Amor Prohibido - Pablo Alborán

Capítulo 29

Estábamos en su salón. Había pasado ya mucho tiempo y ninguno dirigía la palabra al otro. Estaba pensando que quizás no había sido tan buena decisión haber llegado hasta allí. Quizás debería haber dejado que siguiera con su vida tal cual como estaba.

- Oye... - Dije ya, al fin, no soportaba esta situación - No soporto estar cómo estábamos antes. Por eso he venido. Para hablar contigo, aclarar las cosas, decirte que siento mucho la manera en la que nos separamos y siento además haber intentado olvidarte y seguir con lo mío. Pero es que, no puedo. Cuando me enteré de que tenías novia y te ibas a casar, se me partió el mundo. Y créeme, que si lo quieres, me iré, no te pondré la vida patas arriba una vez más.

- Tranquila. No lo estás haciendo. Yo también te he echado de menos. Todos me decían que te olvidase, que no teníamos oportunidades, que era una tontería y que se pasaría. Todos insistían en que siguiera con mi vida, construyera un futuro, me casara. Pero no te he podido olvidar, Noelia. Desde el primer día en que te conocí, no he podido olvidar tus ojos, ni la manera de sonreír tan bonita que tienes cuando te pones nerviosa.

Sonreí. Definitivamente, no había sido tan mala idea venir hasta allí.

- Pero, Pablo, vas a casarte pronto. Y Carmen me dijo que estabas muy enamorado de tu novia...

- Intenté con ella para poderte olvidar, pero no puedo. Y ahora que estás aquí, justo unos días antes de comprometerme, me impresiona. Quizás sean señales que hay que seguir.

- Nada pasa porque sí. - Y lo besé. - Te quiero.

[...]

Y entonces, él cogió su guitarra y comenzó a tocar:

- Te he echado de menos

Todo este tiempo
He pensado en tú sonrisa y en tú forma de caminar
Te he echado de menos
He soñado el momento
De verte aquí a mi lado dejándote llevar ...♪

[...]

Y nos dejamos llevar...