Chloé.

Capitulo: 19

Entro a mi habitación y veo a Tay durmiendo como si nada. Cojo algún pantalón corto, una camiseta y me los pongo rápidamente. Aún me quedan veinte minutos, así que decido sacar nuestros trajes del armario y prepararlos para mañana. En una silla coloco el traje de Taylor, le saco los zapatos. Cojo mi vestido, lo estiro y saco unos tacones que pegan con el vestido. Saco también la lencería adecuada y la coloco. Me miro en el espejo y veo que mi costra ya empieza a desaparecer, retoco un poco las ojeras que tengo, escribo una nota a Tay por si despierta antes de que vuelva y me voy. Al salir oigo que murmura algo, pero no llego a entenderlo.

En el pasillo veo a Alison hablar con la chica de limpieza y ella parece negar todo. Me acerco más y las escucho hablar sobre si sabe o ha visto algo inusual durante su estancia aquí. Pero parece no saber nada. Le guiño el ojo a Alison para que termine y me cuente todo, pero la muy testaruda sigue interrogando a la chica de la limpieza.

-Alison, venga vamos.- Le grito y por fin deja a la chica.

-Impaciente, ya la tenía a esto,- me señala una pequeña distancia con los dedos.- y tú no me dejaste acabar.- Me dice y se va yendo.

-Creo que tenemos que empezar a por interrogar a los camareros, que eran los primeros en verlos ayer, y supongo que los últimos...-O eso me gustaría creer.

Bajamos al bar que había abajo, y vemos a un chico alto, de un metro ochenta rubio y de ojos azules, que parece que lleva lentillas.

-Alex!- Grita Alison desde mi lado.-Tenemos que hablar contigo.- Le dice A, y nos dirigimos a la sala de todos los trabajadores de ese recinto.

-¿Qué pasa señora?- Le pregunta Alex, asustado y veo como le tiembla el labio de abajo.

-No estoy de servicios,-le responde A cortante.-es sobre mi prometido y su novio.-Me señala a mí.

-Oh, el señor Brown y el señor O'Dell...- Y de repente su labio inferior dejó de temblar.- ¿Qué quiere saber?-

-Todo.- Contesto yo y cruzo los brazos para prepararme para lo que va a contar.

-Ayer vi a los señores sentados en esa mesa. El señor Brown, estaba siempre con una cara de agobiado y con cara pensativa.- Cojo la silla y me siento y veo que Alex y Alison se sientan también.-Entonces señor O'Dell, pidió dos copas, creo que gin, o ron. No me acuerdo. Y estaban hablando de algún tal James, ¿creo?- Se calla pensativo. Yo y Alison nos miramos mutuamente y seguimos escuchando.-Sí.-Afirma Alex.- De un tal James.-

-Vale, y después?- Pregunta Alison.

-Pues estuvieron así dos horas, hasta que vino el señor Le Blanc y se unió con ellos.-

-Mi tío?- Pregunta Alison.

-Sí, él si que se pidió un gin-tonic. Luego, una hora después se marcharon.-

-Y sobre qué hora se fueron?- Pregunté.

-Sobre las tres, señora.-

- ¿Y volvieron otra vez por aquí?- Le preguntó Alison.

-No señora.- Contestó Alex.-¿Algo más señoras?-

-No, gracias.-Le agradecemos su ayuda y nos vamos.

Mientras salíamos del bar, ninguna de las dos dijo nada. Parecía que las dos estábamos pensando en lo mismo.

-Crees...Que es la culpa de James?- Preguntó A.

-Pues no lo sé.-

Las dos nos quedamos sin ideas.

-Creo que hay que buscar a mi tío. Él tiene ojos por todo hotel, habrá visto algo seguro.-