Capitulo 21. Recordando

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Samuel tomo ventaja ante la delicadeza de Andrea, mordió ligeramente sus labios y por instinto André abrió ligeramente la boca permitiendo que Samuel introdujera su lengua, al principio sintió la invacion algo extraña, pero según el beso avanzaba Andrea iba tomando más confianza imitando cada acción de Samuel

Samuel succionaba los labios de Andrea con ansias, se estaba volviendo loco, necesitaba mucho de ella, la tomo de la cintura y la pego a su cuerpo, pero casi de inmediato la alejó percatándose del gran error que había cometido

Andrea: samu -soltó en un susurro, se sentía extraña, ansiada de que aquel beso tan desconocido e intenso para ella continuará- fue muy rico

Samuel: ¡no! ¡No más! No debe volver a pasar -se alejó de ella como si quisiese huir de algo peligroso

Andrea: es extraño, pero rico, siento algo aquí en la panza como si hubieran muchas cosas corriendo ahí dentro -sostuvo su abdomen-

Samuel: olvídate de esto Andrea, esto no pasara otra vez -se levanto de la cama y se dirigió al baño asegurándose de cerrar bien la puerta

Samuel

No me lo puedo permitir, no con ella, Dios mío por favor ayúdame a que esto no siga avanzando, ayúdame a salir de ella rápido porque cada día me controlo menos, se que estuvo mal, muy mal lo que hice, me aproveché de ella y ella ni siquiera entiende nada de lo que está pasando...

Estuve alrededor de una hora encerrado en el baño, no quería salir, no quería tener que verla nuevamente porque sé que su mirada tan inocente terminaría acabando con cualquier batalla que intente construir dentro de el baño. afortunadamente cuando salí, Andrea ya estaba dormida en su cama, agradecía eso, tengo que acabar con todo esto de una buena vez, Andrea no puede seguir conmigo porque no merece que alguien más la lastime...

.........

Una vez más irina había permanecido hasta tarde en la oficina, lo utilizaba como un refugio, luego de la muertes de su padre sentía que su casa ya no era la misma...

Flavio: ¿otra vez aquí? -preguntó al asomar su cabeza por la puerta provocando que está se asustara al no percibir su presencia

Irina: si, estuve mucho tiempo fuera, creo que lo mejor es que vuelva a mi empresa y sólo recibir de ustedes algún informen semanal de cómo van las cosas en lo que consigo quien se haga cargo

Flavio: sobre eso, quisiera hablar contigo. vamos, te llevo a casa

Irina: no es necesario que me lleves, Flavio

Flavio: para mí si lo es, desde esa noche no estás segura, vamos y en el camino hablamos

Irma: está bien -dijo rendida-

Flavio la espero en la puerta que recogiera sus cosas y en cuanto termino bajaron juntos al estacionamiento. Flavio abrió la puerta del copiloto para dejarla pasar a ella para luego darle la vuelta al auto e imitar la misma acción de irina

Irina: ¿que es lo que quiere hablar?

Flavio: es sobre mi papá -contestó sin despegar la mirada de en frente- está hablando con los abogado para proponerte comprar tu empresa porque según el, la dejaras caer

Irina: ¡¡que el que!! ¡Está loco! -dijo alterada-

Flavio: justo eso pensé, es mi papá pero lo que pretende hacer no es lo correcto y eso es lo que más me duele, tenía una imagen muy errónea de el

Irina: ¡está loco! De ninguna manera le venderé mi único patrimonio, ni aunque se este callendona pedazo

Flavio: por eso te lo estoy contando, desde ahora tú y tu madre pueden contar conmigo para lo que sea

La loca de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora