What am i to you? [NamJin]

Crayones morados

Delicados pasitos se escucharon por el pasillo, di un vistazo al reloj de pared en mi oficina en casa y me di cuenta de que ya era bastante tarde, una cabellera negra y revuelta se asomó por en un pequeño espacio entre abierto de la puerta.- ¿Qué sucede, príncipe?, ya deberías estar dormido-. Se adentró en mi oficina arrastrando los piecitos envueltos en si pijama completa de osito, en sus manitas sostenía algo que no alcanzaba a identificar sosteniéndolo fuerte contra su pecho, dejé los papeles en el escritorio y alejé la silla para darle espacio a mi bebé, cuando llegó a mi lado me mostró una sonrisa enorme con hoyuelos.- Papi, decordé la tarea-. Me incliné y lo tomé en brazos sentándolo sobre el escritorio.- ¿Qué tarea, corazón?-. Peiné los mechones rebeldes que salían descuidados del gorrito de su pijama y acomodé las orejitas que simulaban orejitas de oso.- Huum...debo llevar una foto de mi mami, mi papi y yo-. Ladeó su cabecita con esa hermosa sonrisa que tenía y movió sus piecitos con emoción.- ¿cuál quieres llevar?-. Hice la pregunta cauteloso sin saber si con "mami" se refería a Jin o a HyoSun, no tenía muchas fotos de la época en que ella vivía con nosotros, mi ex esposa siempre tenía alguna excusa para no acompañarnos en fotos familiares y en la pocas que había no mantenía una expresión agradable quizás había un pequeño puñado de fotos donde parecíamos una familia real mientras ella estuvo con nosotros.

HyunDae le dio la vuelta al objeto y me mostró un portarretrato de madera oscura que tenía una foto hermosa, era de apenas hace unos meses, nos habíamos tomado esa fotografía una tarde que fuimos a la playa junto a mi hermana, YeRin había tomado la fotografía sin que nos diésemos cuenta, SeokJin se encontraba sentado en la blanca arena que parecía brillar, su espalda se apegaba a mi pecho con comodidad y yo rodeaba sus hombros con mis brazos mientras apoyaba mi mentón en su hombro, entre las piernas extendidas mi novio, mi niño jugaba haciendo un castillo de arena, sus manitas trataban de formar la torre del castillo palpando la arena sobre este con cuidado, su pequeña lengua rosada sobresalía de sus labios tratando de concentrarse y lucía adorable, tanto Jin como yo manteníamos una sonrisa enorme observando a HyunDae, la imagen era preciosa, una porción del cielo era apenas visible con unas preciosas nubes que parecían algodón, era totalmente natural y dejaba ver el enorme amor que nos teníamos los tres. Observé la imagen unos momentos con una sonrisa.- ¿Pueo llevar esta, papi?-. HyunDae me sacó de mis pensamientos.- Claro que sí, mi amor-. Le regresé la fotografía y él la tomó entre sus manitas apretándola de nuevo contra su pecho.-Vamos príncipe es hora de dormir-. Lo levanté en mis brazos dirigiéndome a su cuarto, tomé su mochilita y dejé la fotografía dentro bajo su atenta mirada y lo recosté en su cama depositando un beso delicado en su frente después de arroparlo.- Dulces sueños, príncipe-. Acaricie su mejilla y me dio una enorme sonrisa.- Te quiero, papi-. Susurró antes de acurrucarse contra las sabanas y cerrar sus ojitos.

HyunDae salió corriendo del jardín de niños con una enorme sonrisa y la mochila sobre su espalda, tan pronto como lo vi me acuclille y abrí mis brazos para recibirlo, se lanzó fuerte contra mi pecho y deslizó sus bracitos por mi cuello mientras me ponía en pie y lo apretaba en un abrazo.- ¿Qué tal el jardín?-. Le pregunté mientras me encaminaba al auto y retiraba el seguro con el mando a distancia.- Divertido~-. Canturreo haciendo más aguda su vocecita.-Me alegra mucho eso, príncipe-. Lo dejé sobre el asiento trasero y ajusté el cinturón de seguridad acomodando la mochila a un lado, dejé un beso en su frente y cerré la puerta para ir hasta el asiento del piloto y entrar en él, el auto ronroneo al encenderlo y encendí la música a un volumen que nos permitiera hablar.- ¿Qué quieres almorzar hoy?-. Era viernes y me iba permitir consentir un poco a mi hijo después de una semana de comida saludable.- ¡QUIERO PIZZA!-. Saltó en el asiento aplaudiendo con sus manitas y una enorme sonrisa traviesa.- Bien, entonces comamos pizza-. Puse el auto en marcha y lo escuché tararear mientras yo buscaba una pizzería cercana, después algunos minutos su cantó se detuvo.-Papi... ¿Podemos comer con mami Jin?-. Le miré un segundo por el espejo retrovisor, estaba haciendo esos ojitos de cachorro que utilizaba para convencerme.- Déjame llamarlo-. Me detuve en el estacionamiento de la pizzería y conecté el celular al altavoz del auto, dos tonos de llamada después escuchamos la voz de mi novio.- ¡Nammie!-. Mi pequeño niño se estiró en su lugar con los ojitos brillosos atento a la voz de mi chico, por mi parte una sonrisa se quedó en mis labios.- Amor, estas en el altavoz, estoy con HyunDae-. Mi niño se estiró ansioso como si quisiera acercarse al celular.- ¡Mami!, te estaño mucho-. Hizo un pucherito con su boquita La voz de mi novio se escuchó emocionada cuando habló de nuevo.-Príncipe, también te extraño, dos días sin verte es demasiado-. Yo sonreía como un tonto escuchándolos hablar y recargándome en mi asiento.- ¿Mami, vamos a comer pizza, puedes comer con nosotos?-. Había un toque de esperanza en su vocecita aguda.- Claro que si, Nam, ¿Pueden venir a mi oficina?-. Reaccioné que me estaba hablando a mi había estado totalmente embelesado en su intercambio de palabras y me despabilé un segundo antes de responder.- Claro, mi plan era preguntarte si podíamos ir para allá-. Escuché el ruido de otra voz lejana en el teléfono y luego a Jin gritar un "Diles que estaré ocupado un buen rato, necesito revisar algunas cosas y después tomaré el almuerzo", después de eso escuchamos un leve suspiro.- Lo siento amor, entonces los espero aquí-. HyunDae Soltó un chillido de emoción y aplaudió con sus manitas.- Nos vemos allá, te quiero-. Sostuve el celular entre mis manos.- vengan con cuidado, los amo-. Y mi corazón tartamudeo antes de que la llamada terminara.