Vacaciones.

Capítulo 4. ㅡ Bienvenido.

"No sé qué fue, Minnie suele ser débil, pero... Pero él nunca había pasado por este tipo de cosas."

"Quizá le habrá causado impresión conocerme, jajá."

"Claro, por supuesto que sí, JongDae."

Bastardo.

Te odio.

- ¡Minnie, al fin despiertas! –Baekhyun fue el primero en tomarme por sorpresa y rodearme con los brazos, mientras tanto aún intentaba mantenerme sentado sin perder el equilibrio. Una media sonrisa apareció en mi rostro para recibirle.

- Lo siento... Quizá el viaje fue demasiado pesado para mí. –Mentí, y aquello, por supuesto, no pasó desapercibido para Él, que me miraba fijamente, sentado en una de aquellas sillas del comedor que juntos habíamos elegido una fría mañana de Noviembre.

JongDae quería un comedor, porque sus padres querían ir a visitarnos cada Navidad, y nuestra pequeña mesita era únicamente una bandeja con base; comíamos en la cama o veíamos televisión en nuestro sofá. No necesitábamos un comedor grande, pues realmente, sólo vivíamos nosotros dos ahí.

Había conservado los muebles.

Mi corazón se agitó cuándo JongDae me sonrió. Sé que lo hizo para mí, lo conocía lo suficiente. Conocía cada movimiento, cada mirada, cada sonrisa.

Lo conocía a la perfección, y lo odiaba todavía más.

- Es un placer, Minseok. ¿Te sientes mejor ahora? –Pronunció aquello último, como si saborease las palabras que sus venenosos labios dejaban escapar.

Yo... Por un momento, sentí que éramos solo nosotros dos en aquella habitación, hasta que el aire tenso se irrumpió debido a JongIn y su escandalosa forma de evitar que ambos nos matemos con miradas.

- ¡Vayamos a comer! Vayamos a comer, nosotros invitamos, se los debemos.

"Se los debemos"

Solté una carcajada tosca, sin gracia, y todas las miradas volvían a estar sobre mí, miradas con un millar de interrogantes. Me silencié al instante y negué con la cabeza, volviendo a recostarme en el sofá. Aquél pachoncito y cómodo sofá.

- Estoy cansado... Sólo quiero dormir, Vayan ustedes. –Baekhyun me reprochó con la mirada, pero lo que sea que debía objetar, se lo reservó.

- Está bien, Minnie. Ya está lista tu habitación. Compartirás con Sehunnie. –Me guiñó el ojo, mi instinto decidió aceptar dicha insinuación, aunque sea sólo para terminar éste estúpido juego que JongDae había comenzado.

- ¡Perfecto! Sehunnie, me harás compañía toda la noche. –Mencioné, con una tenue sonrisa en el rostro.

Si de algo debía estar seguro aquél despreciable ser, es que no venía solo. Saber que yo era la persona de la que Chanyeol habló tan mal en el autobús me armó de valor.

 Y yo no voy a ser la presa de JongDae.

Tú vas a ser mi presa ahora, gato apestoso.

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 Espero de corazón que la historia les esté gustando; cuéntenme qué les está pareciendo y si creen que algo debe cambiar, no duden en decirme, yo los leeré~

Pamela Montaes, suicidayazmin. Muchas gracias. <3