La loca de mi vida

Capitulo 73. Andrea

Los días continuaban pasando y el paradero de ursula y Braulio era incierto, la familia procuraba estar tranquila, vivir sin cohibirse de nada, pero sin olvidar lo importante de la seguridad que todos debían tener

Samuel después de meses, retomó nuevamente los arreglos de su restaurante, ya estaban a ley de 2 días para al fin inaugural ese espacio que Samuel tanto a deseado.

Por su parte Flavio ayudaba a su padre a volver a tener todo como antes luego de que al fin pudiera reabrir la empresa sin ningún cargo, pero este no dejaba de pensar en lo importante que era para el obtener el perdón de su hijo Samuel, aunque el no quisiera verlo, debía lograrlo

Andrea y Samuel habían vuelto al apartamento con su pequeño, necesitaban su propio espacio, necesitaban vivir y disfrutar de su pequeña familia, su bebé ya tenía tres meses de edad Andrea se mantenía con el todo el tiempo, en ningún momento quiso soltarlo y menos luego de descubrir que podía amamantarlo

Irina: ¡Andrea no! Recibiste un transplante de corazón, no creo que puedas hacerlo -le dijo a una inquieta Andrea-

Andrea: ¿quieres apostar? -preguntó mientras iba soltando su blusa- claro que puedo, ósea puedo hacerlo con este -señaló su pecho derecho- y no va a lastimarme, ademas el me va a ayudar. ¿Verdad mi pollito? -está vez se dirigió al bebé-

Irina: no hagas nada, ahora regreso, llamaré al doctor -salió de la habitación-

Andrea: estoy empezando a creer que la loca es tu tía -le dijo al bebé- ya verás, ya verás que podremos lograrlo -su pequeño nunca se había alimentado de esa forma por lo que era algo bastante nuevo para el, pero ambos lo lograron, después de un par de intentos el bebé logró capturar el pezon de Andrea-

Irina: si doctor, ella insiste en que... -vió como Andrea contrario a lo que le había pedido, amamantaba al bebé- olvídelo, ya lo está haciendo -puso los ojos en blanco- si, le dire que tenga cuidado, gracias -colgó-

Andrea: te lo dije, me debes un chocolate-

Irina: ¿no te duele nada? ¿Andrea? -insistió al no tener su atención-

Andrea: nada, solo sentí una pequeña incomodidad al principio, pero recuerdo todo lo que tuviste que pasar para amamantar a Frida a si que supongo es normal

Irina: eso espero

Andrea: por cierto -miro a su prima mientras acariciaba delicadamente las piernitas de su bebé- asi que te reconciliaste con Flavio -dijo en un tono coqueto- dime, ¿de casualidad dejo otra semillita ahí dentro?

Irina: si nos reconciliamos -sonrió y sus mejillas enrojecieron- me preparó una cena en una playa preciosa que nos trae mucho recuerdo... ay andy -tamo su cara con un cojín- no sabes lo tonta que fui, Flavio es un príncipe, el príncipe de mi vida, me canto al oído , bailamos y me hizo el amor como nunca, fue mágico Andrea, fue magia y sobre lo de la dichosa semillita, pues no, yo me cui...do -concluyó con duda- si, me cuido, estamos perfectos con Frida y viviendo como locos nuestra reconciliación

Andrea: y ya me imagino de que manera

Irina: para que te digo que no si si -sonrió- bien que se que tú estás ansiosa por lo mismo

Andrea: ¿por qué crees que me puse bien aparte de mi pollito?  no me podía ir de este mundo y dejar a Samuel que me ofrece taaaantos placeres

Irían: ¡Andrea! Se supone que estas cosas deberían causarte confusión o algo así

Andrea: Irina, hace mucho que dejé de ser una loca de la vida, estoy bien, Samuel me hace bien, mi bebé, ustedes, estoy completamente segura que a partir de ahora mi vida dará un gran giro, se lo prometí