Capitulo 42.-
Me desperté temprano en la mañana. _______ tenía que estar en práctica de danza a las ocho treinta, ahora eran solo pasadas las siete. No pude quitar la sonrisa de mi rostro. Anoche fue increíble, la mejor noche de todas. Oírla gemir mi nombre fue el mejor sonido en el mundo. Ella lo disfrutó también lo que lo hizo más especial para mí. No le había dolido tanto, bueno, ella dijo que no de todas formas. No pudo haber sido tan doloroso porque me hizo hacerle el amor de nuevo después. Envolví mis brazos más fuerte alrededor de ella, amando la sensación de su piel desnuda contra la mía. Solo yací allí y la miré dormir hasta que la alarma sonó. Ella era tan malditamente hermosa; honestamente era justo como imaginaría que luce un ángel. Se acurrucó más cerca de mí mientras abría sus ojos, una lenta sonrisa esparciéndose en su rostro cuando me miraba.
-Hola, novio.
No pude evitar sonreírle de vuelta.
-Hola, novia. -Envolvió sus brazos alrededor de mí más fuerte mientras suspiraba con satisfacción-. ¿Cómo te sientes hoy? -pregunté, recorriendo con mis dedos a través de su desordenado cabello de sexo.
Ella sonrió.
-Estoy bien, un poco adolorida, pero extremadamente feliz -declaró, riendo dulcemente.
Giré arriba de ella, presionando mi cuerpo con el de ella.
-Un poco adolorida, ¿huh? Mejor podría besar eso para ti -coqueteé.
Ella mordió su labio, mirándome emocionada.
-Oh puedes, ¿huh?
Asentí, sonriendo perversamente.
-Oh sí. -Le sonreí con suficiencia antes de besar mi camino bajando por su cuerpo, apenas pudiendo contener mi emoción.
[Narra _______]
Tras finalmente separarme de Justin el sábado por la mañana, literalmente no podía mantener alejada la sonrisa de mi cara. Fue tan increíble la noche anterior y fue mejor de lo que alguna vez pensé que podría ser. Fue tan dulce, paciente y tierno conmigo, tomándoselo todo lenta y tranquilamente. No pude haber pedido un novio más cariñoso.
-Vamos, chico amoroso, vámonos -ordené, deslizándome en un pantalón de chándal y una camiseta sin mangas lista para la práctica de baile.
Agarró mi cintura y besó la parte trasera de mi cuello.
-Está bien. Pero por favor trata de no sacudir demasiado ese lindo trasero en mi rostro, o quizás tenga que rasgar esos sexis pantalones y tomarte justo en frente de tu equipo -gruñó, mordisqueando suavemente mi cuello. No pude evitar reírme ante el comentario. Nunca me había dicho nada como eso antes y me sonrojé como loca mientras golpeaba su hombro.
-Sal de mi cuarto, hombrezuelo -bromeé, empujándolo, riendo. Sujetó mi mano, tirando de mí, sonriendo felizmente. No pude evitar más que mirar a su trasero mientras caminaba enfrente de mí hacia el pasillo. ¡Wow, me ha convertido en una pervertida también!
La práctica de baile fue genial. Parecía que finalmente me estaba saliendo el levantamiento con el que había estado teniendo problemas la semana pasada, así que por lo menos no me caí sobre mi trasero demasiado. Para el momento en que terminamos estaba cansada y sudorosa. Justin se sentó ahí pacientemente
observando como de costumbre, bromeando con Liam. Parecía que estaba sonriendo más de lo normal. Supongo que fue difícil para él, esperar una semana entera para tener sexo, apuesto que nunca había hecho eso en su vida. Probablemente estaba satisfecho de finalmente tener algo la noche anterior después de todo el flirteo que había hecho recientemente. Espera, ¿sólo habíamos estado saliendo una semana? Me reí para mí misma, vaya, era una zor'ra. Me acosté con un chico con el que he estado saliendo por una semana; ¡Nunca pensé que podría decir eso! Parecía como si hubiéramos estado juntos desde siempre porque todo era sólo demasiado fácil y lo había conocido durante tanto tiempo. Cuando terminamos de practicar, fuimos a un pequeño café y compramos sándwiches, llevándolos a un parque para comerlos. Justin se sentó bajo la sombra de un árbol, abriendo sus piernas para que me sentara entre ellas. Cuando estaba a punto de sentarme, me detuvo.