba entre nosotros y me besa. Y joder, un mes y medio sin besarlo, sin verlo, sin nada que tuviera que ver con él y ahora esto me hace jodidamente feliz. Le sigo el beso abrazandolo y él me imita. Creo que nuestros sentimientos quedan bastante claros tras este beso. Cuando nos separamos me abrazo a él y él me besa en la cabeza. Como lo echaba de menos.

-Creo que ha quedado bastante claro todo -dice riendo en mi oído-

-Aún así hay que hablar -le digo sonriendo y me roba un beso-

-Sigo pensando como he sido tan gilipollas como para perderte... -susurra más para él que para mi-

Beso su mejilla y lo miro. Me pilla mirandolo y me escondo en su cuello a lo que él ríe.

-¿No prefieres que te dé todos los besos que te debo desde hace un mes y hablar mañana cuando quedemos? -me pregunta-

-Mmmm... no sé yo -le digo y sonríe- ¿y quien te ha dicho a ti que quiero quedar contigo mañana?

-Yo mismo -dice confiado y río- ¿quedaremos?

-Pero para hablar eh, listilllo -le digo y levanta las manos inocente-

-Palabra de Jesús Oviedo -me dice y yo lo abrazo-

-Como te echaba de menos... -le susurro y me vuelve a besar-

Y así una y otra vez, y entre risas y besos pasamos otro buen momento juntos, uno de muchos y muchos que nos quedan.

Dani.

Después de la que ha liado Abby en el restaurante hemos ido a un 24h para comprar algo de beber y unas gominolas o algo para pasar el rato mientras Ari y Jesús hacen las paces o eso espero que pase. Miro a Abby con una sonrisa ¿que le habrá pasado para tratar así a esa chica? Beso su mejilla y me sonríe. 

-Nena -la llamo y me mira- ¿me puedes contar que ha pasado con Selenia?

Ella hace una mueca de asco y la miro. Hace como que va a hablar pero no dice nada.

-Paso -dice y se da la vuelta-

-Venga nena -la cojo del brazo y me mira-

-Dani, ¿que crees que va a ser? Lo de siempre joder -me dice apartandose un mechón de pelo de la cara- siempre que hay una chica nueva pasa, y eso es lo que he oído. Que si, "Dani se merece algo mejor" , que si "Mirala seguro que juega con los dos" , "tiene cara de guarra", "Dani la dejará enseguida" y  Dani a mi todo eso me afecta soy la tía más insegura del mundo y lo sabes, y te quiero de verdad y te conocí antes de todo esto, cosa que ellas no saben. -hace una pausa y respira hondo- por eso me he comportado así con ella, oí esas cosas y me trabe muchisimo, no quiero que me pase como a Mar, ni como a Blanca Viola, no quiero ser una mas de esa lista ¿me entiendes? Ellas tienen que entender que te quiero y que eres lo que a mi me hace feliz, porque tu sigues siendo Daniel Oviedo el chico que conocí hace casi tres años, no Daniel el de Gemeliers.

Poso mis manos en su cintura y la acerco a mí. Me mira a los ojos y puedo jurar que es una de las miradas más sinceras que he visto. La cojo de imprevisto cuando la beso y ella no duda ni un segundo en seguirmelo. Sonrío en medio del beso y nos separamos. Ella se abraza a mi cintura y yo paso mis brazos por sus hombros para abrazarla.

-Tú eres mi felicidad, nena -le susurro y veo como se encoge cuando le hago cosquillitas en la espalda- y te quiero más que a nada

Pasado un buen rato entre muchos mimos y risas volvemos donde estaban Ari y Jesús y los vemos besandose. Y como soy Daniel Oviedo, disimulador experto. Me pongo a gritar y a aplaudir como un loco.

-¡VIVAN LOS NOVIOS! -digo gritando y aplaudiendo a la vez-

A lo que ellos ríen y se separan.

-No es lo que parece... -dice Ari-

-Nah sólo estabas inspeccionando la boca de mi hermano con la lengua porque quieres ser dentista -digo serio y escucho como los tres comienzan a reirse-

-Eres idiota -dice aún riendo Ari-

-¿os quedaís en nuestra casa a dormir? -dice Jesús-

-Oh si espera que se lo digo a mi madre -dice Ari- si ajá creo que se creera que voy a dormir con los gemelos

-Dile que te quedas en casa de Abby y listo -digo yo-

Miro como Abby habla con su madre y le dice que sí. La abrazo y me sonríe. Jesús acaba convenciendo a Ari para que se lo diga a su madre y nos vamos todos a nuestra casa. Va a estar divertida la noche.

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Sé que son las tantas de la madrugada, pero así soy yo.

NUEVO CAPÍTULOOOOOOOOOOOOO.

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