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-Hyung...-el suspiro tembloroso escapó de los labios de Jungkook a la vez que apretaba más contra sí el cuerpo entre sus brazos- dime que no te...¿Ellos te....- ¿Cómo preguntar algo tan delicado?- ¿Ellos te..for..forzaron? O sea, ¿Te....ya sabes..

La pregunta no se podía hacer más delicada. Y él no quería hacerla tan directa. No quería saber la respuesta tampoco, a menos que fuera negativa.

-No- dijo rápidamente. Había entendido a la perfección lo que su menor trataba de preguntar- No abusaron de mi.

El suspiro que de pronto salió de Jungkook fue todo lo que necesito el mayor para saber que había sacado un gran peso de este.
Pero la cuestión ahora era, ¿que podría ser peor a todo lo antes narrado?
La respuesta llegó sin previo aviso.

- Pero me vendieron- ¿como? La interrogación plasmada en la cara del menor dio paso a una explicación más detallada- En realidad, lo que ellos vendían era a un pequeño virgen. Gracias a algunos contactos, me pusieron en venta entre empresarios que donaban a la institución...

¿Cómo podía ser que un orfanato vendiera a un niño?

-¿Alguien... - No. Yoongi lo había dado a entender perfectamente, lo habían vendido. No  lo intentaron, no quisieron venderlo, LO habían vendido. - ¿Quien lo compró?.

Sinceramente, la cabeza de Jungkook ya daba vueltas. Había hecho la pregunta, pero ¿quería escuchar la respuesta? ¿En realidad quería saber quien había comprado a un niño para... para hacerle esa clase de cosas?
Por un lado si. Quería saber a quien matar.
Pero por otro lado....Dios! Esto era algo casi inconcebible.

Trata de menores, abuso infantil. Sabía que esa clase de cosas ocurrían en el mundo. Pero ¿porque a él? ¿Porque a este hermoso ser humano que no quiso más que ser protegido y amado tanto como los protegió y amo a ellos?

-Bang Si Hyuk- La respuesta calló como balde de agua fría....

***

Se había encerrado en el cuarto del hotel que se le había asignado, necesitaba estar solo un segundo para poder pensar con claridad. Sin embargo unos golpes en la puerta lo sacaron de sus cavilaciones.

Abrió pesadamente, y ante él apareció la persona que menos esperaba ver apareció.

-Mark...- y hasta ahí pudo formar palabra.

Las cosas habían estado tensas. Todos en el grupo necesitaban una pronta resolución a lo que estaba pasando. Así que el mayor, armándose de valor fue a ponerle fin a todo esto. Ya no se iba a andar con rodeos.

Dio un paso al frente ante la atenta mirada de su líder y cerró la puerta tras él.

- Me gustas. - Corto y al pie.- Ahora dime de una vez por todas lo que sientes por mí para así saber que hacer.- Mark no se iba a ir por las ramas, la paciencia que, por lo general,  era gran parte de su personalidad lo había abandonado- Si me quieres a tu lado dímelo ahora y comencemos algo de la manera que tú gustes. Pero si la respuesta es no....haremos como que todo esto nunca paso....

Mark desconfiaba mucho de la respuesta. Hace poco él estaba junto a Jackson, sabía que eso influía bastante en la indecisión de su líder...ademas estaba Yoongi.... había una leve desconfianza de que estuviera sintiendo algo por aquel hermoso pálido y melancólico rapero de BTS...

Los segundos se arrastraban y la respuesta no llegaba. Mark torturaba sus labios con los dientes. Espero unos segundos más, pero nada. Jaebum solo lo miraba...
Con un suspiro dio a entender que se rendía, la respuesta no llegó y él lo tomó como una negativa de parte de su amado líder.

Bajo la cabeza, para que no se vieran sus ojos acuosos y se dio la vuelta, emprendiendo la retirada.

Jaebum, en cambio, solo se dio cuenta de lo que estaba pasando  cuando Mark se marchaba. Había estado tan embobado mirando cómo su mayor se mordía esos carnosos labios...

Antes de que siquiera Mark girara el pomo de la puerta, Jaebum lo había tomado de la muñeca, lo había girado para que quedara frente a él y, casi sin pensarlo, lo había besado.

Dios!! Había soñado con probar esos labios casi desde que lo vio por primera vez en la empresa.

Mark tampoco tardó mucho tiempo en corresponder. Había venido buscando cobre y encontró oro!!

Sus labios encajaban casi a la perfección. Pero necesitaban separarse para poder respirar...

- Por si no te quedó claro- decidió aclarar Jaebum- esto es un "también me gustas" y un claro: "ahora eres mío"

Detrás de la puerta se encontraban tres orejas pegadas, tratando de escuchar cada palabra.

- Pero que posesivo que es nuestro líder- susurro Bambam. Recibiendo un "Shhh" de los otros dos cotillas.

La puerta fue abierta rápidamente, cayendo uno arriba del otro, siendo totalmente descubiertos por la reciente pareja.

- 653, 654! Listo! Hay 654 pasos de dedos desde mi habitación a esta!- dijo Yugyeom mientras hacía como que sus dedos caminaban.

-Problema resuelto!- dijo Jackson levantándose del suelo y golpeando sus manos en modo limpieza- Ahora si podremos dormir tranqui....

-¿Nos estaban espiando?- preguntó el líder apuntando hacia los tres que trataban de huir.

-Pfff! No!! ¿Cómo crees?- la actuación de Bambam no se la creía nadie.

Jaebum iba a replicar pero los muy descarados huyeron de la escena con la rapidez de un ninja.

- ¿enserio habrán 654 pasos de dedos?- pregunto Mark desconcertando a su líder.

***

En la casa de BTS las cosas eran lúgubres, se sentían tan mal que ni siquiera se habían dado cuenta de que habían saltado dos comidas ya.

Tae, llevaba dos noches durmiendo en la cama de Suga. Jamás se había dado cuenta del exquisito aroma a menta y cerezas del mayor, y ahora lo consideraba como un calmante.

Lo extrañaba.

No sabía porque, él siempre pasó de su rapero mayor, pero ahora, con el remordimiento y sabiendo que no estaba y que tampoco quería verlos; las ansias por tenerlo cerca lo consumían.

El aroma de Yoongi estaba tan impregnando en aquellas almohadas que ya ni siquiera comía algún dulce nocturno por miedo a cambiarlo.

-Tengo que verlo- susurró para si mismo a la vez que hundía su rostro en la almohada que abrazaba.

No lo pensó un segundo más. Se vistió rápidamente luego de una ducha y casi a los tropezones se dirigió a la salida. Le imploraría a su hyung que lo perdonara...

-¿A donde vas, Tae?- la desganada vos de su líder lo hizo girar antes de llegar a la puerta.

Los demás chicos, que se encontraban sentados de la misma forma lúgubre que últimamente mostraban, también prestaron atención a la respuesta.

-Voy a implorar el perdón que no nos merecemos.

-Vamos contigo.

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⏰ Última actualización: May 14, 2020 ⏰

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