Ésto debe de ser una broma, no sé cómo puede creer Andrew que yo voy a aprender en una semana lo que no he aprendido en un año.
Salí de la dirección un poco molesta, el descanso había terminado así que me tocaba la siguiente clase. Las horas se hacían eternas, quería salir de ese lugar. Necesitaba fumarme un cigarrillo lo más pronto posible.
Al llegar la última hora de clase, aproveché de escaparme mientras se hacía el cambio de profesor. Iba caminando por uno de los pasillos cuando escucho una voz masculina decir mi nombre.
- ¿Noah? –Volteé y vi que era Andrew. De la misma forma que volteé para mirarlo, volteé para seguir caminando- ¡Noah, espera! –corrió hacia mí y me tomó del brazo para detenerme.
- ¿Qué? –pregunté de mala gana girándome para mirarlo sería.
- ¿No deberías estar en clases? –preguntó confundido.
- Si, así es. –respondí con ironía.
- ¿Entonces qué haces aquí?
- Eso mismo me pregunto yo. No sé qué hago aquí, si debería de estar afuera fumándome un cigarro. –espeté mientras volteaba para seguir caminando.
- ¡No, Noah! –volvió a tomarme por el brazo.
- ¡Déjame! –Grité soltándome de su agarre- ¡Si no me vas a ayudar, no me molestes!
- Lo hago por tu bien. Y baja la voz, por favor. –Pidió mirando hacia todos lados, asegurándose de que nadie nos viera- Ven, acompáñame.
Me tomó de la mano y me llevó a toda prisa a su oficina. Nadie podía enterarse de que él y yo teníamos algún tipo de confianza.
Al entrar le pasó seguro a la puerta, yo tiré el bolso al suelo me quedé parada junto al escritorio.
- Noah, No seas tan terca y piensa, si yo te apruebo el año sin haber estudiado, pensarán mal de mí y se pondrán en mi contra.
- Solo estas pensando en ti. –exclamé cruzándome de brazos.
- ¡También estoy pensando en ti, Noah! Yo sé que tú eres muy inteligente. Debes estudiar, no es nada del otro mundo. –Se acerco a mí y acomodó mi cabello atrás de la oreja- Eres perfecta, tú puedes con todo... Y con mucho más.
- No, Andrew. –Negué mientras lo miraba a los ojos- Solo quedan 5 días.
- Mira, lo que puedo hacer es pedirle a los profesores las preguntas que pondrán en los exámenes finales. Así no estaremos estudiando lo que no es, he iremos justo al grano. Sera fácil, ya verás. –Acarició mi mejilla y se acercó a besarme.
Poco a poco el beso se fue intensificando, Andrew me tomó por ambos muslos y me alzó para luego sentarme en el escritorio, tomó mi cabello dejando al descubierto mi cuello y lo besó con deseo mientras mi mano recorría su espalda por encima de la camisa. Podía sentir como un calor se apoderaba de mi cuerpo. Metió las manos por dentro de mi camisa y empezó a tocar toda mi espalda, lo cual me ocasionaba un escalofrió placentero. Esta vez era yo la que besaba sus labios con un deseo insaciable mientras rodeaba su cintura con mis piernas.
De repente, sonó la puerta. Ambos nos detuvimos en seco, Andrew me hizo seña de que me escondiera detrás de unos armarios que había por ahí cerca. Tomé mi bolso y rápidamente me escondí. Nadie podía saber que yo estaba aquí, puesto que la puerta tenía seguro y se supone que todavía estaba en hora de clases.
- ¿Director Collins? –preguntó la coordinadora al otro lado de la puerta.
- Si, aquí estoy señora Miller. –respondió acomodándose la camisa para luego abrir la puerta.
- ¿Por qué cerró con seguro? –Preguntó la coordinadora entrando a la oficina para luego mirar para todos lados.
- Quería un rato de tranquilidad, no quería que nadie me molestara. –contestó Andrew sentándose en su respectiva silla.
- Me imagino que debes estar agobiado por todo esto del divorcio. –comentó la señora Miller sentándose en una silla frente a él.
- Emm, si, un poco. –musitó en un suspiró.
- ¿Por qué no hablas con Alice? todavía tienen tiempo de arreglar las cosas. ¿Por qué no piensan en la criatura que está por nacer? Es su primer hijo señor Collins.
No sé por qué al escuchar eso, todo mi cuerpo se llenó de celos. Andrew iba a tener un hijo.
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Deseo Insaciable © (EDITANDO)
RomancePor culpa de problemas familiares, Noah Evans va mal en su último año de estudios. En una visita a la oficina del director, toda su vida empieza a cambiar lentamente cuando descubre que él tiene deseos eróticos hacia ella. ¿Sentirá Noah lo mismo? ¿S...