🕘

4.7K 483 186
                                    

Al abrir sus ojos se encontró solo en su cama. Los recuerdos de lo que había pasado lo azotaron de golpe y las lágrimas no tardaron en descender por sus mejillas.

Ni siquiera fue capaz de morir. Pero sinceramente, quizás, quería llamar un poco la atención sin medir las consecuencias, quería sentirse querido, así sea en su propio funeral, quería ver que lloraran por él, que alguien se quedara a su lado.

Sin embargo ahí estaba, solo, en su habitación. Eso dejaba muy en claro que a nadie le importaba realmente lo que le llegara a suceder.

Seguía causando molestias y lo mas seguro es que en este momento todos estuvieran enojados por lo que había hecho.

¿Como podría mirarles después de esto? ¿Porque no podía hacer algo bien? ¿Que había de malo con él?.

Sonrió tristemente.

Nunca nadie lo había querido. Ni siquiera su madre biológica quiso tenerlo a su lado, dejándolo a su suerte en un basurero apenas con cuatro días de nacido. 

¿Porque llego a pensar que estos chicos buenos querrían  que el fuera parte de su familia?

Una molestia. Solo era eso. Solo sirve para eso. Siempre se lo dijeron en el orfanato. Ahora estaba seguro de que siempre seria así...

Con la poca fuerza que tenia, se levanto entre tambaleos de la cama dirigiéndose al baño.

Terminaría con todo de una vez por todas, ya no importaba nada. Nadie lloraría su perdida, y aunque eso le doliera, lo aliviaba al mismo tiempo.

Dolía pensar que era tan insignificante para las personas que tanto quería. Pero le aliviaba saber que ellos no sufrirían por él, lo dejaba tranquilo saber que pronto dejaría de molestarlos y ellos seguirían adelante mas calmos y sin un estúpido chico problema...

Cerro la puerta del baño a sus espaldas. Se apoyó en esta unos segundos esperando a que el mareo se dispersara un poco..

Abrió el grifo de la tina, del estante de debajo del lavamanos sacó una de las rasuradoras. Con total calma la coloco en el piso y con sus pies descalzos la pisó, haciendo pedazos el plástico que recubría las afiladas cuchillas.

Se desnudó tranquilamente. Se metió en el agua tibia, la tina ya rebasaba la mitad, así que cerró el grifo, tomo una de las pequeñas cuchillas y suspiró.

Ahora todo estaría bien, ya nada podría dañarlo, al fin podría descansar en paz...

Sintió el frío objeto abrirse paso en su muñeca izquierda y luego en la derecha, sin embargo no sintió dolor.

Apoyo ambos brazos en los costados de la bañera y bajo su mirada para observar el agua, encontrándose así con la transparencia de ésta.
Se preguntó si hubiera sido mejor agregarle una bomba de espuma o algún champú corporal y sonrió por su estupidez.

"El forense no se molestará si mi cuerpo no esta perfumado"

Viendo como el agua lentamente se tenía de rojo y mientras el olor a hierro de la sangre se hacia notar, se dedico a observar su cuerpo. Las múltiples cicatrices que recorrían desde el costado de su cadera hasta un poco mas arriba de medio muslo, cada una de ellas contaban una parte de su dolor. Dolor que ya no sentiría...

El frío y el sueño comenzaron a apoderarse de su ser, así que tiro su cabeza hacia atrás y se dispuso a perder su mirada en el blanco techo...

¿Sus fans lo recordarían? Lo mas seguro es que si, pero prontamente se olvidarían de él o solo pasaría a ser parte de sus lindos recuerdos, quien sabe...

Somos una familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora