Chloé.

Capítulo : 4

-Chloe... ¿Qué hacia esa mujer en nuestra casa?- Pregunta sin levantar la vista hacia mí. - Chloe, dímelo...-

- Era mi mamá...te trajo este sobre.- Se lo entrego.

- Chloe... Esa mujer...no...- Levanta la vista y busca mis ojos que parecen dos bolitas de cristal.- No...No es tu madre, Chloe. - Me quedo blanca e inmóvil. ¿No es mi madre? ¡¿Cómo no va serlo?! Si era mi madre... ó no.

- Que...quieres decir con que, no era mi madre- Le miro con cara de asombro.

- Chloe... ¿No te fijaste en sus pies? -

- Que pies Tay?! ¡Era mi madre! - Le miro con cara de asesina.

- Chicos y vosotros, ¿no os habéis fijado en sus pies? -

- Bueno, yo cuando la vi, me quede flipando, porque parecía estar buscando algo fuera, en el suelo. Por eso me vio y entramos juntos. -

- ¿Qué buscaba Erick? - Digo yo preocupada.

- Me dijo, que se le había perdido una uña y que la buscaba.- Me mira con cara de reflexionar lo que dice.

- ¡¿Una maldita uña?!- Digo con cara de pocos amigos, y miro a A, que parece aguantar la risa. - ¡Que uña va buscar esa mujer! ¡Por favor!-

- Chloe...no es tu madre. Es una gimera. -

- Una... ¿qué?- Pregunta Erick, y me mira a mí.

- Una gimera. - Responde Tay mirándome a los ojos. De repente toda la imagen se me pasa por la mente...y es cierto sus pies...

- Gimera... ¿Eso no era un mutante? -Pregunta Alison.

- Gimera...Alison, es un "bicho" que se puede transformarse en cualquier persona tras beber un poco de su sangre. Pero no pueden transformarse completamente porqué necesitan unas dosis grande de sangre humana y para eso tienen que matarla. Pero son listos, y se alimentan de aquellas personas que fueron marcadas. - Me mira a mí. Luego baja los ojos a mi muñeca. - No te lo quería decir, pensaba que no te afectaría Chloe, pero cuando me dijiste que querías ir a ver a James me di cuenta. Estas en proceso de ser elegida por una gimera.- Me miran con cara de culpabilidad.

- Pero...como es posible Tay? ¿Cómo puedo ser elegida? La fiebre te afecta. - Pongo ojos en blanco. Miro a los demás y sus mandíbulas casi rozan el suelo.- ¿Os lo creéis? - Pregunto a Erick y a Alison.

- Pues... es complicado pero, es cierto, que tu "madre" estaba rara, y recordándolo bien sus pies eran horribles.- Soltó Alison como si nada.

- Estoy de acuerdo con A, no es normal de tu madre presentarse en tu casa, ni tampoco... -

- Ni tampoco preguntar por Tay...- Termino la frase por él. - Entonces, ¿mi madre sigue viva? -

- Si, está en buenas manos.- Se acerca hacia mí. -Yo...- Me coge de las manos, - Soy hijo de una gimera. -

- ...Que...Que... ¡¿Que eres quien?! - Le suelto las manos y veo que todo se me nubla. Miro a Alison, que parece estar congelada en el tiempo. Erick, me mira con cara de preocupación, y está él. Le observo acercarse de prisa pero se me cierran los ojos.

Que ojos más bonitos. Se me acerca, me dice algo, pero no lo entiendo. Se acerca al oído y oigo que me susurra un " Te quiero..." Se aleja poco a poco y veo una sonrisa perfecta que me da bienvenida. Se vuelve a acercarse y me pega un beso en la frente. Estos besos son... de Evan! No, ¿otra vez soñando? No, no.... Veo a lo lejos a una sombra negra arrastrarse. Veo a Evan, que sigue susurrando cosas pero no le doy importancia... Sigo observando una extraña sombra a lo lejos, pero parece estar esperando a alguien. Pocos minutos después veo que se acerca un hombre hacia la sombra. Pero Evan me interrumpe. Vuelvo a posar mis ojos sobre los suyos...

- ¡Chloe, despierta!- ¿Despertarme?, no estoy durmiendo.

- ¡Despierta, ya! - Evan sigue sonriendo y vuelve a decir las mismas palabras, pero no le hago caso. Miro y la sombra se acerca más. Observo bien y se parece...a ¿James? Otra vez no... Miro sus manos y veo un sobre...pero Evan me vuelve a gritar. - ¡Despierta, por favor! - Pero sigue sonriendo... James levanta el cuchillo y se lo clava a Evan... No, Evan?!

- ¡Despierta maldita sea!- Miro como dos ojos negros me observan y se llenan de lágrimas. ¿De quién son esos ojos tan oscuros? Sigo observando y veo que otro par de ojos negros me observan. Miro sus bocas y no se mueven... ¡¿Qué les pasa a sus bocas?!

- Chloe....lo siento...- Giro a otro lado y veo que alguien me habla, pero no le veo la cara. ¡Ay! Un pinchazo agudo me desconcentra y vuelvo a cerrar los ojos.

- Déjala A, no se va a convertir.-

- No tiene buena pinta Tay, nada buena.-

- Necesito que este despierta, dormida no nos sirve de gran utilidad.-

- Tay, cuando se despierte, se lo tienes que explicar bien. ¿Entendido?-

- Si, señora.- ¿Señora? Por qué Tay llama señora a Alison? Intento abrir un poco los ojos pero la luz me ciega completamente y los cierro.

- Apaga la luz.-

Vuelvo a intentar y veo a Tay mirándome. Me sonríe y me da un pequeño beso en el moflete derecho. Le devuelvo la sonrisa.

- Bienvenida de vuelta. -