Ficción o realidad

CAPÍTULO 4

   Bueno, pues aquí estoy de nuevo, en la estación de Joaquín Sorolla en Valencia. Tengo muchas ganas de llorar porque en Madrid he dejado a mucha gente que quiero, y una parte de mi corazón se ha quedado allí. Madrid siempre será un lugar especial para mí, he vivido tantísimas cosas en solo cuatro meses. El AVE está a punto de parar, y yo tengo sentimientos extraños, me apetece muchísimo ver a mi familia, pero a la vez estoy triste por todo lo que he dejado allí.

   Cojo mi maleta y me dirijo a salir, y vislumbro a mi hermana y mi cuñado, y le saco la lengua, pero ella no me ve, sonrío. Paso la puerta y le chillo:

-Eh, tú no me has conocido pero yo a ti si petarda!-y suelto la maleta y le doy un gran abrazo y luego dos besos a mi cuñado. Vuelvo a mi pueblo de Castellón unos días porque días antes de volver me llamaron para trabajar en Valencia, y oye no está mal.

   De camino a casa estoy callada mirando por la ventana, pensando en todo lo que he vivido y preguntándome que me deparará la preciosa Valencia. Espero que sea parecido a todo lo que me ha pasado en Madrid. Pero en el fondo me da miedo, porque aquí si que es empezar de cero totalmente. Irme a un piso sola, no conozco a nadie, en Madrid tenía a Cris, aquí no hay nadie, y en el fondo tengo miedo. Tengo miedo porque siempre he sido la rara del grupo, no se reían de mi ni me hacían bullyng pero si es verdad que todas las bromas iban a parar a mi, y eso agota.

-¡Hey! Lucy ¿que te pasa?-mi hermana me saca de mis pensamientos.

-Nada, estaba pensando en que tengo ganas de ver al tete, a la mamá, y mis chiquitines, espero que aún se acuerden de mi-digo con media sonrisa. En valencia normalmente tete es tu hermano, y cuando hablo de mis chiquitines me refiero a mis dos perritos. A todos llevo sin verles tres meses y hay ganas.

-Oye mira, tu cuñado me ha descubierto a un youtuber con el que te partes de risa, ¿quieres que pongamos algún vídeo y nos reímos?

-Venga vale, así el viaje se hace más divertido.-Mi hermana saca el móvil y el cable y lo conecta a la radio del coche que tiene una pantalla y se pone a buscar y me pone un vídeo que se titula "El mejor entrenador de Pokemon Go" y le da al play, es un chico moreno de ojos ¿negros? Con un poco de barbita.

   El video en si es una broma telefónica a un jugador para avisarle que deje algún pokémon para que lo pueda cazar él. El caso es que me río muchísimo con el vídeo, tanto que hasta me duele la barriga. ¿Cómo hay gente que se enfada así por un juego? Seguimos viendo vídeos y pasando dos o tres más automáticamente.

-No puede ser!!!-Grito de repente y mi hermana da un salto.

-Joder Lucy no hagas eso, voy conduciendo y podemos tener un accidente-dice mi cuñado asustado.

-Joder lo siento, de verdad perdón, pero ha sido sin querer. Pe...pero es que...-se me entrecorta la voz.

-¿Qué pasa teta?-dice mi hermana girándose un poco preocupada. Yo tengo mi mirada fija en la pantalla de la radio, y ahí está.

-Es él...no...no puede ser. Es él, esta ahí-digo con los ojos abiertos.

-Él quien, no entiendo nada.

-Ese, ese es el chico.-aún no me lo puedo creer.

-¿Qué chico, que dices?

-Es el chico que vi. -Mi hermana sigue mirándome con cara de no saber lo que está pasando. -Ese chico moreno de ojos azules-y señalo la pantalla, mi hermana se gira y lo mira, y luego me mira con cara de pillina. -No es eso joder. A ver, ¿recuerdas que te conté que en la feria del libro vi a un chico que me dejó totalmente alucinada?

-Si, ¿es él?-asiento con la cabeza sin terminar de creérmelo. De verdad lo tengo delante de mi, lo he encontrado.

-Es el mismo, es él. Jamás podría olvidarle, no después de lo que sentí teta, te lo juro.-Sigo mirando y me río bastante con el vídeo, al menos tiene sentido del humor y eso me gusta.

   En casa todo son abrazos y besos, y lametones por parte de mis chiquitines, y mu hermano, dios mio cómo ha crecido el enano. Es posible en solo tres meses que haya cambiado tanto. Ha venido toda la familia, mis tías, mis tíos, primos, amigos... Y decidimos irnos todos a cenar a un bufet libre para celebrar la vuelta. La verdad es que están logrando que que olvide un poco todo lo que he dejado en Madrid y recuerdo todo lo que tengo aquí.