×quince×

5K 471 97
                                    


- ¿Qué te sucede? –preguntó ___, observando a Marco.

- No sucede nada. Estoy bien. –fingió una sonrisa, levantando un poco la vista.

- ¿Por qué no quieres contarme? –ella se sentó a su lado, comenzando a acariciar el brazo del moreno. - ¿No confías en mí?...

El chico se estremeció ante el toque de ella. – N-no es eso, sólo... -suspiró, de todas formas ella lo descubriría. Tomó su teléfono y buscó el chat que tenía con Jackie, mostrándole los mensajes.

»Basura«

»Se aburrirá, cómo yo lo hice«

»No vales la pena, acéptalo«

»Idiota, ¿por qué no te vas y nos haces un favor a todos? Sólo estorbas«

»Porque eso eres, un estorbo, Marco Díaz«

___ apretó los puños y luego su mandíbula.

- ¿Qué te sucede? –preguntó Marco, al ver cómo ella tomaba un papel y lo despedazaba.

- Es una idiota. –murmuró ___. – Tú no eres nada de eso, Marco.

- Si lo soy. –dijo el chico, bajando la cabeza. – Al final vas a aburrirte de mí y volveré a estar mal. __, simplemente aléjate de una basura cómo yo.

- No sólo Jackie es la idiota. –ella rodó los ojos, ahora soltando los pequeños papelitos y sentándose junto a Marco en la cama. – No eres nada de eso, y tampoco debes creerle a ella porque simplemente te lo diga.

- Pero ella sabe que soy eso, me conoce. –dijo el chico, alzando la mirada. – Simplemente soy una molestia, un estorbo. Yo ni siquiera debí haber existido.

- Mira lo que esa descerebrada te ha hecho creer. –la oji-gris suspiró, negando con la cabeza. – Ella no te conoce, Marco.

- Si lo hace, sabe todo sobre mí. –respondió el chico, con una mirada triste.

- ¿Lo hace? –él asintió con la cabeza. - ¿Sabe más que yo? –ahora negó. – Entonces no sabe NADA de ti. No es nadie para decirte esas cosas.

- Tú si eres alguien, y muy importante. –habló el moreno. Mirándola. – Así que dime ___, ¿qué soy?

Ella sonrió, poniendo sus manos sobre las mejillas del Díaz y besando su nariz de manera tierna.

- ¿Qué eres?... –repitió, poniendo una cara pensativa. – El mejor chico que jamás he conocido. Alguien que tiene una hermosa familia y la mejor amiga del universo. –se señaló a sí misma. – También una amiga rubia que es una princesa de otra dimensión, la más cool diría yo. –dijo, refiriéndose a Star. – Un chico que es una buena persona, ha sufrido las mentiras de una descerebrada y ahora se cree todo lo que ella dice. –murmuró de manera burlona, Marco se mordió el labio. – Se cree que es una basura cuándo en realidad podría ser el diamante más costoso, al menos para mí. –el chico alzó la cabeza ante las palabras de ella. – Porque Marco Díaz es único, y me gusta tal cuál es. –Marco le sonrió de manera ladeada. – Por eso, yo, ___ Adams, la persona que probablemente te conoce mejor en todo el mundo. Voy a decirte que todo lo que ella dice son mentiras.

Marco la abrazó, hundiendo su rostro en el cuello de ella, mientras sentía cómo ponía sus brazos alrededor del cuello de él.

- Gracias. –murmuró el moreno, ahora separándose. ___ le sonrió, jugueteando con el cabello de la nuca de él. Bajó su mirada a los labios de ella, tratando de aguantar las ganas de besarla. Pero ella entreabrió los labios y eso fue lo que Marco necesitó para pegar sus labios en un beso algo desesperado.

Sonrió contra la boca de ella, apretando el agarre a su cintura y sintiéndose bien de que ella pensara todo eso de él.

Eres lindo, Marco. |Marco Díaz y tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora