Buscando a mi asesino

¿Tú?

— No te dejaré hacerlo. —Leah no estaba del todo de acuerdo.

Ayer, luego de recibir la nota de Steve decidí que si lo iba a enfrentar lo haría bien. Hoy en la tarde le conté a Leah lo que planeaba hacer, pero no le gustó para nada, en realidad ni a mí me gusta lo que implica encarar a ese tipo.
El cielo empezaba a oscurecerse, lo que significaba que Steve debe estar esperando.

— Es la única manera, además, no te estoy pidiendo permiso. —tomé mi bolsa y lo llené con cosas que quizá necesite; gas pimienta, un celular de repuesto y un pequeño cuchillo. Coloqué una navaja en el costado de mis botas y listo, me sentía como toda una protagonista de Resident Evil.

— Deja que Noel y yo te acompañemos, dime, ¿Dónde lo verás? —Leah puede ser muy insistente.

— No lo haré ni aunque traigas a la propia Alisson en versión Halloween.

Tomé mi bolsa para irme, pero Leah bloqueó el paso con todo su cuerpo.

— No saldrás de esta habitación Savannah. —puse mis ojos en blanco.

— Leah. Sólo quítate ¿Sí?

Mi celular sonó, lo miré y era un mensaje de un número desconocido, un video para ser más específica.

Leah se acercó para verlo también.

En el video Alisson estaba tirada en el suelo,  estaba en el mismo estado a la mañana cuando encontramos su cuerpo, la daga que la había matado estaba tirada en el suelo llena de sangre. El acto estaba echo, Steve había grabado todo ¿Cuán enfermo está ese tipo? La cámara se movió y dejó a la vista el torso de un hombre. La cámara fue subiendo lentamente hasta llegar al cuello pero entonces el vídeo se acabó

Mi celular volvió a sonar. Otro mensaje del mismo número.

«Tendrás el video completo y la libertad de tu noviecito si cumples mis condiciones.
- Steve»

Miré a Leah atónita luego de ver a Alisson en ese estado. Ella no vendría conmigo, nadie lo hará.

Tomé las llaves de mi habitación y salí tan rápido como pude. Leah no reaccionó a instante, así que fue más fácil para mí. Tomé las llaves y encerré a Leah en mi habitación. Mamá solía hacerlo conmigo cuando quería escapar a algún sitio, hay otra llave bien escondida dentro, pero no creo que la encuentre a tiempo.

Escuchaba a Leah gritar mientras bajaba por las escaleras, tomé las llaves del auto y salí como si nada hubiese pasado.

Para cuando llegué al cementerio el sol había caído completamente y nada más que el silencio gobernaba el lugar, la tumba de Alisson estaba a pocos pasos de mí, caminé lento, a cada paso mi corazón se aceleraba más. ¿Y si conozco a Steve? ¿Y si termino muerta al igual que Alisson? ¿Y si al morir Steve no cumple su palabra y Carl permanece en la cárcel? El miedo se apoderó de mí, tal vés y sí fue un error haber venido.

Dí media vuelta dispuesta a salir de ahí, pero al girar un hombre estaba parado frente a mí. Solté un grito al verlo, no por quién era, si no porque me cogió por sorpresa. Reconocí ese rostro, ¿Cómo no reconocerlo?

—¿Mark? ¿Qué haces aquí? —bajo la sombra de aquellos árboles Mark lucía como un extraño para mí.

— Pues... Es una bella noche para dar un paseo, ¿No lo crees? —se fue acercando a pasos lentos, por alguna razón yo retrocedía paralelamente a sus pasos.

Mark dejó a la vista una funda de tela negra, nada de ésto pintaba bien.

La verdad estaba ahí frente a mis ojos, pero no quería admitirla. La única persona que sabía que estaría aquí era Steve, aún así nada tenía sentido.

Mark dió un último paso hacia a mí, ese mismo pasó hizo que buscara el gas pimienta dentro de mi bolsa, pero no fuí tan rápida, Mark se abalanzó frente a mí quedando mis piernas bajo las de él mientras sujetaba mis muñecas con sus manos.

Hace cinco minutos esta escena pudo ser una reconciliación, pero ahora el tenerlo sobre mí me llenaba de temor.

— Nos vemos luego Savannah. —fue lo último que escuché antes de que de un golpe me introdujera a la inconsciencia.

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Quizá justo ahora están con cara de «¡¿KHÉ?!» jaja quiero decirles que éste es un capítulo corto, y eso es porque el próximo será mucho más largo, y es que el próximo capítulo será el final :c
Los amo ❤