T r e i n t a y u n o

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Me levanto de la cama con determinación. Después de la charla de ayer, estuve el resto de la noche pensando en qué hacer para poder solucionar la situación de la mejor forma posible.

Voy directo a mi vestidor y saco un vestido rayado, un corpiño, unas medias negras y un saco para no congelarme. Termino con las primeras botas que encuentro y me dirijo al baño para poder arreglarme un poco y no tener el aliento de zombi.

Por último, agarro mi bolso y me dirijo a la puerta. Voy directo al pequeño puesto callejero que tengo frente a mi departamento y me compro un café con una dona. Una vez que tengo todo, me ubico en la calle y levanto la mano para que algún taxi me lleve. Luego de unos minutos, uno se detiene y me subo en un ágil movimiento.

Le digo la dirección y desayuno mientras observo el paisaje de la ciudad, todavía con un poco de sueño. Me bajo del taxi con velocidad y me quedo en la puerta del departamento. Tan solo tengo que esperar unos tres minutos para ver a Kendall salir por la puerta.

En el segundo que me ve, sus ojos ruedan con indiferencia y comienza a caminar para el lado contrario del que estoy.

– ¡Kendall, espera! –Pero en lugar de detenerse, al escuchar que estoy caminando hacia ella, camina más rápido. –Por favor, solo te pido un segundo.

Logro correr hacia ella, pero no se detiene, así que camino con paso decidido a su lado, intentando mantener el ritmo. Malditas piernas largas que tiene.

–Kendall, por favor, escúchame. –Le ruego mientras que la corro.

–No quiero escucharte Selena, lo he hecho por años y no sirvió de nada. –Me responde con un nivel de frialdad que nunca pensé que escucharía de parte de mi hermana.

–Kendall, lo único que quiero es recuperarte como mi hermana, Harry no me importa, Zayn no me importa, por favor solo necesito que me escuches.

–Selena, lo que hiciste no estuvo bien, para nada. Se supone que no tienes que ser como yo, que tienes que ser mejor. Ya eres mejor en todo, pero tenías que ser la peor hermana mayor. Estoy llegando tarde al trabajo, no quiero hablar más contigo, por favor déjame sola.

–Sólo dime qué puedo hacer para recuperar tu confianza, por favor.

–Déjame en paz, prometo que voy a hablarte cuando esté lista, pero por ahora no quiero verte.

Sus palabras me dejan helada en medio de una calle transitada mientras que ella sigue caminando. Las personas siguen  su curso, pero yo no puedo moverme. Finalmente, me muevo camino a mi departamento devuelta, con una inmensa tristeza.

Pero una vez que llego a mi departamento y veo a Harry con un ramo de mis flores favoritas, entiendo cómo se sintió Kendall.

–No puedo hacer esto Harry, no ahora. Por favor, vete.

–Selena, no voy a irme hasta que me escuches, quiero disculparme. –Niego con la cabeza, es demasiado.

–No puedo ahora, en serio, por favor no me hagas esto. –Me acerco a la puerta, esperando que se mueva, pero no lo hace.

– ¿Podemos hablar? Por favor –Niego con la cabeza, no quiero ni siquiera seguir respondiéndole. Una vez que lo tengo más cerca, me doy cuenta del moretón que tiene en su cara y el pequeño corte al final de la ceja izquierda.

– ¿Qué te pasó? –Le pregunto, en un estado de confusión enorme.

En lugar de responderme, mira para otro lado, como si estuviera avergonzado. No necesito que me lo diga, sé que fue Zayn.

–La única forma en la que yo me voy a mover es si hacemos algún plan para vernos.

–Harry, cuando yo esté lista para hablar contigo, prometo que voy a escribirte para que nos reunamos, pero no es el mejor momento. Me estoy enfocando en mi familia ahora, no puedo pensar en ti o en mí.

Se levanta al escucharme, finalmente me entiende. Se acerca a mí y me abraza sin que yo me lo espere, por lo que no le respondo el abrazo. Puedo sentir cómo intenta transportarme todos sus sentimientos, pero no puedo ni quiero recibirlos, es demasiado para mí.

Después de unos minutos, me mira por última vez y se va, dejándome entrar a mi casa para poder procesar el día que tuve.

My Sister's Boyfriend | HarlenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora