Capítulo XV (Pétalo Rojo)

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Ya íbamos de regreso a casa, yo estaba muy confundido. Ahora resulta que Kimberly Striker también resulta ser sospechosa, pero es algo imposible, ya que ella no conocía de nada a Ethan Brukling. ¿Como ella podría ser la persona del antifaz? Esto es algo muy raro. Pero a la vez interesante.

Al menos sabría que a mi madre ya no le pasaría nada, porque no se había quedado sola en casa.

-¿Qué te pasa hijo? No has dicho ni una sola palabra en todo el camino.

-No nada. No me pasa nada. Sólo meditada.

-¡Por Dios Dave! ¿Es enserio? Olvídate de todo por un segundo y disfruta del momento.

-No gracias Pato.

-Es verdad Dave Vásquez. Aprovecha los días como si fueran los últimos que te quedarán o como si fueras a morir mañana.

-¿Por qué me dices eso Kimberly Striker? ¿Acaso me vas a matar mañana?

-¿Estas loco o qué? Como te mataría. No soy una asesina. Además le tengo fobia a la sangre. Era sólo un decir. De saber que te lo tomarias así de mal, mejor no te decía nada. Pero mira como tu mamá disfruta cada día de su vida.

-Lo siento. Y tienes razón. Porque andar pensando en tonterías, mientras puedo pasar un buen momento con mis amigos.

Fuimos a un parque que habia de camino a casa. Por suerte el parque estaba vacío. Sólo para nosotros.
Habían 3 mecedoras y nos fuimos a sentar, cosa que dejamos a mi madre sólo, no podría pasar nada. Es un parque.
-A que no se pueden mecer más alto que yo. (Dijo Pato)

-Me estas retando. Porque acepto.

-Vamos chicos no van ponerse a mecer como niños chiquitos.

-¿Qué paso Dave Vásquez? ¿Tienes miedo? (Dijo Kimberly Striker en forma de cháchara)

-Ok. Pero después no estén llorando por que les gané.

Empezamos a mecernos una y otra vez. Más alto cada vez. Tan alto que hasta podía sentir que volaba. Y admito que eso me relajó mucho. Estuvimos aproximadamente 30 minutos en ese parque mociendonos.
Me olvidé completamente de todo incluso de mi madre.

-Carajo. (Me detuve y me pare de la mecedora muy desesperado)

-¿Qué pasa Dave? (Dijo Pato muy preocupado)

-¡Mi madre no está!

-Pero tranquilo Dave Vásquez, tu mamá ya es adulta. Quizá se fue  casa. (Dijo muy relajada Kimberly Striker)

-¡Peor aún! Lo siento, me tengo que ir.

-Espera Dave. Yo voy contigo.

-Yo también voy Dave Vásquez.

Por el camino íbamos muy pendiente de todo, mirábamos a todos lados. Admito que el susto y terror de perder a mi madre era inmenso.

Llegamos a casa, entre y empecé a buscar en todas las habitaciones, y no estaba. No sabía que más hacer. ¿Dónde podría estar mi madre?

-Dave. Lo siento pero se hace tarde. Me tengo que ir ya.

-Yo igual Dave Vásquez.

-Si claro.

-Adiós. Y suerte buscando a tu mamá

-Adiós Dave Vásquez. Ya veras que todo saldrá bien.

-Adiós chicos.

Se fueron y quede sólo y sin saber donde podría estar mi madre.

Volví a salir a buscar a mi madre, pregunté en algunas casas y nadie la había visto. Incluso pregunté en la que antiguamente fue mi casa. Todo seguía igual en esa casa. Admito que no sentí nada cuando llege hay, ni tampoco cuando hablé con la que un día fue mi madre.

-Buenas noches. Disculpe no ha visto a una..

-Espera. Porque siento que te conozco.

-Ehh.. No creo señora. Aunque quizá me aya visto. Vivo por aquí cerca.

-Seguro que no nos conocemos de otro lado. O incluso de otra vida. JAJAJA.. No mentira. ¿Qué me decías?

-Decía, si por si acaso no ha visto a una señora pasar por aquí.

-Pues lo siento hijo. No eh visto a nadie.

Hijo. En realidad mientras fui su hijo, ella jamás me dijo hijo.

-Ok. Gracias. Y disculpe las molestias.

-No como crees. Y suerte.

-Si. Gracias.

Me fui de hay muy tranquilo, admito que ya no me trajo ningún recuerdo, ni tan poco ningún tipo de sentimiento. Es como si yo ya me hubiese olvidado de aquella vida.

Seguí buscando a mi madre y a lo lejos la vi, ella estaba en un Rosal muy lejano de casa.

-¿Qué haces aquí mamá?

-Caminaba y me llamo la atención una Rosa Roja. Y me acerqué a ver.

-¿Es enserio?

-Si. La cortare y me la llevaré.

-Pero eso no es tuyo.

-Nadie se va a dar cuenta.

-Ok, pero rápido.

Una vez cortada la rosa mi madre me pidió que se la coloque en el cabello como adorno.
Lo hice.
Que bella se veía.
Le di un abrazo. Y cerré mis ojos cuando la abracé, para que el abrazo tenga más afecto.
Abrí los ojos porque escuché un disparo.
Cuando abrí los ojos estaba allí la persona de antifaz negro, tenía un Arma.
Pero a mi no me disparó.
Fue a mi madre.
Pude ver como su sangre caía como los pétalos de una rosa al marchitarse.
Me quedé paralizado sin poder hacer nada, además tampoco sabía que hacer.
Mi madre estaba en el suelo muriendo y yo estaba en Shock.
El asesino de antifaz se acercó a mi, y yo no hacia nada más que estar hay sin moverme. Mis lágrimas corrían por mis mejillas. Y yo estaba inmóvil.
Sentí un fuerte golpe en mi cabeza. Y lo último que vi ese día fue a mi madre muriendo.

Abrí los ojos. Todo estaba borroso. Yo estaba en el suelo. Cuando la vista se me empezó aclarar, me di cuenta que estaba en la montaña que hay cerca de casa. Junto a mi estaba aquella rosa que mi madre llevaba en su cabello antes de que pasará todo. No sabía cuanto tiempo estuve desmayado, ni tampoco que paso después del desmayo.
Me dolía mucho la cabeza.
Sólo quería que todo lo que estaba Pasando sea un sueño y no realidad.
Me levanté, sembré en el bosque aquella rosa de pétalos rojos. Y me fui dispuesto a encontrar al asesino de antifaz, sin importar quien se interponga en mi camino.

Friwhiss [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora