La Gran Mentira (Camren G!P) [ADAPTACIÓN]

Capitulo 14

Camila salió del aeropuerto y tomó un taxi que la llevó a una pequeña pero muy cómoda pensión en la cual se quedaría por un tiempo.

-Buenas noches!, soy Camila Cabello- le decía Camila a una señora ya mayor que se encontraba barriendo.

-Buenas noches!, yo soy Victoria la encargada de la pensión, ya la estábamos esperando, su habitación ya está lista, sígame para que se la muestre- le dijo la señora amablemente.

Camila la siguió y subió con ella las escaleras.

-Ésta será su habitación- le decía Victoria mientras habría la puerta del cuarto.

-Muchas gracias- le contestaba Camila mientras entraba a la habitación con Victoria.

-Y ¿De dónde eres?-

-Soy Cubana-Mexicana , pero estaba viviendo en Miami- decía Camila con tristeza.

-¿Y qué te ha traído hasta aquí?-

-El trabajo. Me ofrecieron trabajo en una empresa de aquí y tuve que mudarme-

-¿Supongo que eres soltera?, porque si no, no te hubieras mudado- Camila se ruborizó.

-Si, soy soltera- le contesto tratando de ocultar su dolor.

-Muy bien, pues aquí estarás muy contenta, los inquilinos son tranquilos y respetuosos, bienvenida a Los Angelrs, vas a ver que este es un hermoso lugar para vivir- le dijo Victoria con una cordial sonrisa.

-Si, eso me han dicho muchas personas, gracias-

-Bueno aquí están tus llaves, te dejare sola para que descanses y desempaques, cualquier cosa estoy en la recepción, ¿de acuerdo?- Camila asintió y Victoria salió de la habitación.

Camila se quedo observando su habitación, era muy bonita y muy cómoda, pero estaba vacía, aún no se acostumbraba a dormir sola por las noches, a pesar de que Lauren varias veces se quedaba a dormir en la habitación de abajo, no era lo mismo con lo que estaba viviendo en esos instantes.

(...)

-Entonces queremos hacer una cena en dos días para celebrar el comienzo de nuestro próximo proyecto- le decía Lucy con entusiasmo a Lauren.

-Por favor no crean que no se lo que intentan- les decía Lauren molesta.

-¿A qué te refieres?- pregunto Lucy desconcertada.

-No finjan por favor- les decía Lauren incrédula. -Ustedes lo que quieren hacer es reunirme con Camila, ¿O no?-

-¡Estás loca!- le decía Ally.

-Ustedes saben que no es así- les repetía Lauren. -Y discúlpenme pero la verdad no quiero verla-

-Y aunque quisieras no la podrías ver- le decía Keana mientras se levantaba del sofá.

-¿A qué te refieres?- preguntó Lauren.

-A que la "Ingeniero Cabello"- le dijo haciendo énfasis en las dos últimas palabras- Está trabajando en otro estado, así que por mucho que queramos que celebre con nosotras, su trabajo no se lo permitirá- dicho esto se dio la vuelta y se dirigió a la cocina.

Lauren se quedo helada ante tal noticia, ¡Camila se había ido!, quería preguntar a donde pero la razón le decía que si lo hacia demostraría que aún la seguía amando, quería gritar, correr, dar patadas, hacer cualquier cosa con tal de que le dijeran que no era cierto, pero era tanto su dolor que se quedo quieta sin decir nada, solamente pudo bajar la mirada para que no vieran lo destrozada que estaba.

-¿Cuándo se ha ido?- pregunto al fin Lauren.

- En la mañana- contesto Ally.

-¿A dónde?- dijo Lauren desesperada- ¿Cómo se pudo ir así?-

-¿A dónde?, no sabemos- mintió Normani -¿Cómo se pudo ir así?, muy fácil le ofrecieron un excelente trabajo, mejor que en la empresucha que estaba, al parecer estaban muy interesados en ella y aceptó-

-No mientas, ¿A dónde fue?- le dijo Lauren

-Pues si, si sabemos donde está- comento Normani - Pero la verdad es que no le podemos decir a nadie, además ¿no decías que no quieres saber nada de ella?-

-Por supuesto- dijo Lauren tratando de ocultar su dolor.

-Lauren no tienes porque lastimarte así- le dijo con suavidad Lucy

-¿De que hablas?- pregunto Lauren en tono irritado.

-Tú sabes perfectamente que ella no lo hizo-

-No hablare más de ese tema-

Lauren llego destrozada a su casa, las lágrimas rodaban por sus mejillas y no podía contenerlas, se dirigió a la cocina y sacó del refrigerador una botella de vino, las cuales desde que Camila se había marchado no faltaban, la destapó y comenzó a beberla, ni siquiera se molestó en buscar una copa ya que prefería tomar de la botella, su corazón estaba hecho pedazos, y aún no lo podía creer, ¡Camila se había ido!, el amor de su vida la había abandonado definitivamente, pero... ¿con quién se había ido? ¿Se había ido con su amante? ¿Qué le falto en su matrimonio para que la engañara? ¿En qué había fallado ella? Todas estas preguntas daban vueltas en la cabeza de Lauren.

También recordó las palabras de Keana "Ingeniero Cabello", ¡que diablos!, tanta urgencia tenía de utilizar su apellido de soltera, ¿el próximo paso de Camila sería la demanda del divorcio?, pues si lo quería que lo solicitara, no le iba a facilitar la vida con su amante.

Dos corazones solos, separados por el odio de una persona, llorándose la uno a la otra, pero teniendo un gran amor que era más grande que la distancia que las separaba, lo único que tenían en común... por el momento.

(...)

Al día siguiente Camila se levantó temprano y se dió una ducha, se puso una blusa blanca de manga larga y una falda negra que llegaba hasta su cintura fajando la blusa y apretándose un poco a sus curvas, unos zapatos negros de tacón y se levantó el cabello en una coleta alta, se maquilló para darse más porte sin rebasar los límites de natural, tan solo con rímel, delineador en los parpados, un poco de rubor color rosa muy discreto como el de sus labios, oculto las bolsas de los ojos con corrector y remarcando un poco las cejas. Estaba sencillamente hermosa. Metió sus papeles y objetos de trabajo en su maletín, en ese momento Victoria llamo a la puerta para darle su desayuno.

-¡Que guapa y elegante vas!- le dijo Victoria con gesto cariñoso a Camila

-Gracias, es lo que intento para mi primer día de trabajo- le respondió un poco nerviosa.

-Pues te deseo mucha suerte-

-Muchas gracias la necesitare- le agradeció sinceramente Camila

-¿Necesitas algo más?-

-Sí, aprovechándome de su amabilidad, ¿podría pedir que un taxi me recoja 8:30?- le pregunto dudosa.

-Por supuesto que si niña, yo lo pediré- dicho esto la mujer se dio la vuelta y se retiró.

Camila se dispuso a desayunar, por alguna razón ese día tenia hambre, además sabía que presentarse en su primer día de trabajo sin desayunar podría ser desastroso.

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