La loca de mi vida

Capitulo 70. Accion y reaccion

Braulio se acercó al jardín con rapidez al escuchar los fuertes gritos de su mujer, su corazón se aceleró y su pulso empezaba a sentirse muy pesado, algo muy malo había pasado como para que ella estuviera así

Braulio: ¿qué pasó ahora? -se acercó a ella y la tomó de los hombros-

Ursula: mira -se soltó con brusquedad y señaló la pequeña urna vacía- ¡mira lo único que quedó de tu hija! -gritó desconsolada, se dejó caer de rodilla en el suelo y tomó la carta para llevarla a su pecho- ¡ella la mató! Esa maldita loca Mato a nuestra niña -miro a sus esposo con ojos lleno de dolor-

Braulio retrocedió unos pasos, llevó una mano a su pecho y rápidamente empezó a sentir las fuertes sacudidas que daba su cuerpo, no tenía palabra, no había ni una para explicar lo que estaba sintiendo

Braulio: no... -pudo apenas susurrar- ¡eso no es cierto!

Ursula: ¡si lo es! -gritó y se puso de pie- esa maldiga mujer la mato, ¡la mato! ¡Valery está muerta! ¡MUERTA!

Tomó la carta y la restregó contra el cuerpo de Braulio. Jamás se había sentido de esa manera, ni siquiera cuando perdió a sus padres, ursula creía que con el tiempo había perdido toda sensibilidad, pero no, nadie podría prepararla para perder a su hija, se suponía que ella debía morir primero, que ella no tendría que vivir ese momento y menos de esa forma

Braulio sin embargo sólo tomó la carta y se alejó, vivió una vida llena de odio y envidia y valery era lo único bonito que tenía, lo único puro que había salido de él, se maldijo mil veces por haberla llevado hasta ese punto, porque si habría que buscar un culpable, el mejor que nadie sabía que era el y su esposa

Entro al despacho como un alma en pena, como un ser sin vida, se dejó caer sobre un sofá y con manos temblorosas apartó la carta de su pecho para dejar salir todas las lágrimas contenidas al reconocer la letra de su hija

"Muchas veces creí que había hecho algo mal para ganarme su rechazo, muchas veces intenté agradarlos de mil forma hasta llegar al punto de comprometerme con alguien que no quería solo porque ustedes lo quería, creí que así obtendría al menos un poco de su atención.

Por muchos años los tuve sobre un pedestal, justificando su falta de amor porque eran personas importante, incluso llegue a pesar que solo ahorraban mucho dinero para que algún día pudiéramos ser felices los tres...

Pero no, todo eso se vino abajo cuando conocí a Andrea, cuando conocí su verdad de porque me alejaron de ustedes, la odié, la odié como a nadie por haberla preferido a ella, pero que equivocada estaba, solo bastó hablar con ella una vez para darme cuenta que por más que lo quisiera, los únicos culpables eran ustedes.

Cuando pude hablar con Andrea sin nadie entre nosotras, apenas podía respirar, tenía ayuda asistida por una máquina, pero aún así me sonrió, aún así me dio un abrazo en único abrazo con amor que he recibido en toda mi vida, a pesar que yo fui a buscarla para reclamarle, enterarme de la verdad me dolió mucho más que todos esos años de ausencia, por un momento me puse en su lugar y agradecí inmensamente el que me hayan alejado de ustedes, pero Andrea no merecía ese trato, no sin razón alguna, sin saber por qué

Por lo tanto no podía seguir viviendo sabiendo que todo lo que le hicieron a Andrea fue por mi culpa, por mi bien porque tuviera todo lo que merecía, no fue Justo y no es justo para mi vivir sabiendo que todo lo que sufrido esa chica a sido por mi culpa.

Andrea es la persona más alegre que he conocido, tiene demasiado amor para dar, no era Justo que muriera después de haber luchado tanto por un poquito de felicidad y si yo podía dársela, eso me haría sentir por primera vez útil, porque ni siquiera le serví a ustedes para darles un poco de amor