CAPITULO 55

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"Es buen momento para cometer locuras"

Me mordí los labios para no gritar y seguimos corriendo rápidamente unos cuantos metros mas adelante esforzándonos más que nunca para no ser alcanzados. Los chicos se estaban quedando atrás, dejé que me pasaran. Josh nos rebasó y dio vuelta en la siguiente calle primero que nosotros. Ni siquiera sabíamos hacia donde íbamos.

Estaba muy preocupado, más que preocupado. Tenia a un asmático y a un embarazado corriendo, huyendo de la policía.

El asmático y Dan corrían con trajes y zapatillas de prostituta, yo y el embarazado corríamos con las manos esposadas.
Todo está jodido, destinado al fracaso. Capaz que se le sale el bebé a Josh por el esfuerzo, a Louis se le va a salir los pulmones y Dan... Bueno, él es el unico normal, con suerte estará bien.

—No puedo más —jadeó Lou empezando a bajar la velocidad. Me puse detrás de el y empujé con pecho para que no se quedara atrás

—Hazz... No me empujes... Me voy a mat... ¡Ah!

—¡Mierda! —grité cuando Louis cayó de cara al piso casi llevándome de corbata hacia con el.

—¡Mierda! —grité cuando Louis cayó de cara al piso casi llevándome de corbata hacia con el

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— ¡Levántate!

—déjenme aquí, sálvense ustedes —dramatizó con la cara aun pegada en la calle. Dan se quitó las zapatillas y las aventó lejos, Josh estaba recargado en una banca, jadeando por aire y tratando de quitarse las esposas inútilmente. Esto solo comprueba lo no-en forma, sin condición física y gordos que estamos todos. Hemos corrido menos de 15 metros y ya estamos a punto de un colapso.

—déjate de tonterías y levántate —exigí. Miré rápidamente hacia atrás y tomé aire agradecido porque aun no nos alcanzaban, o quien sabe, igual y ni siquiera nos estaban siguiendo. Pero nunca se sabe, más nos valía seguir corriendo.

Lou dio una vuelta soltando pequeños quejidos aun tirado en el piso y se sacó las zapatillas bruscamente con los pies. Tenia las rodillas raspadas, llenas de sangre. El cabello mas despeinado que nunca, los labios y la nariz le sangraban y la falda se le había bajado dejando ver sus bragas blancas.

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Infinity • 1era Edición•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora