Capítulo 31

1.1K 154 126
                                    

Perfecto.

Clases de gimnasia con una humedad asfixiante y un profesor gordo viendo a los pobres alumnos trotar alrededor del gimnasio, mientras el claro no mueve ni un dedo. Los estudiantes no eran idiotas y aprovechaban cada segundo en el que el se distraía para poder caminar y podré volver a respirar con tranquilidad.

Town lo hacía sin problema alguno (o eso parecia), mientras que el pobre de eak estaba muriéndose.

-hasta aquí llegué- hablo haciéndose el dramático. El león que estaba cansando decidió esperar a su amigo que se estaba quedando atrás, redujo un poco la velocidad y se quedó al lado de eak.

-¿tan poca resistencia tienes?- pregunto el pelirojo a su compañero con una sonrisa que demostraba superioridad.

-callate joto de mierda, te voy a meter tus palabras por donde no te entra la luz del sol- nunca tienen que juzgar algún aspecto de eak, todo en el es perfecto. Si llegan a decir algo, se ganaron un lugar en su lista negra. -¡¡chingalamadre!! me muero!!- gritaba histérico

-vamos eak, ni siquiera hiciste una vuelta entera- dijo, empujando a su compañero para que vaya mas rápido.

-sueltame o te vómito un pulmón aquí mismo!!- town le dio igual lo que dijo y siguió empujandolo. Realmente le daba mucha risa las cosas que llegaba a decir eak con tan sólo no tener que trotar a un ritmo algo rápido. -quiero que sepas...-tomo un descanso para respirar cosa que se le hacía algo difícil.

-¿que me amas y me vas a heredar toda tu fortuna cuando mueras? Aww no era necesario- una mirada que decía claramente "si pudiera te arrancaria un brazo" surgió en el rostro del menor.

-eres un pendejo sin corazón... - dijo entre cortado con aun una cara de odio. Aunque en realidad estaba bastante feliz porque town se comenzaba a sentir un poco mejor luego de lo que paso.

-no tengo corazón porque tu me lo robaste- dijo en un tono pateticamente romántico. Eak quería reír pero no tenía el suficiente aire como para hacerlo.

Finalmente el profesor toco el silbato, haciendo que los alumnos se detuvieran y que el aire volviera a los pulmones de el peligris.

-¡¡estiren!!- grito a lo que los jóvenes estiraron sus brazos hacia abajo tratando de alcanzar sus pies. Siendo sinceros nadie estaba esforzandose, todos estaban muy cansados como para intentarlo.

-oye- llamo eak a su amigo -¿no quieres venir esta tarde a mi casa?- pregunto mirandolo de costado.

-si claro ¿porque no?- esbozo una gran sonrisa y se puso derecho -podriamos pasar por una repostería que hay cerca de allí y comprar algo para la tarde.-

-perfecto ¿que tienes en mente?- pregunto imitando su
acción

-¿que tal unas donas?- eak asintio.
________________________________

Ya se estaban yendo de la escuela y ahora iban camino a la repostería, town ya le había avisado a su abuelo que no iba a llegar porque iría a casa de un amigo. Eak le aviso a su madre que pudiera un plato mas en la mesa porque llevaría a su" esposa" según lo que le aviso a su madre.

Al llegar entraron, había una gran cantidad de postres, cosa que a hacían que a cualquier fan de lo dulce se le cayese la baba.

Hicieron su pedido y se terminaron llevando una caja de donas, rellenas, bañadas en chocolate, con azúcar, todo era muy empalagoso.

En todo el camino a la casa de el peligris los dos amigos se la pasaron bromeando como hacían usualmente. En unos minutos llegaron, entraron escandalosamente a la casa llamando la atención de las personas que estaban pacificamente ahí.

-ya llegue- grito eak cerrando la puerta.

Maria vino corriendo a saludar a su hermano y a su acompañante, había escuchado claramente su voz y por lo que sabía quién era.

-hermanito,trautra!!!!- dijo mientras venía corriendo, se topo con un escalón que había en la sala para bajar a la puerta y por poco se cae a no ser porque el águila reacciono rapido.

-calmate pulga- dijo eak sonriendo mientras le acariciaba la cabeza a la niña que ahora estaba abrazada a sus piernas, era lindo verlo actuar así con su hermana.

-hola chicos- saludo su madre saliendo de uno de los cuartos mientras se dirigia a la salida -¿Como les fue?- pregunto mientras se acomodaba las mangas.

-bastante bien la verdad- respondió eak, town no hablaba mucho por un poquito de vergüenza pero ya se acostumbraria.

-bien, deje la comida en la mesa, si quieren mas la olla esta en la cocina. Tengo que ir a dejar a maría a un cumpleaños y luego iré de compras.- aviso

-ok- respondió eak

-¿trajeron algo?- pregunto mirando curiosa la caja.

-es un pequeño postre para la tarde- hablo finalmente town -son donas ¿No quieren llevarse una para el camino?- pregunto humildemente.

-no es necesario, son para ustedes- dijo moviendo su mano de un lado a otro.

-no se preocupe hay suficientes, compramos muchas- saco de la caja dos donas, ambas bañadas en chocolate, solo que uno estaba teñido de rosa pastel. Le entregó una a la madre de eak y otro a maría.

-muchas gracias querido- dijo sonriendole, piso a su hijo para después decirle algo entre dientes -¿porque no me saliste así carajo?-

-gracias!!- dijo maria dándole un mordisco a el postre, una linda sonrisa se puso en su rostro. Que mejor para poner a una persona feliz que la comida.

Se fueron dejando a los dos jóvenes solos. -¿Comemos?- pregunto town yendo hacia el comedor.

-me gustaría comerte a ti- dijo bajando un poco la voz.

-¿que?-

-QUE TE HAMO EZOPOZA MIA!!- grito tirándose encima de town.

_____________

Hasta acá el capítulo

Volvieron las imágenes de la multimedia :3

Bajo La Lluvia (eaktrap)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora