¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
FINAL
Dyane se encontraba de camino a clases dentro de un taxi que BaekHyun había mandado, el día anterior había salido de viaje a ver a su abuela, esa mañana la había despertado con una llamada solo para avisarle que el coche estaría ahí en un par de horas. La muchacha había tenido que llevar al pequeño Elliot a casa de su madre para que esta lo cuidara ya que ese día tenía una importante exposición.
Luego de bajar del coche en el estacionamiento de la universidad y agradecer amable al chofer se dio vuelta para ir hacia su facultad, caminó mirando su papeleo desordenado que ahora tenía sobre las manos cuando sintió que golpeó a alguien, Dyane dio algunos pasos hasta que las manos de este se posaron sobre sus brazos desde atrás.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dyane giró asustada hasta que sus ojos miraron los suyos, estaba sorprendida por lo que tenía ahora en frente, esa era cualquier otra persona menos él. Sehun la sostenía mientras la miraba fijamente, estaba dispuesto a jugarse su última carta.
Dyane, quiero hablar contigo...
¡No!-Dyane se soltó y retrocedió dispuesta a irse hasta que volvió a verlo frente a ella.
Dyane se hizo a un lado pero la fuerza que usó este para detenerla la dejo impactada, quería golpearlo y gritarle en ese momento pero cuando levantó las manos para deshacerse de su agarré se quedó muda, todas aquellas ganas que tenía de golpearlo desaparecieron cuando lo vio tocarse la nariz con brusquedad.
No se iba a creer eso de que estaba llorando por ella pero cuando este trató de disimular mirando a un lado y abriendo la boca para tragar aire Dyane se quedó quieta, tenía una maldita debilidad por las personas que lloraban y desde un principio había sido así. Odiaba que lloraran por ella o que alguien se mostrase en ese estado.
Hablemos de Elliot, por favor...
¿Qué quieres hablar de él?-susurró Dyane serena pero sin bajar la guardia.
¿Ya está mejor?-Sehun la miró con los ojos brillosos esperanzado por oír una respuesta positiva.