Kristen

XV-Capitulo

24-dic.-2015
5 meses después

Llegó navidad
Y yo sin tí en esta soledad
Recuerdo el día en que te perdí
No sé en donde estés
Pero en verdad...

Canto melancólica feliz navidad de los bukis, hoy es 24 de diciembre, estoy sentada sola en el sillón de "mi" casa, lágrimas recorren mis mejillas.

Quien diría que los años anteriores ni siquiera me importaba celebrarlos y si lo hacía pasaba mas tiempo con mis amigos que con mi familia.

<<Vaya amigos, te dejan botada cuando más los necesitas>>

Ahora extraño esos breves momentos cuando estuve con mi familia, como los extraño.

<<Nadie sabe apreciar lo que se tiene hasta que lo pierde>>

El día de hoy la he pasado escuchando músicas 'corta pulsos' de 'cavangas' o 'sentimentales' o a como ustedes quieran llamarles.

Sollozo a moco tendido, fuí una estúpida, como pude haber desperdiciado todo ese tiempo? Lloro amargamente por toda mi rebeldía, por todas esas veces que no le hice caso a mi madre, fueron tan pocas veces las que realmente la pasamos bien.

Unos brazos rodean mi cuerpo y yo escondo mi rostro entre el pecho de Jayden, sé que es él por el olor que desprende, su olor es único, además siempre que me abraza siento que puede calmar todas las tempestades de mi interior.

Cuando logro calmar mis sollozos un hipo se apodera de mí, Jayden coloca un dedo bajo mi barbilla haciendo que levante mi rostro, nuestras miradas se encuentran y sus ojos denotan tristeza, dolor, impotencia, delicadamente empieza a limpiar todo rastro de lágrimas que hayan en mis mejillas.

-Ven, te daré algo dulce para que se te vaya ese hipo- dice empujándome hacia la cocina.

-Un... poco.. de jugo... estaría bi...bien- digo entrecortadamente por culpa de los hipeos, pareciera como si estuviera ahogada en alcohol, mi amigo sonríe divertido sirviendo un poco de jugo en un vaso.

-Aquí tienes- dice Jayden tendiéndome el zumo, le doy una mirada de agradecimiento y me lo tomo.

-Ahora dime, porque estabas llorando?- pregunta éste y yo devío la mirada sintiendo de nuevo ese nudo instalándose en mi garganta.

-Hoy es noche buena y estaba recordando... estaba recordando todas las navidades anteriores...- mi voz amenaza con quebrarse, me aclaro la garganta para poder seguir -Todas las veces que preferí irme con mis amigos y no pasarla con mi verdadera familia, se que es demasiado tarde pero ahora me arrepiento de todas las estupideces que hice, desearía poder volver a estar con ellos aunque solo fueran cinco minutos, me siento tan sola, no merezco nada bueno, debí haber muerto yo y no mi familia, ellos merecían vivir y no yo...- no lo resisto y mi voz finalmente se quiebra, nuevos sollozos desgarradores brotan de lo más profundo de mi, esta vez lloro junto con mi alma y corazón.

-Shhhh...- me consuela abrazándome nuevamente, tomo su camisa en puños, él empieza a sobar mi cabeza y a trazar círculos con su dedo sobre mi espalda ayudando a relajarme poco a poco -No, ya hemos hablado de esto, tu no sabías que eso iba a pasar y aunque lo hubieras sabido nada hubiera impedido todo lo que pasó, el destino ya esta escrito, nadie puede salvarse de las garras de la muerte, además tu no estás sola, me tienes a mí- dice regalándome una sonrisa tranquilizadora, lo abrazo por el cuello y él me rodea la cintura.

Luego de unos largos minutos nos separamos y le doy una sonrisita tímida a lo que él me devuelve una cariñosa sonrisa.

-Gracias...- digo en un susurro.

-Siempre estaré para tí- igualmente me susurra.

-Te digo una cosa?- digo observándole a lo que él asiente lentamente frunciendo su entrecejo -Tú no deberías de llamarte Jayden, deberías de llamarte Ángel...- digo y su cara denota confusión -Deberías de llamarte así porque eres como un Ángel para mí, me transmites seguridad, paz, fuerza cuando más la necesito, siempre sabes lo que realmente necesito, eres como mi Ángel de la guarda- termino de decir y él sonríe tímidamente.

-No me considero precisamente un Ángel, pero realmente me complace saber que puedo ser de ayuda- dice y suelto una risita.

-Eres mi héroe- susurro -Te quiero- digo sin pensar y su rostro se ilumina.

-Yo tambien te quiero- responde sin titubear y se lanza a abrazarme y yo le correspondo.

.......