·Forbidden Love· -2da parte-

·Capítulo 1 : Soportar·

<Christian> 

"Porque en tu mundo no debe haber mas que orden".

¿La llamo o no la dejo ir?.. es hermosa pero parece ser perfecta .. incluso mas que yo .. pero si .. no, no mejor no .. ¡que debate interno el mío!. La otra vez me sentí culpable al dejarla ir pero es imposible mi desinterés hacia ella, me encanta .. me embriaga los cinco sentidos y aún así no la puedo tocar. 

¿Por qué?

Porque soy una porquería de ser humano, ella debe ser perfecta, debe estar de novia con alguien o casada, con hijos y una gran casa, .. debería de ser así. Yo solamente soy un ogro que se aprovecharía de ese cuerpo exquisito que probo un poco de ese cielo por minutos. 

Tengo una prometida enferma y mis dos gatitas. Las consentidas de mi vida y las que sacian mi hambre sexual pero no la de mi alma. Ninguna llega a llenar mi corazón con el suficiente amor, en realidad, no exigo amor de ellas ni tampoco lo busco, pero tampoco he encontrado a esa persona a la cual pueda decir "esta es la mujer".

Por eso me divierto sin culpas con mis gatitas, ellas son lo que no puedo hacerle a mi pareja enferma. Lamen de mis pies por mi cariño mientras que mi novia sólo acompaña a mi lado como la imagen de mi vida amorosa para los ojos de la gente buena y de mi familia. 

Soy adoptado como a pocos le tocan, crecí con lujos  y comodidades como mis otros dos hermanos, uno falleció años atrás en un accidente de carretera, Elliot Grey, tenía apenas 20 y muchos sueños por que cumplir. 

La única viva e incontrolable, es Mia Grey, la menor de todos y mi consentida. Con ella nadie se mete a menos que se haya equivocado de verdad. Ahí, seré yo mismo quien la lleve por el camino correcto, apenas tiene 18 y llena de energía por conocer el mundo que le depare allá afuera. 

Mis padres .. que puedo decir de ellos, por un lado mi padre, Carrick Grey, un abogado del mas comprensivo, bueno y noble de todos los padres, de él aprendo la parte humana y caritativa que no me sale ser. De parte de mi madre, Grace Trevelyan Grey, ella es un tanto mas decidida que yo, fuerte, justa y agresiva por momentos pero por otros es toda una madre nata, diría que si no fuera adoptado hubiera heredado todo su carácter pero para el destino me llevo hacia ella como un niño desamparado y lastimado. 

Para mi madre debo ser decidido en todo lo posible que pueda, es médica pediatra, siempre dice que su profesión la llena de vida al ver tantos niños llenos de júbilo y futuro por delante. Pero para mi no, verla con ese delantal blanco puesto es como retroceder siempre a esa época donde me descubrió. 

Cada Grey en su mundo y en su orden sigue el curso de su vida, pero últimamente el mío no. El mío se ve invadido lleno de imágenes y pensamientos sobre esa mujer, Anastasia Alice Steele. Intento de todas formas sacármela de la cabeza pero eso hace mas frustrante el intento porque al final no lo logro. 

No puedo, simplemente no. 

Sólo hace que la recuerde mas, su caminar, su ropa suelta pero ceñida a su figura, el movimiento de su pelo al viento, su ondulante y ancha cadera, su voz .. esa dulce voz que sale de un cuerpo tan delicado pero a la vez fuerte, su tersa y blanca piel, y como si fuera poco, esos ojos .. esos pozos azules que parecen unas piedras preciosas que fueron incrustadas en sus ojos como regalo de la vida. Vivaces y lleno de color, me atrapan .. y eso otra cosa que me molesta mas, el no tener el control sobre mi cuerpo a la hora de mirarla y sostenerla. 

También note que es demasiado arrogante y altanera para su edad, joven y exquisita, toda una joya por descubrir. No entiendo como no pude cruzarme con ella todo este tiempo que he vivido en esta ciudad. Si no hubiera sido que me la he encontrado cerca de esa obra nunca la habría conocido, también algo tierna por momentos con su forma de exasperarse ante mis palabras.