Lluvia de Estrellas

Fin del viaje

Me deslicé fuera de los brazos de Adrián y corrí hacia Haniel, tomé una de las toallas que trajo y nos cubrí con ella.

—Vámonos —le dije.

—¿Qur hacias cargando a mi novia?

—Tranquilo, se cayó y la atrapé.

—Es cierto, Haniel. Eso fue todo.

Cuando me vió sus ojos se suavizaron.

—Me debes algo por salvarla.

—Oh, Adrián, no lo arruines.

—¿Qué te debo algo? Toma un gracias y vete a la chingada.

—¿Qué tal una cena?

Las alas de Haniel comenzaban a moverse con más intensidad debajo de la toalla.

—Ni lo sueñes.

—Hablo con Vachel, no contigo.

Moví a Haniel para irnos, pero Adrián me detuvo de la muñeca.

—Es solo una cena.

Intenté safarme pero su agarre era muy apretado.

—Ok, ok.

Me soltó y caminamos rápido hacia nuestra tienda.

La toalla había quedado manchada del lado de Haniel y sus cicatrices estaban frescas.

—¿Aceptaste una cita con Adrián? —noté un poco de furia en sus palabras.

—Es una cena, no una cita.

—¿Por qué? —dijo tenso.

—¡Pues por que estabas a punto de convertirte en un pájaro y no te ibas!

—¡No soy un pájaro!

—Deja de estar enfadado.

—No puedo cuando aceptas una cena con el enemigo.

—Actuas como un bebe. El me salvó, punto.

—¡Se está aprovechando de la situación!

—Solo por esta vez me gustaría que no compitieras con el.

—No es una competencia. Quiero estar seguro de que solo me quieres a mi.

—Haniel...

—Que solo me darás tu cariño a mi.

—¿No confías en mi?

—No confío en el.

Suspiré y regargue mi frente en su hombro.

—¿Confias en mi?

—Claro —respondió.

—Entonces no tienes nada de que preocuparte.

Me sequé y vestí con una amplia blusa blanca y un short de mezclilla. Haniel usó una playera y bermudas negras.

*¤*¤*

Con el clima me sentía pegajosa y sudaba a montones. La mayoría de los alumnos estaban ya comiendo lo que trajeron.

Diego y Haniel hicieron sándwiches.

—¿Por qué mi pan está quemado? —pregunté.

—No está quemado, es que hicimos sándwiches al carbón —respondió Haniel.

—La verdad es que a Haniel se le ocurrió calentar el pan en la fogata para ver que ocurría y cuando se comenzó a tostar dijo que inventaría el sándwich al carbón.