Evelyn soltó una carcajada cansada por un chiste que contó Justin y se apoyó sobre el hombro de éste. Recién terminaban de comer el plato que Justin había preparado, el cual estaba riquísimo. Nunca había comido un plato igual, sabía que la comida de Justin era riquísima porque era su chef favorito, pero nunca se pudo dar el lujo de comer en uno de sus restaurantes.
—Siempre quise comer uno de tus platos —admitió Evelyn luego de beber un sorbo de vino.
—¿Nunca habías comido? —preguntó Justin bajando su cabeza para mirarla.
—No, que tu restaurante es más para la gente de la alta sociedad —rió. El vino le estaba afectando.
Justin rió y le quitó la copa de la mano.
—No más vino para ti.
-¿Sólo por decir eso? -preguntó Evelyn—. Sabes que es la verdad.
—¿Quieres tomar agua o jugo? —preguntó Justin incómodo.
—Quiero que me des mi copa de vino y que me respondas por que tus platillos son tan caros —dijo Evelyn estirando su mano.
—No —Justin negó con su cabeza y besó los labios de Evelyn—. Creo que es momento de ir volviendo.
—¡No, yo me quiero quedar aquí! —exclamó levantándose—. No quiero volver a encerrarme en ese lugar, me aburre —hizo un puchero con sus labios.
—Desde que te anotaste en la competencia sabías como era la cosa, ahora aguántate o abandona —dijo Justin encogiéndose de hombros mientras dejaba la copa a un lado para levantar los platos.
Cuando desapareció en la cocina, Evelyn se sirvió más vino y lo tomó de un sorbo. Cuando dejó la copa sobre la mesa, se tuvo que sostener de ésta para no caerse. Ya se encontraba ebria.
—Maldición —rió y comenzó a caminar tambaleándose hacia la cocina—. ¡Justin! —exclamó y se tiró sobre la espalda de éste.
—Mierda Evelyn —dijo asustado dejando de lavar los platos—. ¿Qué sucede contigo? —preguntó frunciendo el ceño.
—Nada —respondió Evelyn intentando no soltar una carcajada.
—Evelyn —dijo Justin elevando una ceja.
—Quizá tomé un poco más de vino, pero nada raro —respondió Evelyn abrazándolo—. ¿Podemos quedarnos aquí? -preguntó.
—No, ya nos vamos —respondió Justin enojado.
—¿¡Por qué no!? —gritó como una niña pequeña.
—Porque estas lo suficiente ebria como para que me pongas de mal humor. Así que nos iremos —respondió.
Evelyn se quedó apoyada en la isla hasta que Justin terminó de fregar los platos sucios. Cuando se volteó, Evelyn aprovechó y se pegó a su cuerpo.
—No estoy ebria Justin, sólo un poco alegre —rió y quiso besar a Justin, pero éste le corrió el rostro—. ¡Oye! —se quejó.
—Sal Evelyn —pidió molesto.
Evelyn se negó a la idea de que Justin le niegue un beso, así que tomó por las mejillas a Justin y plantó un beso en sus labios. Una parte de Justin le rogaba que acepte ese beso, pero la otra parte que pensaba le decía que se alejara, le diera algo de agua y se vayan de allí.
—No Evelyn —Justin negó con su cabeza—. Nos vamos -dijo.
—Eres un imbécil —se quejó Evelyn.
—Y tú eres una maldita ebria —le dijo Justin alejándola con fuerza provocando que Evelyn se diera un gran golpe en la cadera con un taburete—. Lo siento.
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MasterChef ➵ j.b
Fanfiction¿Quién diría que Evelyn se terminaría enamorando del hombre que estuvo por sacarla de la competencia tantas veces? Aunque era imposible no hacerlo. El gran Chef Justin Bieber enamoraría a cualquiera con sólo una mirada, o en el caso de Evelyn, con s...