Y ahora estoy un paso más cerca de estar a dos pasos más lejos de ti.
¿Cuántas noches has deseado que alguien se quedara?
Quedándote despierto sólo deseando que estén bien, si intentara, sé que se sentirían infinitas.
Quizás no te trate tan...
La vida no es perfecta, pero junto a ti, tiene momentos perfectos.
—Hazz ¡HARRY! despierta, demonios —abrí un ojo primero para ver la cara de Lou confundido. Me senté en el sillón y lo volteé a ver de nuevo. —¿Por qué estás dormido aquí?
—no sé —me encogí de hombros. Él frunció el ceño.
—bueno, como sea... Ya hice el desayuno —anunció con una tierna sonrisa que en menos de un segundo se borró de su cara — por cierto, tu celular no deja de sonar
—oh, quizás es Niall —supuse. Él se dio una vuelta y caminó a la cocina.
—no es él... Es tu novio —murmuró. Me levanté confundido y caminé hacia el.
—¿Josh? Te he dicho muchas veces que no es mi novio
—¿Entonces como sabes que estoy hablando de él? —volteó y me miró con una ceja levantada. Cielos, tenía un buen punto.
—pues, eh... No hay ningún otro chico que pudieras pensar que es mi novio
—da igual, solo ve a hablar con él —puso dos platos en la mesa y se sentó a comer con mala cara. Ignoré su orden y me senté a su lado, como todas las mañanas a desayunar junto con él.
—no me interesa hablar con Josh —aclaré viendo como Louis aun con la mirada en su plato dejaba salir una dulce y floja sonrisa ante mis palabras
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Como dormiste?
—como muerto, perfectamente —levantó su vista y llevó el tenedor a su boca mientras yo tomaba un sorbo de jugo — aunque tú estuviste inquieto toda la noche
—oh... —quité mis ojos de los suyos y bajé la vista, avergonzado— tuve un sueño... Extraño
—¿De qué se trataba? —preguntó inocente. Casi me atraganto con el desayuno al recordar el mejor sueño que había tenido en toda mi vida.
—no lo recuerdo bien, era... No sé —concluí. Él rió y nos quedamos desayunando en silencio unos segundos, nos veíamos a los ojos y sonreíamos sin decir ninguna palabra
— ¿Que plan hay para hoy?
—no tengo idea —hizo una mueca. —¿Qué sigue en tu lista? —pregunté realmente interesado.
—oh, de acuerdo. Pon atención. Lo que sigue es lo más importante de toda la mugrosa lista, así que más te vale que escuches muy bien —dijo con voz misteriosa. Yo pasé la comida y pude toda mi atención en él. Pensé que sería algo muy, muy importante como no sé, quizás casarse, tener un hijo o algo así y yo ya estaba más que apuntado para ayudarlo en todo.
—dime...
—es... —seguía hablando con su voz misteriosa y tenía sus ojos puestos en los míos con la mirada más profunda del mundo. Hizo a un lado su plato y se recargó en la mesa para quedar más cerca de mí, yo hice lo mismo que él y nuestras cabezas quedaron separadas por pocos centímetros por encima de la mesa —robar...
