CAPITULO 12

555 61 37
                                    

"Conoces a miles de personas y no causan ningún efecto en ti, y conoces a una sola persona y te cambia la vida."

Me levanté de la cama con mucho cuidado de no despertar a Harry, quien gruñía suavemente con cada respiración que daba. Mas que jodidamente adorable.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Busqué mi maleta a tientas en la terrible oscuridad de la habitación, preguntándome: ¿Tanto le costaba a Harry tener una estúpida lámpara? ¿O unas persianas nuevas que dejaran entrar un poquito de luz? ¿Cual era su problema con eso?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Busqué mi maleta a tientas en la terrible oscuridad de la habitación, preguntándome: ¿Tanto le costaba a Harry tener una estúpida lámpara? ¿O unas persianas nuevas que dejaran entrar un poquito de luz? ¿Cual era su problema con eso?

La tomé por fin después de unos segundos y salí de ahí sin hacer nada de ruido.
Decidí que le ayudaría un poco a limpiar, bueno, un mucho porque era necesario y tampoco me iba a quedar en su casa de flojo sin hacer nada, primero recogí toda la basura del piso y de los muebles y la metí como en tres bolsas negras, sacudí y barrí el piso tratando de no tomar en cuenta que ya me estaba quedando sin aire solo con esa tontería.

La cocina estaba atrás de una pequeña barda, era muy grande; paredes blancas y muebles de madera beige y habían platos sucios por todas partes. Siempre odié lavar los platos pero lo haría por Harry. Así de fuerte era mi amor. Tarde mas de dos horas en limpiar bien todo el apartamento y la cocina pero quedo reluciente, hasta yo mismo me sorprendí de como lo había dejado. Limpio se veía mas elegante. Solo me faltaba limpiar el cuarto, pero eso lo haría hasta que Harry decidiera levantarse.

Tomé mi mochila y me senté en el cómodo sillón. Saqué de la mochila mi viejo diario para ver la página de "el chico de mis sueños" porque yo sabía que Harry cumplía muchas, y que fácilmente podía superar mis expectativas.

Busqué un bolígrafo para tachar "comprar un boleto de avión al primer destino que tengan" "escaparme de casa" y "vivir en Londres" de la otra lista. Estaba sonriendo como tonto y no podía creer que todo lo que ya había cumplido de esa lista había sido con ayuda de Harry y todo gracias a él.
Yo creía fielmente en el destino y en que todo sucede por una razón, y estaba seguro de que conocer a Harry no había sido ninguna coincidencia.

Infinity • 1era Edición•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora