Eres lindo, Marco. |Marco Díaz y tu|

×catorce×

Marco se sonrojó al ver a ___ acercarse, se había quedado despierto toda lo que restaba de la noche pensando en cómo ella lo besó a la medianoche ese día.

- Hola Marco. –saludó ella, dándole un beso en la mejilla.

- ___, quiero hablar contigo sobre el be...

Las risas de Jackie los interrumpieron. La de cabello blanco pasó por al lado de ellos, mirándolos como si fueran el mejor espectáculo de comedia que ella hubiera visto jamás.

- ¿De qué estás riéndote? –preguntó ___, mirando a Jackie con disgusto.

- ¿Lo besaste? –cuestionó la de ojos aguamarina con un tono "incrédulo". – Fue lo peor, ¿cierto? Marco besa de la misma manera en que luce. –rió amargamente. – Así es, mal y feo.

El moreno bajó la mirada al escuchar las palabras de ella. Tal vez sí, tal vez ___ no le había hablado el día después del beso porque en realidad no fue bueno.

- ¿Por qué no cierras la boca? –Marco levantó la cabeza al escuchar a ___. – Lo único que sale de tu boca es basura e idioteces, Jackie. –continuó la peli-azul, acercándose. –Así que mantenla cerrada y haznos un favor a todos.

La de cabello blanco apretó sus puños con molestia, abriendo la boca para reprocharle algo a la oji-gris.

- ¿Sucede algo, señorita Lynn Thomas? –cuestionó el director Skeeves acercándose a las chicas. Ella negó con la cabeza, respirando profundamente.

- No, ningún problema. –y su actuación comenzó. - ___ está diciéndome cosas horrendas. –fingió sorber por la nariz.

___ trató de mantener la calma pero simplemente no lo logró y jaló el cabello de Jackie, comenzando a pelear con ella. Marco tomó a la chica de la cintura y la apartó de la otra, esperando que ahora no le haya arrancado un ojo o roto la nariz.

- Déjame matarla. –gruñó ___, tratando de liberarse del agarre de Marco.

- ¿Por qué quieres matarla? –preguntó él, esquivando los puños de ___.

- Porque ella está diciendo idioteces. –dijo ella, volteándose para ver al chico. – Eres lindo, Marco. –una sonrisa tiró de los labios de ella. – Y besas igual de lindo. –el moreno se sonrojó hasta las orejas al escuchar eso.

- ¿L-lo dices en serio? –preguntó Marco, ella asintió con la cabeza.

Escuchó al director balbucear detrás de ellos y ___ sonrió. Ahora poniendo sus manos sobre las mejillas de Marco para pegar sus labios a los de él.

- ___ tienes detención. –gritó el director. – Y si Díaz hace algo tam... -justo en ese momento Marco colocó sus brazos alrededor de la cintura de ella para corresponder el beso. – Detención para ambos. –dijo en un suspiro.

Ambos alzaron las manos para tomar los papeles cuándo el director pasó por su lado, sin dejar de lado él labor con sus bocas. Y sin importarle el hecho de estar en una escuela.

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