Somos una familia

🕡

-YOONGI!!

Jin se tapó la cara y calló de rodillas luego de casi desgarrarse la garganta en ese grito, no podía ver eso.

Taehyung, Jimin y Namjoon pararon en seco y cerraron los ojos lo mas fuerte que podían en cuanto divisaron el auto en dirección al rapero.

Hoseok se volteo al instante en que vio como Suga se tiraba delante del vehículo, y tapó sus oídos en un vano intento de no escuchar el golpe.

Jungkook paró un instante vio el automóvil, volvió la vista a su hyung y al ver sus intenciones corrió lo mas rápido que podía, sabia que no llegaría, sabia que no podría agarrarlo antes de que el automóvil lo embistiera pero se negaba a reconocerlo, se negaba a aceptar que no lo podría salvar a la persona que amaba.

Chirridos de neumáticos sobre el asfalto, un fuerte grito del maknae, un estruendoso golpe y luego... silencio.

Jin fue el primero en abrir los ojos entre un mar de lágrimas, lo primero que vio fue el automóvil estampado en un cartel de pare que se encontraba seis metros a la derecha, sus ojos recorrieron el camino a la izquierda, por donde venia el vehículo, buscando el cuerpo que tendría que estar tirado, sin embargo lo unico que vio fue la espalda del maknae que estaba arrodillado en el piso frente a él.

Se paro como pudo, las piernas, por no decir el cuerpo entero, le temblaban, el corazón le bombeaba con fuerza. Caminó, contando los  pasos, hasta el maknae y cuando llego a él y diviso lo que pasaba, volvió a caer de rodillas y trato de acercarse pero lo que salio de los otros labios lo congeló y lo hundió mas, no solo a él, sino también al resto de los chicos que se habían acercado menos de un segundo después...

-Por favor dejame morir, por favor....ya no quiero ser una molestia, ya no quiero que me odien...por favor..

Yoongi estaba entre los brazos de Jungkook, temblando, llorando y repitiendo una y otra vez las mismas palabras. El menor lo sostenía fuertemente, susurrándole algo que no lograban escuchar mientras se mecía suavemente adelante y atrás, acompañando al mayor en lágrimas.

Jin levanto su mano para acariciar el cabello de Yoongi, quien abrió los ojos con temor, reviviendo parte de su niñez.

-No me golpees! Por favor no me golpees!- grito y se pego mas al pecho del maknae. Jin detuvo su mano enseguida- les juro que no los molestare mas, me portaré bien! Por favor no me golpees..por favor...- y su cuerpo ya no aguantó, aun fuertemente aferrado al pecho de Jungkook, se desmayó.

-Hyung..- murmuró en un suspiro quebrado el menor.

***

Seis pares de ojos miraban el cuerpo que estaba tendido sobre la cama.

¿Como habían llegado hasta ese punto? ¿Como habían podido lastimar tanto a una persona?.

Porque eso habían hecho, habían ignorado y lastimado tanto a Yoongi. Hasta el punto en que este solo pensaba que los molestaba, hasta el punto de hacerlo creer que estarían mejor si el desaparecía, hasta el punto de querer suicidarse...

Daban gracias, a lo que sea que estuviera cuidándolos, que el conductor de aquel automóvil viniera lo suficientemente alerta y que tuviera tan buenos reflejos como para esquivar entre medio de chirridos de frenos el pequeño cuerpo de Suga. Y por si fuera poco que no los reconociera y lo dejara pasar sin involucrar a ninguna autoridad. Exigiéndoles únicamente el importe por el daño infringido en su automóvil.
Llamenlo suerte o lo que sea, pero ellos estaban totalmente agradecidos.

Sin embargo no se libraron de su mánager al cual tuvieron que notificar lo sucedido para que llamara a al medico de cabecera, y que este también se lo reportara a Bang Sihyuk, quien en esos momentos estaba camino al apartamento.

-Me siento horrible- Hoseok no paraba de sollozar en susurros.

- Todos nos sentimos igual, Hobi- aclaró Namjoon.

El sonido de la puerta los alerto, sabían que era su mánager junto a Bang PD- Nim, eran los únicos que también tenían las llaves del departamento.

El medico, que aguardaba sentado junto a la cama del blanquecino, se levanto y ante la atenta mirada de los menores, les hizo señas para salir al encuentro de los recien llegados.

- Uno de ustedes se tiene que quedar a su lado- advirtio, señalando a Yoongi- si se llegara a despertar, en su estado y sin nadie que este a su lado, solo tratara de finalizar lo que empezó.

El rostro de los chicos palideció, no querían que eso ocurriera.

-Yo me quedare a su lado- tampoco era como que el maknae quisiera alejarse, y el pedido del medico dio pie para quedarse al lado de su hyung pálido.

Su cuerpo temblaba sin cesar desde que volvió con su hyung en brazos al apartamento, no era solo a causa de lo vivido, sino a causa de lo que pasaría luego.

¿Yoongi lo odiaría? No, su hyung era demasiado bueno como para odiar a alguien.
¿Trataría de alejarse de él? Eso...eso lo mataría.
Apenas había descubierto sus sentimientos por su mayor, pero le desgarraría el alma ver que se alejara.

Ya a un lado de la cama, vio el pacifico y hermoso rostro que lo traía loco. Se sentó sobre la cama y comenzó a acariciar los cabellos mentolados, le encantaba como quedaba ese color, o cualquiera de los que había usado antes, le encantaba Yoongi.

Sin pensarlo demasiado se acurrucó junto al otro cuerpo y lo abrazo delicadamente, era tan fácil abrazar a su pequeño hyung, quedaba perfecto entre sus brazos.

Suga se removió y acomodo, poniéndose de costado, hundiendo el rostro en su pecho y tomando en puños la tela de su buzo a la misma altura en que había ubicado su rostro, todo, completamente dormido.
Jungkook bajo la mirada para ver lo tierno que se veía el rapero, pero sus ojos se toparon con las vendadas manos.
Se mordió el labio inferior para tratar de mantener al margen sus lágrimas y envolvió la cintura ajena, acercando lo más que podía sus cuerpos.

No pasó mucho tiempo para que el también se entregara a los brazos de morfeo.

Esa fue la primera noche en que Yoongi se sintió realmente cálido al dormir. La primera noche en años que no tendría las horribles pesadillas de su niñez.
La primera noche que descansaría de verdad.

Y quizás la ultima...

Continuará...