capitulo 5

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- señor... digo... amo - dijo sion entre dientes forzosamente- ya estoy aqui ¿puedo pasar?

- ¡Claro, pasa Laura!

Y dele con el laura...Sion suspiró frustada denuevo, parecía ser un hábito ya, tenía una bandeja en sus manos,¿como abriría la puerta?, golpeó su cabeza contra la puerta y respiró intentado calmarse, miró a todos lados, ¡bingo! Una mesa cerca, caminó hacia ella, puso la bandeja y se devolvió a abrir la puerta, que tonta parecía en esos momentos, abrió la puerta y se devolvió de nuevo por la bandeja, con su pierna abrió la puerta y luego la cerró.

- aqui estoy

- ¿porque tardaste tanto? No ves que me tengo que ir -la miró frustrado y luego sonrió-

- ¿y ahora que?... -dijo sion rodeando sus ojos-

- es que te vez tan ridícula en ese vestido

- aún sige sin causarme risa tus chistes de mal gusto

- calma, sólo mira el lado Bueno, estoy siendo amable contigo, eso no es normal de mi, aprovecha- jimin se sentó en su mesa y comenzó a desayunar, sion sólo podia estar de pie junto a la puerta haciendo acto de presencia.

- traeme ese pañuelo, no quiero ensuciar mi hermoso uniforme

- ¿como tu corazón?... -susurró para ella misma, mientras caminaba hacia el pañuelo que el príncipe le habia señalado-

- ¿dijiste algo? - respondió mientras tenía su boca repleta-

-no es nada... aquí esta tu pañuelo - lo extendió hacia el príncipe esperando que lo tomara

- ¿que esperas? Ponlo en mis piernas, no vez que tengo las manos ocupadas

- Claro.. - gruño mientras lo ponía en sus piernas- ¿no crees que es mucha comida para una sola persona? No entiendo como no estás obeso

- y yo no entiendo como es que tu me hablas informalmente, recuerda que esto es una relación de empleado a jefe, y no es mucha comida, es solo que me alimento bien

- es una costumbre, hablaré formalmente de ahora en mas...

Sion sólo permanecía parada cerca a la puerta con sus manos cruzadas, el chico comía muy despacio, era algo que le daba ansiedad... ver comer a alguien tan lento...

- ¿y tú ya comiste? -preguntó él, mientras aún estaba con la boca llena-

- esta usted hablándome informalmente

-yo puedo hacerlo, pero tú no

- como diga -rodeó los ojos

- no respondiste a mi pregunta

- No, aún no reviso mi desayuno

- hmmmh... mejor, así adelgazas un poco

 mejor, así adelgazas un poco

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Que grosero... pensó, pero tenía que acostumbrarse, sería un tiempo largo, tan solo lo conocía hace un dia y ya lo odiaba con toda su alma, hasta ahora nada de lo que hubiera hecho sería Bueno, se preguntaba como es que tantas chicas lo aman, sólo aprecian la portada pero no leen el libro, así no funciona.

-ven aqui -dijo él tomandola por sorpresa

- ¿nesesita algo?...

- que vengas dije

- aigh... -sion se acercó y lo miró esperando que le dijera algo , pero lo único que se soltó fue un gran e incómodo silencio

- ¿que esperas? Siéntate

- ¿en la mesa?... -no sabía que pretendía ahora, pero deseguro algo bueno no era

- No, en el techo, pues obvio que en la mesa mujer

Sion se sentó y lo miró extrañada, entrecerro sus ojos mientras lo miraba de lado.

-¿porque me miras así? ¿no vas a comer?

- oh... era eso... pero no tengo hambre.. -miente, tenía hambre, y mucha

- sólo come, yo te dije que comieras, no si querías comer, me fastidia verte mirarme

Era eso, o talves no era tan malo como pensaba...

-debo irme al Instituto, dile a la señora liz que te de mi itinerario, mientras no estoy ordena mi habitación, mi ropa me gusta que este por colores , y bueno... esto es opcional, pero no le digas a nadie, puedes entrar a mi biblioteca, pero..

-pero ..

- nadie sabe sobre mi biblioteca, será nuestro secreto , ¿entendido? - sion asintió con la cabeza - ven, ayúdame con mi corbata -dijo sacudiendo su corbata

- claro.. -sion se levantó sacudiendo su falda y se acercó a jimin, tomó su corbata e intento hacerla, pero en realidad nunca aprendió, intentaba fingir que sabía, pero no podía engañar a el príncipe, el chico sonrió sarcásticamente -¿no sabes hacer una corbata verdad?- ella lo miró, la diferencia de altura era notoria, tenía que poner sus pies en punta para poder alcanzar su corbata- la verdad... No, leí sobre eso, pero no recuerdo muy bien- el chico se agachó un poco quedando de la altura de ella y le dio un pequeño golpe en la frente con sus dedos -eres inservible- la chica hizo un puchero y se alejó un poco

- ¿a donde vas? Aún no has hecho mi corbata

- no se como hacerla

- ven aqui, creo recordar como lo hacían

-no quiero... -sion miró hacia otro lado con sus labios fruncidos moviéndose en el mismo lugar

- que vengas - Se paró derecho y la acercó tomandola por la cintura, ella denuevo estaba congelada, estaban muy cerca denuevo, tenía miedo de que volviera a besarla, apretó sus ojos y se quedó quieta, el sonrió y se alejó un poco - ya abre los ojos, no voy a besarte denuevo- ella abrió los ojos y pudo ver la sonrisa del príncipe, talves si pudiera conocerlo mejor, dejaría de odiarlo tanto- nadie puede saber sobre eso

El príncipe tomo su corbata y comenzó a atarla, sion ponía mucho cuidado, debía aprender a hacerlo, tendría que hacerlo todos los días, por un momento se distrajo por el movimientos de sus carnosos labios

- ¿estas escuchando? - dijo sacándole de su trance

- oh sí... señor

- bien, espero que hayas aprendido, es tarde, debo irme

El príncipe salió de la habitación dejando tan solo el olor de su perfume por donde pasaba, sion cerró la puerta y se asomó por el balcón que habia en la habitación de jimin, podía verse el pueblo desde Ahí , bajó su mirada y ahí estaba el príncipe, se subió en una carroza junto con dos chicos, podía jurar que a uno de ellos lo había visto alguna vez, la carroza se fue y sion observaba como se alejaba, entró a la habitación cerrando la puerta del balcon y miró la habitación, estaba hecha un desastre, ¿por donde debía comenzar? Talves este año seria muy largo para ella.

príncipe narcisista  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora