Truth Hurt.

➙ Guardiana mágica.

Con la ayuda de Wendy, Lucy no duró mucho en despertar, y cuando lo hizo se sorprendió al encontrarlos a todos en la pequeña habitación dormidos en el piso. La aún rubia se levantó cuidadosamente y sin más desapareció, dejando una bola de humo en su lugar; Los dragón slayeer despertaron abruptamente al no sentir más el olor de Lucy, y empezaron a buscarla por toda la casa.

En otro lugar la rubia llegaba a una lugar desconocido, dónde lo único alrededor era un enorme castillo de un aspecto algo tétrico rodeado por una gran foresta. Lucy siguió caminando hasta llegar a las enormes puertas del edificio, dónde sin pensarlo dos veces, lanzó una patada, y toda la estructura de madera se hizo cenizas frente la rubia, que sin pensarlo mucho movió su cabello elegantemente, sabía que este se estaba tornando de color gris.

Lucy con pasos seguro siguió su camino, conocía perfectamente aquel lugar, y no importaba cuan grande fuese, ella conocía hacía cada pasillo, trampa, salida, y habitación; así que sin durar mucho se dirigió a dónde sabía que ellos estarían esperándola, lo sabía porque ellos habían sido los que la habían despertado e invocado a ese lugar. Cuando Lucy llegó a la habitación no se sorprendió ver a 3 personas reunidas, más sin embargo, no eran los único allí, ya que también se encontraba Daian en aquel lugar. La peligris se dirigió hacia el único lugar vació de la mesa y esperó a que empezasen a hablar.

—Hemos estado viendo todo lo que ha pasado últimamente. —habló alguien con voz grave, este era un hombre alto y guapo, con cabello rubio y ojos de bronce. Su cabello era largo y tenía una perilla que cubría la mayor parte de su rostro. Vestía una túnica roja y blanca con acentos de oro. Este hombre era Zeus.

—No vamos a negar que nos sorprendió ver que aún existían miembros del clan Karashi. —esta vez habló un hombre menos mayor que el otro, con el cabello color verde oscuro hasta los hombros en ondas. Él parecía tener orejas puntiagudas y una tez pálida. Lo que más llamaba la atención eran sus ojos, uno de color bronce y otro rojo. Hades.

—A mí también, sin embargo ha heredado la magia de su clan y ha sabido entrenarla por su cuenta sola, es muy hábil. —declaró Lucy, había visto a Erza durante todos los juegos mágicos, y tenía un dominio sorprendente de las espaldas. Por eso el clan Heartifilia y Karashi eran buenos aliados, ya que mientras los primeros se dedicaban al dominio y aprendizaje de la magia, los segundos se enfocaban más en la armas físicas.

—Sí, lo hemos notado. No te haría mal hacer amistad con ella, Lucy. Hace muchos años sus clanes eran grandes aliados. —sonrió con calidez el rubio.

—Daian nos ha contado sobre algo que pasó recientemente en cierta pelea. —habló directamente el más joven de todos, tenía el pelo de color rojo vino el cual le llegaba a media espalda formando mechones, con un fleco peinado hacia atrás y unos ojos color verde esmeralda. Lucy lo miró fijamente, agradecía que él fuese directo. Dioniso.

—No sólo eso, también notamos que Mintrell empezó a mover a sus peones hacía Fiore...

—Lo sé, he tenido la suerte de encontrármelos hace poco —Lucy rodó los ojos con sarcasmo, se había dado cuenta desde que sintió la presencia de los encapuchados que provenía den Minstrell, y lo pudo confirmar con el ataque de su oponente—. Pero, tenían algo extraño... era cómo si no tuviesen rostros.

Daian suspiró profundamente antes de hablar.

—Según fuentes confiables el consejo mágico de Minstrell reunió a todos los gremios del país, ofreciendo una gran recompensa al que destruyese Fiore. Las personas que viste eran parte de Element Tail, sin embargo, el problema es su maestro, al parecer tiene cierta magia que le permite deformar rostros y cuerpos de las personas.

—Tus predicciones fueron casi exactas. Pero, hay algo que no sabes aún.

—Ya debes saber qué cada país tiene su propio consejo mágico, política, y demás. Pero, existe un lugar al que le llaman "Ministerio Esencial",  se supone que sólo pocas personas saben de esto, pero es un organización que mantiene el orden entre 13 países desde hace siglos. —Lucy frunció el ceño, Ishgar estaba compuesto por 14 países, faltaba uno.

—Hay un país que no fue incorporado en este acuerdo.

—Fiore —habló de nuevo Daian—, los demás países por alguna razón no quisieron que este país se uniese. Las razones son muy primitivas, y no son relevantes; el problema aquí es qué Fiore es un lugar donde las leyes no se rigen por el Ministerio, un pedazo de tierra que todos quieren conquistar para obtener la superioridad mágica.

—Sigo sin entender el porqué todo esto de repente.

—Como ya sabes Lucy, Fiore es una nueva potencia mundial entre las naciones mágicas, y el Ministerio Esencial no puede permitir eso, así que han decidido indirectamente declararle la guerra, pero hay una falla, y es que existe una ley fundamental que ningún mago o humano puede romper, algo dicho por el fundador del orden mágico: Una guerra no puede ser considerada guerra hasta que ambas partes estén de acuerdo.

—Eso quiere decir que hasta ahora, lo que han hecho son sólo provocaciones.

—Sí, y seguirán moviendo pequeños peones hasta que Fiore decida caer justo en la trampa.

—¿Qué pasará una vez inicie la guerra?

Todos los demás se miraron entre sí, debían contestar la pregunta de la rubia. Debían informarla, porque sabían que tarde o temprano iba a suceder.

—Fiore será considerada una amenazada a nivel nacional.

Lucy se tensó, podría contra un país, pero la unión de 13 países era algo que había sobrepasado sus expectativas. Había deducido por su misma cuenta, que debido a su potencia mágica Fairy Tail y Sabertooth serían los principales afectados, sin embargo por su mente siquiera pasó lo que le estaban informando. Por un momento se sintió desvanecer, no sabría si iba a poder lidiar con todo ello, pero sabía que de alguna manera tenía el deber de hacerle frente, después de todo, esa era su responsabilidad y obligación como guardiana mágica.