07: Pasando mucha vergüenza

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Amber saludó a su hermana en el tenso silencio que se había formado

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Amber saludó a su hermana en el tenso silencio que se había formado. Intenté no hacer contacto visual con nadie, y en vez de eso, miré atentamente el lugar. Estaba lleno y lamentablemente no había mesas disponibles.

Amber, quien parecía feliz de encontrarse con su hermana y Kem, se sentó en una silla frente a ellos. Mierda.

El susurro de alguien en mi oído me hizo voltear.

—¿Te gustaría sentarte aquí? —preguntó Kylan. No tuve más remedio que asentir. No podía simplemente negarme a sentarme con ellos.

Amber se sentó al lado de su hermana, Ada, y Henry se acercó a ella. Por instinto lo detuve y negué, mi mejor amiga me mataría si dejaba que él se sentara frente a ella. De un lado había espacio para tres y en el otro lado también, por lo que yo quedé sentada entre Kylan y Henry. Levanté la cabeza y un par de ojos verdes me devolvieron la mirada.

No la desvié, quería saber si Kem sería capaz de hacerlo.

No lo hizo. Por lo que nos quedamos mirándonos fijamente unos segundos. Me preguntaba qué pasaba por su mente.

Venir aquí y verlos, a él y a Ada juntos, produjo en mi pecho un sentimiento de inquietud. Cosa que no tenía sentido, así que decidí ignorar esa punzada, a pesar de tener los ojos de Kem fijos en mí.

El carraspeo de alguien llamó mi atención. A regañadientes volteé mi cabeza. Ada nos miraba con molestia, parecía que su cita se había arruinado.

—Creía que estarías en casa —dijo Kem mirando a su hermano. Kylan estaba a mi lado, y debido a que los asientos estaban muy juntos, nuestros hombros se rozaban ligeramente.

—No, le prometí a las chicas que vendría a aquí. —Se encogió de hombros—. Amber dijo que en este lugar venden el mejor pastel de chocolate.

Amber saltó emocionada con la mención de Kylan. Lo miró fijamente.

—¡La mejor! Es demasiado deliciosa...

—Uh, deliciosa... —murmuró Henry interrumpiendo a Amber. Todos lo miraron con el ceño fruncido. Yo lo codeé, haciendo que me mirara confundido—. ¿Qué?

Amber rodó los ojos, molesta de que la interrumpiera.

—Papá nos trajo ayer aquí —comentó Ada mirándose las uñas—. Por eso traje aquí a Kem. Acabamos de llegar también.

Una mesera se acercó a nuestra mesa. Se le veía un poco estresada por la cantidad de gente que había aquí. Amber pidió cuatro porciones de pastel de chocolate mientras su hermana Ada, pidió dos porciones y agregó dos frapuccinos al pedido. La chica se alejó a paso rápido dejando la mesa en un incómodo silencio que nadie quería romper.

Mi mirada pasaba de Kylan, a Kem, a Ada y a los demás presentes.

Henry fue el único en atreverse a hablar.

El chico de arriba #1 | EN FÍSICODonde viven las historias. Descúbrelo ahora