2. Miss. Hoffman®

4. Extraño

Casi corro por todo el lugar mientras mi mente solo piensa en Axel. Llegamos a la clínica privada que dijeron en el programa de Tv que vi esta mañana. Lily se encuentra igual de preocupado que yo misma, pero aun así nada me importa más él saber cómo está él.

Lily mantiene mi mano agarrada, pero las lágrimas ya están ahí.

¿Y si algo grave le paso?

Eso es lo único que mi cerebro piensa. El no, de todas las personas él es el que más me dolería si algo malo le llegará a pasar.

-Axel - susurro. Mis labios lo quieren conmigo y no sé porque.

La chica de la recepción nos ve como las dos con miedo preguntamos por él y cuando la noticia de su llegada a la clínica recae, casi muero.

-¿Él está bien? - pregunto llorando.

-Esa es información confidencial, pero por lo que sabemos Mr. Lehner se encuentra estable y en una habitación.

-¿Cuál es el numero?

-¿De qué?

-Su cuarto, el número de su cuarto - se exalta Lily

-Ah, está en la 202, en el segundo piso.

-Vale, gracias.

Lily sigue conmigo y trato de calmarme. Escucho algunos murmullos y veo como la puerta del ascensor cerrarse viendo el rostro de Camila. La veo, pero ella no a mí y me siento tranquila al verla relajada.

El sonido de una voz se muestra en alto dentro de su habitación y escucho el murmullo de Axel.

-Basta Alba - la regaña.

-Prometiste..., lo prometiste - se queja ella.

-Golpea la puerta - susurra Lily.

Temerosa golpeo la fina madera y se abre de inmediato. Susurro un "permiso" con los labios cerrados y entro despacio.

Lily me dice algo y sale de ahí. Yo asiento como si entendiera lo que dije y la veo irse. Aba me mira apunto de quemarme viva y Axel abre los ojos admirado. Luce un poco pálido y en su brazo lleva una pequeña escayola en el. Su rostro tiene algunos cortes y moretones, aun así sigue luciendo tan hermoso.

-Hola - susurro de manera suave.

¿Qué haces aquí? - arremete su novia

-Solo.....

-¡¿Qué haces aquí?! - vuelve a gritar.

-Yo...

-Alba, por favor. Solo cálmate

-No, Axel, está mujer.....no lo permitiré.

-Alba. ¡Basta, sal de aquí!

Alba me mire con los ojos llorosos y vota algunos implementos del que creo y fue el desayuno de Axel. Camina furiosa de ahí y golpea mi hombro.

Me quedo helada por su reacción pero no pienso irme. Axel me mira y peina su despeinado cabello. Recojo los artículos que tiro su loca novia y no sé qué decir. Nuca he estado tan nerviosa

-Tú -se aclara la garganta - Es decir ¿Cómo?

-Yo, escuche en las noticias sobre tu accidente. ¿Cómo te sientes? - hablo colocándome a su lado.

-He estado mejor.

Río

-Eso es bueno. Axel extiende su mano y me acerco de poco a poco hacia él.