La Gran Mentira (Camren G!P) [ADAPTACIÓN]

Capitulo 2

En ese momento Camila se dio la vuelta dispuesta a marcharse.

- Espera Camz- le ordenó Lauren. -Tienes toda la razón. Discúlpame por favor, me deje llevar por los celos- le dijo mientras la abrazaba fuertemente.

-Te juro que no tengo ni la menor idea de quién mandó esas flores Lolo- le contestó con lágrimas mientras miraba a Lauren a los ojos- tú sabes que yo te amo y...-

-Te creo Camz- le dijo interrumpiéndola-perdóname de verdad, jamás me había pasado esto, y no se por qué me sucedió ahora mi amor- después la besó de una manera en que sólo Lauren la sabía besar, esa mujer de piel blanca, ojos grandes de color verde, cabello castaño oscuro y Lacio largo, con un magnífico físico que era capaz de derretir a cualquier mujer u Hombre.

Pronto se olvidaron de ese horrible incidente y las cosas siguieron como siempre, entre abrazos, besos, sonrisas, y muchos "TE AMO" de por medio.

Al llegar la noche Camila estaba terminando unos detalles en su ordenador, cuando de repente una mano lo cerró.

- Señora Jauregui ¿No cree que ya ha trabajado mucho por hoy?- le dijo Lauren con una hermosa sonrisa al momento que la cargaba en sus grandes brazos y se dirigía hacia la habitación

- La verdad solo estaba terminando de revisar mi trabajo Señora de Cabello - replicó ella devolviéndole la sonrisa.

-No importa, yo quiero estar en la cama y le exijo conmigo- le dijo con una sonrisa pícara.

-Mmmm... eso depende-

-¿De qué?-le contestó mientras la colocaba delicadamente sobre la cama.

-De que es lo que quieres hacer- le contestó mientras le desabotonaba la camisa. Lauren entendió perfectamente a lo que ella se refería y se inclinó a besarla, mientras la recostaba sobre la cama. Camila le quitó la camisa y siguió con el pantalón. Esa fue una noche de pasión como todas las demás, Lauren le hacía el amor de una manera muy tierna y dulce, pero también podía ser como un tigre en la cama cuando la situación lo necesitaba.

Primero le beso el cuello bajando poco a poco por sus pechos.

-Mmmm... ¿sabías que me encantan tus pechos?- le dijo mientras lamía uno de sus pezones, mientras que con una mano acariciaba el otro. Camila gimió de placer.

-Sí. Me lo dices todos los días- le contestó con una voz demasiado débil, mientras enredaba sus dedos en el cabello de Lauren.

Lauren recorrió desde su cuello hasta su vientre, con su lengua trazaba círculos alrededor de su ombligo mientras que con sus manos daba masajes a los pechos de ella, fue bajando su boca poco a poco llegando hasta su entrepierna. No se quedo allí, siguió bajando hasta sus pies.

Cuando Lauren volvió a su boca, Camila la besó con demasiada desesperación, y entonces Lauren la penetró, lo hizo de una manera tan suave como tratando de no hacerle ningún daño, mientras tanto Camila se volvía loca de placer. Las caderas de Lauren se movían al mismo tiempo y sincronía que las de Camila, de arriba a abajo con mucha suavidad, Camila era muy linda, muy tierna y valiente, pero en la cama parecía otra, muy distinta a la real, otra Camila que Lauren había descubierto, ya que a Lauren fue la primera mujer a la que se entregó y la única, una Camila que sabía satisfacer muy bien a su esposa en el sexo y de todas las maneras, sexo flojo, sexo apasionado y desesperado, o en el sexo más tierno del mundo. Aunque a ellas no les gustaba referirse a el como "sexo", porque ellos decían que el sexo se tiene cuando buscas solo un momento de placer sin especificar una persona, y ellos lo que hacían era "hacer el amor", y este se hacía con la persona amada y no tenían intimidad solo por tener, solo para pasar el rato, este era porque querían estar juntas y nunca olvidar cada una de esas ocasiones.

Lauren la colocó encima de ella
mientras se recostaba y la volvió a penetrar, Lauren amaba esa posición ya que desde ahí tenia buena vista, ella se comenzó a mover, Lauren le acariciaba los pechos, ella se agachaba para besarlo, algunas veces Lauren se sentaba y capturaba sus pechos y se daba un festín con ellos.

La volvió a recostar quedando Lauren encima.

Lauren cerró los ojos ante el gran placer que estaba sintiendo, entonces Camila entrelazo sus piernas llevando a la rendición a Lauren y a ella misma. Sus caricias eran muy sensuales, algunas veces Lauren pasaba su mano desde la espalda de Camila hasta su trasero, y se detenía en sus hermosos muslos. Camila se abrazaba con fuerza a su espalda tratando de no lastimarla con sus uñas. Entonces llegó el momento del orgasmo, ambas lo consiguieron al mismo tiempo, dejando ver en sus ojos el inmenso placer que sentían, hasta que ya no pudieron más. Las dos se quedaron inmóviles,  Lauren se quedo un momento más sobre ella, hasta que se dejo caer de espaldas con una gran sonrisa en el rostro que a Camila le encantaba ver, se abrazaron y besaron hasta que el sueño y el cansancio las venció a las dos.

A la mañana siguiente, cuando Camila despertó se dio cuenta de que Lauren la estaba observando con mucho detenimiento y tenía un inmenso brillo en sus ojos. Estaba completamente enamorada.