capitulo 16

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Hoy comienza mi rutina de nuevo en la universidad, tendré que preguntarle a Johanna si puede buscarme dado a que aún no puedo manejar, espero realmente que haya hecho un esfuerzo en adelantar los proyectos sin mí, ya que son proyectos para 3 o 4 personas y ella ha decidido que no necesitamos trabajar con más nadie que, solo las dos es más que suficiente.

*¿vienes por mí? *. le pregunto, aunque no es algo necesario, ella realmente nunca me ha dejado mal, a pesar de todo y aunque se lleva mal con todo el mundo, ella conmigo es una persona incondicional.

*claro boba, salgo en 5 min espérame en la vigilancia*. Guardo mi telf. en el bolsillo, termino mi desayuno y le doy un beso a mi mamá.

-bendición mama, ya me vienen a buscar te veo más tarde, te amo-

- que Dios te cuide, ten cuidado – me dice mientras me abraza. Decido mandarle un texto. a Adela, los últimos días no ha querido verme y ha actuado un poco distante, pero, sigue siendo mi novia, a fin de cuentas, aunque si esto sigue así deberíamos hablar, pero ahorita no tengo el valor de preguntarle, no quiero que se mencione la palabra terminar, ya ha borrado la foto que tenía en el perfil de su telf., la que se tomó conmigo luego de la operación, y eso me ha hecho sentir un poco mal, creo que solo necesita tiempo.

*hoy regreso a clases! Estoy emocionada*

*ok*. su respuesta me deja helada, es como si le importara muy poco lo que le estoy diciendo, de igual forma tengo que calmarme, buscaré sacarle conversación a ver si se anima un poco hablar conmigo.

*siiii, Johanna viene a buscarme * le escribo y me siento en la acera que está al frente del portón.

*ok*. ¿otro ok? no esperaba eso, mejor no le digo nada, pasaran mis horas en la universidad como siempre y ella en algún momento debe escribirme, subo la cabeza y noto que Johanna está estacionada al frente del portón de mi residencia, no sé cuánto tiempo lleva ahí, me he quedado unos minutos viendo los "ok" que se reflejan en la pantalla de mi telf. y me han dejado desorientada.

-llevo unos minutos estacionada en tus narices, te pasa algo? -

-no... no pasa nada, has hecho algo de los proyectos? - . no quiero contarle a ella ni a nadie mis problemas con Adela, normalmente los seres humanos tendemos a contar solo lo malo, y no quiero que mis amigos opinen mal de ella, tampoco quiero contarles lo bueno, ni la intimidad. Solo no quiero contar nada.

-no, estaba esperando por ti, estuve buscando los programas, pero bueno creo que solo nos va a servir en mi laptop, porque ni tu computadora ni la mía aguanta lo pensado del programa-.

Genial, que mierda... somos dos personas y una sola laptop, además que su laptop se reinicia a cada rato, se hace casi imposible trabajar en ella.

-bueno, si es lo que toca, toca- le digo, pero no puedo evitar poner mala cara, sé que no es su culpa, ni mía, pero tal vez si hubiésemos decidido trabajar con otra persona tendríamos otra computadora a la mano, al menos en el proyecto de fundaciones ha accedido a que agregáramos a Tobías al grupo, para ese proyecto al menos, podremos trabajar con dos laptops.

-tranquila, ¿sabes que podemos con todo no? - dice Johanna mientras se estaciona, y su seguridad me da algo de calma, tal vez no podamos con todo, pero, quiero a menos sentir que con su actitud lo podemos lograr.

-está bien- le digo y me bajo del auto.

Las clases de la mañana han resultado ser agotadoras, y mi día no termina ahí, tengo una clase después del almuerzo, luego tengo que esperar a que Johanna termine de dar sus clases de preparaduria y finalmente ver una clase más para poder ir a casa.

por siempre ella Donde viven las historias. Descúbrelo ahora