GAME OF THRONES: LA OBSERVER [1]

CAPITULO 5

Cersei lannister, se encontraba sentada en su despacho acompañado de Qyburn en frente de ella. Sus manos estaban entrelazadas sobre su escritorio, pensando en su nuevo movimiento luego de que su coronación fue llevada a cabo ella sintió un paso más hacia su triunfo. Solo tenía que mantener su lugar en el trono, sabía que la madre de dragones iba detrás de ella. Pero pronto se iba a enterar de que Daenerys no estaba sola.

El maestre tenía la cabeza gacha, pues lo que tenía que decirle no era del todo gustoso y satisfactorio. Alzo la cabeza y la miro fijo, tomando la decisión de contarle a la facta reina de la noticia. Más bien era su obligación.

Cersei: ¿qué le sucede? Creo que no tiene buenas noticias ¿verdad?

Qyburn: así es mi reina.

Cersei: ¿Qué esperas pelacanies?

Qyburn: la madre de dragones. No es la única Targaryen que queda hay una más.- la reina cambio su sonrisa victoriosa por un rostro completamente furioso sus puños se cerraron con tanta fuerza que sus nudillos sobresalían de su tersa y suave piel.

Cersei: no puede ser posible ¿Quién es? dímelo Qyburn.

Qyburn: no se su nombre mi reina.

Cersei: pues averígualo pon espías lannister o envía a tus pájaros si es necesario quiero saberlo todo ¿me entiendes?

Qyburn: lo único que sé es que Daenerys no nació sola Rahella no murió dando a luz a una sola niña sino a dos. Las dos exiliadas, pero una fue llevada a Invernalia y luego a las tierras desconocidas y se hace llamar protectora de lo desconocido-"son mellizas" "las tierras desconocidas pero están deshabitadas y son peligrosas" dijo la lannister en su mente. Tenía que saber más.

Cersei: Qyburn quiero saber ¿Cómo se llama? ¿Que posee? ¿Cómo llego aquí? ¿Qué hay en las tierras desconocidas? sus secretos más obscuros como te dije quiero saber absolutamente todo.

Qyburn: eso hare mi reina

Cersei: vete de aquí no te necesito ahora.- el maestre salió tan rápido como pudo, después de la noticia que le dio, Cersei no estaba de buen humor.

La leona se levantó de su silla y comenzó a caminar por todo el cuarto con sus manos entrelazadas debajo de su abdomen estaba inquieta en su mente solo estaba esa nueva Targaryen ese nuevo enemigo, un nuevo jugador y otro obstáculo en sus planes pero estaba dispuesta a hacer hasta lo imposible por mantener su título a diestra y siniestra.

Salió de su despacho hacia la galería de la fortaleza roja, pazos tranquilos y seguros. Al llegar comenzó a supervisar el trabajo del cartógrafo que pintaba el gran mapa de poniente y muy al extremo del mapa se podía ver una pequeña parte de las tierras desconocidas pues los estiveños de las islas de verano han cartografiado y explorado pero guardaron muy bien las cartas náuticas y nadie sabía dónde están salvo shaerys ella juro protegerlas y eso Cersei no lo sabía.