Best mistake. Shawn Mendes.

48

A la mañana siguiente me despierto, desayuno y me voy al instituto.

Una vez llego me dirijo a mi primera clase tan solo con Darcy ya que Abby, según me ha contado Darcy, no se sentía bien esta mañana y no ha venido a clase.

Tras una larga jornada de estudio me toca ir a entrenar.
Algo me dice que hoy va a ser un entrenamiento muy largo. ¡Al menos con Abby eran más entretenidos!
Camino hacia el pabellón cuando me encuentro con Megan.

Megan- ¡Eva!- Me llama.

- Dime.- Digo sin parar de caminar. No quiero llegar tarde y que Alice me grite.

Megan- ¿Has visto a Abby?- Pregunta preocupada.

- No.- Respondo.- Hoy no ha venido a clase.

Megan- Es que ayer se dejo este libro en mi casa.- Me enseña un libro de alemán.

- ¿Ayer?- Pregunto.

Megan- Sí, ayer.- Responde.- Vino a mi casa a estudiar.

- Ya es la segunda vez que se deja un libro en tu casa.- Digo.

Megan- Sí.- Responde.- ¡Será que quiere una excusa para hablarme al día siguiente!- Ríe.

- Bueno...- Digo al llegar al pabellón.- Tengo que entrar.

Megan- Sí.- Me da el libro.- ¿Puedes dárselo tú?

- Claro.- Lo cojo.

Megan- ¡Muchas gracias!- Me abraza y se va corriendo.

Esto ha sido muy raro...

Entro al vestuario, me cambio y una vez termino voy al círculo donde están las demás chicas del equipo.

Alice- ¡Empezamos a calentar!- Grita.

Yo me coloco en mi puesto y no os lo voy a negar. Al ver el puesto de Abby vacío casi lloro. ¿No se puede enfermar en fin de semana? ¡Luego la que se queda sola soy yo!

Alice- ¡Eva!- Su voz chillona me saca de mis pensamientos.

- ¿Qué?- Respondo estirando mis cuádriceps.

Alice- Ven un segundo.- Me llama.- ¿Dónde está Abby?- Me pregunta una vez llego a su lado.

- ¡Vaya!- Río.- Hoy todo el mundo quiere saber de ella.

Alice- No bromees.- Se cruza de brazos.- ¿Dónde está?

-En su casa.- Respondo.

Alice- ¿Y qué hace en su casa? ¡Hoy hay entrenamiento!

- ¡Pues como todos los días!- Me quejo.

Alice- ¿Qué insinúas?- Me mira enfurecida.- ¿¡Que deberíamos entrenar menos!?

- ¡Lo has dicho tú!- Levanto las manos demostrando mi inocencia.

Alice- Cállate.- Rueda los ojos.- ¿Por qué no ha venido Abby?- Repite.

- Está enferma.- Respondo.