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Cuando bajaron del coche se tuvo que quitar los cabellos del rostro, hacía demasiado aire en el muelle y sus finos rizos revolotearon por toda su cabeza.
El más alto la observó e inocente e inconscientemente se le escapó una media sonrisa mientras caminaba hacia ella.
¿Qué hacemos aquí?-pronunció Dyane mientras fruncía el ceño.
Sin una palabra se tomó la atribución de tomar su mano y caminar junto con ella hasta un yate que tenía una inscripción en la parte delantera, nerviosa leyó "0HS3H8N".
Es mío –dijo el muchacho ante la curiosa mirada de su acompañante.
Dyane le dedicó una mirada nerviosa hasta que este bajó de un salto al yate y estiró las manos hacia ella para comunicarle que debía hacer lo mismo, fue entonces que recibió una negación y dos pasos hacia atrás por su parte.
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Te voy a sostener –le dijo este- no te va a pasar nada.
Dyane negó rotundamente hasta que este tomó uno de sus tobillos y amenazó con tirarla si no lo hacía, fue entonces que recibió una respuesta por parte de ella. La muchacha estiró la mano para que este la ayudara y primero cruzó una pierna para luego cruzar la otra mientras sentía como todo se tambaleaba bajo su pie derecho.
Cuando trataba de recobrar la compostura no notó que estaba bajo los brazos del más alto que no dejaba de observar sus largas pestañas y sus labios rosas.
¿A dónde vamos?-fue lo que dijo luego de alejarse un poco de él.
Sehun señaló tras él y la vista de la pequeña Dyane se dirigió al restaurant flotante que estaba a unos metros de ellos, se veía hermoso y cualquiera pensaría que estaba desafiando a la gravedad ya que parecía ser solo sostenido por cuatro varillas. El imponente restaurant incluso tenía dos pisos y eso lo hacía aún más increíble.
Sehun le pidió que se sentara mientras que este encendía el yate para dirigirse a su destino, Dyane lo observó de espaldas, miró como se acomodaba el cabello empujándolo todo hacia atrás y como este lo desobedecía volviendo a su estado normal, era la primera vez que subía a un yate y la primera vez que... salía en una cita.
