36

6.4K 194 11
                                    


No puedo ver a Lara jean más que en la escuela, todo se pone peor, ya que siempre estamos rodeados de más gente, llevo días sin poder darle un beso. Cada que lo intento, Lara jean pone cara de pánico y mira a nuestro alrededor buscando miradas indiscretas. Es una mierda.

Estamos tirados en el jardín de darrell, ya que su madre aun no lo deja ir lejos de casa. Meto un puñado de cheetos a mi boca. —Llevo días sin saber nada de ella. —Dice darrell con la boca llena.

—Olvídala hombre, pasa de ti. —Dice Gabe. Y ambos nos echamos a reír. Darrell toma un puñado de cheetos y los arroja sobre nosotros.

—Del suelo no crecen arboles de cheetos cariño. —Grita la madre de darrell desde la ventana. Eso hace que todos riamos, incluso darrell.

—Deja de espiarme mamá, no voy a escaparme. —Grita darrell.

Su madre levanta una ceja y sonríe. Es un hecho que no le cree.

—Tal vez deberías enviarle una carta. —Digo.

Darrell hace una mueca de asco, luego sonríe maliciosamente. —Claro, deberías darme algunos consejos. —Dice sentándose y mirándome tendido en el suelo. —Tu eres el chico de las notas.

Pongo los ojos en blanco y me siento para estar a su altura. Gabe esta recostado, con las manos detrás de su cabeza. Tan relajado que da envidia.

—siempre te puedo dar un consejo. ¡Novato! —Digo.

Darrell frunce el ceño, sus ojos se vuelven dos pequeñas rendijas. Es como un leopardo preparándose para atacar.

—¿Qué hace peter kavinsky un sábado con nosotros, cuando podría estar tejiendo con su queridísima lara jean? —Canturrea Gabe, con los ojos aun cerrados.

—Hey, paso mucho tiempo con ustedes. —Me quejo,

Darrell sonríe y Gabe abre un ojo para mirarme por unos segundos y después lo cierra de nuevo. Me doy por vencido y digo: —Es por el estúpido juego de asesinos.

Esto llama la atención de Gabe, que se sienta de inmediato. —¿Qué mierda es ese juego?

Les explico a los chicos, todo sobre el juego. Incluso les cuento algunas anécdotas de nuestra niñez, que los hace reír.

—Bueno, estamos dentro. —Dice darrell emocionado.

—No pueden jugar. —Explico. —Tendrían que haber estado en el sorteo de nombres.

Ambos fruncen el ceño decepcionados. — Y una mierda. —Dice Gabe.

—Podríamos jugar una mano con los chicos de lacrosse. —Propongo.

—Creo que sonara estúpido. —Dice darrell. Gabe arruga la nariz.

—como sea. —digo y me tiro de nuevo al césped.

—Bueno y a todo esto, ¿Por qué no estas casando a la persona que te toco? —Pregunta Gabe.

Me encojo de hombros. —Es mucho trabajo. Solo esperare a que chris me marque, quedare fuera y podré ver de nuevo a lara jean.

—No seas aburrido. —Dice darrell pateando mi zapato. —Hagámoslo, te ayudaremos.

—Tú ni si quiera puedes salir de este jardín. —Digo. —Es más, empezare a llamarte, darrell el gnomo.

Dejo escapar una risita que ambos ignoran. Me están mirando atentamente.

—¿Quién te toco? —Pregunta Gabe, muy serio.

Pongo los ojos en blanco. —Gen.

Darrell frunce el ceño y Gabe asiente para si mismo. —¿Qué? —Espeto.

—De nuevo lo estás haciendo. —Dice Gabe. —No la marcas para que se salga con la suya.

—Es solo un juego estúpido. —Respondo, y me odio por sonar tan a la defensiva.

—Un juego, que te aleja de tu novia. —Dice Gabe, sonriendo irónicamente.

Darrell que sigue con el ceño fruncido dice: —Espera un momento, ¿Gen sigue con sus problemas familiares?

Asiento.

—¿Qué problemas? —Pregunta Gabe.

—No es nada. —Respondo, al mismo tiempo que darrell dice: —su padre, está engañando a su madre.

Miro a darrell severamente. El levanta las manos al pecho en forma de rendición. —Diablos hermano, solo es Gabe. No ira por ahí divulgándolo.

Gabe me da una mirada herida. Dejo escapar un suspiro cansado: —No es cosa mía, no es mi secreto. No puedo ir por ahí contando que su padre es un cabrón.

—Darrell lo sabía. —Se queja Gabe.

—La verdad es que me entere, por accidente. —Tercia darrell.

Gabe se calma un poco: —Bien de acuerdo. —Dice, mirándonos. —Pero deberían confiar un poco más en mí, tarados.

—Confió en ti. —Digo mirándolo. —Es solo que, gen la está pasando mal y no me perdonaría que yo la traicionara.

—Nadie se enterara por nosotros. —Dice darrell.

Le cuento a los chicos, todo lo que ha estado sucediendo con el padre de gen, y es como soltar un poco de presión.... 

Pd. aun te amo - Peter kavinskyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora