Buscando a mi asesino

FINAL PARTE 1

Desperté con un agudo dolor en la cabeza, traté de mover las manos, pero me fue imposible, estaban bien sujetas con una soga, al igual que mis pies.
Me arrastré por aquel reducido espacio hasta llegar a una esquina donde pude acomodarme mejor. Todas las luces estaban apagadas y mi cerebro no reconoció e lugar hasta que las luces se encendieron, había venido aquí hace días, era la cabaña donde asesinaron a Alisson.

Escuché pasos acercarse hasta mí, al regresar la mirada ví a Mark parado de brazos cruzados. Ahora recuerdo todo con claridad, lo encontré en el cementerio y luego me noqueó de un golpe, estaba más que claro, él era Steve, sólo que no sabía cómo ni por qué.

— Despertaste. —sonrió, casi parecía el Mark que conocía.

—¿Qué estás haciendo?

— Lamento lo de las sogas, no podía dejar que escapes. —volvió a sonreír.

— Respóndeme. —subí mi tono de voz.

— Está cabaña ha sido testigo de varios asesinatos, así que ya sabes la respuesta a tu pregunta. —mi piel se erizó ante eso.

—¿Por qué? —más que enojo sentía miedo, es más, pánico de la persona que tenía frente a mí.

— Porque Savannah, yo soy...

— No, no lo digas. —si pronunciaba aquel nombre sabía que no habría marcha atrás.

— Steve...

—¡No! —grité— No te atrevas... —ambos nos quedamos en silencio por unos segundos.

— Tú y Alisson solían presumir que era su mejor amigo —se sentó sobre la mesa de centro—, la verdad es que no lo era. Siempre me usaron como su "escapatoria", cada que una de las dos se enojaba con la otra, recurrían a mí como su refugio, pero nunca las consideré como tal.

— Eso no es cierto. Siempre fuimos los tres...

— No, siempre fueron ustedes dos, y vaya que me dí cuenta tarde. Muchas de las veces hablaba con ustedes sobre mí y no me prestaban atención, ¿Sabes? Me utilizaban como su segunda opción, y sí, admito que eso dolía un poco, pero me acostumbré a ello.

—¿Es por eso que la mataste? ¿Eh? —soltó una carcajada.

— Savannah, no soy un psicópata —dijo entre risas—, aún falta historia por contar. Tenía un gran amigo de niño, su nombre era Paul Cavanough, vivía en Texas y tenía la misma edad que yo, mamá, papá, en fin, toda la familia le tenía mucho aprecio, pero lo que ellos no sabían era que traficaba drogas y pertenecía a una red de prostitución, así que cuando sus padres murieron ningún otro miembro de su familia lo ayudaron, fue ahí donde mi familia entró al caso. Mamá y papá decidieron adoptar a Paul. Viajamos a Texas para realizar el trámite de adopción, fue por eso que nunca les platiqué sobre el tema, regresamos a la ciudad, pero aún faltaba una semana para que él se conviertese en mi hermano. Yo le había platicado a Paul sobre ustedes y él quiso conocerlas aquel mismo día. —lo escuchaba sin decir una palabra.

—¿Qué día?

— Alisson y tú estaban en tu casa disfrutando de su patética pijamada —esa noche...—. Mamá quiso invitarlas para cenar aquella noche, así que le dí la dirección a Paul para que fuese por ustedes, cuando no volvió rápido fuí por él, lo encontré en el suelo agonizante —se acercó a mí—. Sus últimas palabras fueron «Ellas me dejaron morir»

La expresión de Mark no mostraba nada más allá de odio.

— Pero él lucía como alguien mayor...

— Las drogas aumentaban edad a su apariencia.

— Es por eso que luego te fuiste...

— Tenía que irme y planear mi venganza, tenía que ser implacable —acarició mi cabello—. Y sí que lo fué.

— Pero al volver... ¿Por qué nunca dijiste nada?

— Tenía un plan; volver, enamorarte y asesinar a aquellas amigas inseparables, pero descuida, no la pasé tan mal contigo —me miró con una cara perversa, sentí al asco al instante—, incluso había pensado en dejarte vivir.

—¿Entonces por qué estoy aquí?

— Te enamoraste de Carl —agarró mi cabello con su mano y tiró hacia atrás mi cabeza—. Ahora no hay razón para que vivas.

— Antes de que me mates... —dije con mucho esfuerzo— dime algo —soltó mi cabello—, ¿Cómo es que conseguiste tanto poder?

— Tomé el lugar de Paul en el negocio, conseguí un seudónimo y con el tiempo me convertí en el gran Steve Cavanough.

No dije una sola palabra más, pero Mark continuó.

— Recordarás a Connie —hace tanto que no sé de ella—, es prima de Paul, así que estuvo gustosa de ayudarme, fue ella quien trajo a Alisson hasta este lugar, pero luego se comportó como una cobarde y huyó, dijo que habías salvado su vida y bla bla bla.

— Siempre supe que tenía algo que ver... —susurré.

— Es todo, —se puso de pie—, han acabado la ronda de preguntas—tomó la daga que había usado con Alisson, y quién sabe con quien más—. Fue un placer Savannah.

—¡Espera!—grité, pero no se detuvo.

Mark estaba a pocos pasos de mí cuando de repente todo empezó moverse, la mesa de centro se volteó, las cortinas se abrían y cerraban, el televisor se volvió loco, todo el caos se desató...

................................................................................

Sé que dije que sería el último capítulo, pero se extenderá a uno más que será relatado desde la perspectiva de Alisson ;)