10. Mudanza

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El fin de semana llego en un abrir y cerrar de ojos. Lo que significaba que había llegado el momento de la mudanza.

Al parecer el 'vamos a mudarnos' de mamá, no solo iba para mi sino tambien para Scott. Mamá se encontraba empacando sus ultimas cosas en su habitación mientras yo me despedía de la que habia sido mi habitación por toda mi vida.

Salí de mi habitación y baje a la primera planta donde se encontraban Dylan y Logan que habian venido a ayudar a empacar, los ignore y seguí mi camino hacia el lugar que tenia ya en mente ir. Era irónicamente mi lugar favorito de la casa, llegué a la habitación y abrí la puerta, todo estaba en su lugar yo misma me habia encargado de que nada se moviera, de que todo se mantuviera donde habia sido dejado alguna vez.

Camine hacia el gran escritorio que se encontraba en el centro de la habitacion, encima de este reposaban cuatro fotografías cada uno en portaretrato que habia sido diseñado por mi cuando era niña en mi clase de arte. Una de las fotos era de mi cuando apenas tenia dias de nacida, en la foto era cargada por un Nicholas sonriente supongo que mamá es quien toma la fotografia. En la segunda estan Nicholas y mamá con togas y birretes de graduación cada uno, esa fue tomada el dia de su graduación de secundaria, el mismo en que Nicholas le propuso matrimonio a mamá. La tercera es Nicholas con sus padres, o sea, mis abuelos paternos. Y la cuarta.. mis ojos se llenan de lagrimas pero no las permito salir. Somos mamá, Nicholas y yo al parecer fue tomada en un dia de campo, no recuerdo muy bien, Nicholas me encarga en sus hombros mientras yo rió y mamá nos observa sonriendo. A simple vista parecemos de esas familias perfectas que vemos en las revistas o en los comerciales de televisión. En realidad lo eramos, claro, hasta que Nicholas decidío enviar a la mierda nuestra perfecta familia.

Siento una lagrima deslizarse por mi mejilla y a esa le siguen una, dos, tres, cuatro.. tomó el portaretrato en mis manos y me siento en la comoda silla giratoria que solía pertenecer a Nicholas. Aquí en su despacho me pongo a llorar como una niña pequeña que fue asustada por una tormenta electrica, este solía ser el lugar donde el hacia las tareas de la universidad, el lugar que cuando no podia dormir y bajaba por un vaso de agua encontraba la luz encendida y la puerta semi-abierta por donde podía verlo realizando sus proyectos y tesis que le dejaban hasta muy altas horas de la noche.

Él iba ser el mejor doctor de todos ,yo lo sabía, él me habia prometido que seria su primer paciente.

La habitación se llena de mis gemidos provocados por el llanto mientras aferro a mi pecho la fotografía de mi perfecta familia. Ahora las cosas cambiaran, dicen que los cambios son buenos pero mi mente masoquista se rehusa a dejar en el pasado a Nicholas.. A mi padre.

Me levanto de la silla y mi paseo por toda la habitación, observando sus libros en descansan en el librero, sus lapices, sus examenes que aún estan encima del escritorio. En el librero hay un albúm, mi favorito, no sabía de su existencia hasta que un dia mientras buscaba alguna pista que me llevara a descubrir el paradero de Nicholas lo descubri. Era un albúm de fotografías mias, desde mi primer dia de vida donde habia una fotografia por cada logro que conseguía, por ejemplo, el dia que aprendí a gatear, el dia que dije mi primera palabra, el dia que aprendi a caminar, a manejar bicicleta, y asi sucesivamente, cada uno contaba con una pequeña descripcion donde se reflejaba la emoción de Nicholas.

Tomé el album y lo aferre a mi pecho y el llanto se intestifico, ese album era mi punto debil. En verdad, todo lo relacionado con Nicholas era un tema delicado para mi.

Me apoye en la pared y me fui resbalando hasta terminar sentada en el suelo, me hice bolita y abrace mis dos cosas favoritas.

Senti la puerta abrirse y pasos lentos se acercaban a mi, pude reconocer su aroma cuando estuvo lo suficiente cerca. Sentí su mano en mi hombro y dirigi mis ojos a Logan que me miraba con la preocupacion reflejada en sus ojos. Él sabia que no me sentia bien, que no necesitaba palabras de aliento, lo único que necesitaba era un abrazo, y como si leyera mi mente tomó mi muñeca dando un jalon que me inclino hacia él, fundiendonos en un abrazo.

Prometo No EnamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora